En otro lugar, entre las faldas de las montañas, NEMU es llevada por alguien que la carga en brazos, ella está envuelta en pieles enrolladas en su cuerpo y atada por una cuerda para que no se abran las pieles, esta piel es de la misma que viste el ser que la carga hacia dentro de una cueva.
Se interna unos 150 metros dentro de la cueva, hasta llegar a una fogata.
NEMU, es recostada sobre un montón de pieles (pocas), el ser que la llevó, se quita las pieles una a una, va descubriendo que se trata de un ser humano.
Es un joven apuesto, de larga cabellera y con un parecido impresionante con OGLAE, pero, su estatura es muy alta y el color de su cabello es diferente, de un tono azulado.
El hombre, tiene varias pieles "tendidas" cerca de la fogata para secarlas.
El hombre, quita las pieles y las va acomodando una sobre otra formando un colchón, va hasta el lugar donde dejó a NEMU, la toma en brazos y la lleva hasta las pieles, la coloca sobre ellas y jala el lazo que deja ir quitando las pieles sobre ella.
El joven toca sus manos y el rostro de NEMU, puede ver que su temperatura ha ido mejorando, la mira inconsciente y puede ver los rasgos de la joven.
Le parece hermosa, al ver sus labios, el tono azulado de los mismos, le preocupa un poco.
Se dirige a la fogata y aviva el fuego.
Regresa hasta la cama de pieles.
La observa un poco más, al fin decide ir desabrochando la ropa de la joven.
Con cuidado, va quitando sus prendas, para desnudarla.
En la isla donde se encuentra ESU, ella está ayudando a unas señoras y jóvenes a cortar verduras para la comida afuera de la choza.
ESU siente que la observan y al voltear, descubre que es OGLAE quien, al verse descubierto, se da la vuelta y se va.
ESU pregunta a las señoras, ¿a dónde va OGLAE con los hombres cada mañana?
Las mujeres le dicen que están haciendo una barca para ella, no sólo se trata de clavar la madera, también tienen que talar los árboles y cortar la madera.
ESU se queda pensativa, sin dudas, les ha causado mucho trabajo su estadía ahí.
NAIFU va caminando, según, por el paisaje, ha pasado el lago que había divisado tras las dos montañas, se dirige hacia el mar.
Está aún por en medio de arboledas, se ve demasiado cansada, hambrienta y con sueño, al cabo de unos pasos, queda tirada en el piso, alcanza a ver unas sombras pequeñas que se van acercando a ella, pierde el conocimiento.
Las personas que llegaron hasta ella, la levantan entre todos y comienzan a llevársela.
Se arma un gran alboroto debajo de la aldea, ESU y los demás se asoman.
Ven que un grupo de los que se fueron, traen a alguien grande cargando, pueden ver que se trata de una mujer.
Usan el contrapeso de la doble plataforma, muchos corren hacia un lado de la aldea.
Una de las mujeres le dice a ESU, así es cómo fue llevada ella a la aldea.
ESU desea ver a la persona encontrada.
A cierta distancia, ESU logra reconocer a NAIFU, ESU se apresura a pedir que la dejen pasar, explica que se trata de su amiga.
El que la acompaña es OGLAE que, al escuchar esto, se queda un poco serio.
Observa a la mujer recién llegada, su presencia es un aviso de que ESU se irá de verdad.
OGLAE pide ayuda para que lleven a la mujer a la choza.
ESU le pide que espere, ella explica que es una sanadora, si le permite, ella podrá sanar a su amiga.
OGLAE la mira algo confundido, termina aceptando.
La condición de NAIFU es algo precaria, sus heridas la hicieron sangran por horas.
ESU, coloca sus manos sobre la piel de NAIFU y usa su poder de sanación.
Todos están atentos, poco a poco asombrados al ver cómo sanan sus heridas.
ESU sanana NAIFU que, recobra la consciencia y ha recuperado su fuerza.
Todos asombrados se alegran.
NAIFU al ver a ESU, lo primero que hace es abrazarla.
Han pasado por mucho en tan poco tiempo.
OGLAE siente tranquilidad porque la chica se encuentra bien, pero, está muy serio, sabe que ESU se irá.
OGLAE, al ver que la joven baja de la plataforma hacia el puente, hace que baje la plataforma junto con él.
ESU lo sigue con la mirada, ella piensa que, nunca lo había visto así de serio.
OGLAE se ha bajado, sus hombres lo siguen, se alejan para seguir trabajando.
ESU siente algo de pesar.
Le alegra ver a su amiga, pero, algo de ella, piensa en OGLAE.
FIN DE CAPITULO 78