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Chapter 59 - CAPITULO 59: EL ASESINO DE MI MADRE

El grupo está sorprendido, han llegado directamente a la habitación del trono, han encontrado a la PRINCESA SATORI Y con ella a AISU, aquél ser todopoderoso que ha sumido a INFRAMUNDO en la desesperación y la raíz de todos sus males.

Sin guardias aparentemente, no obstante, se sienten en desventaja.

Parece una pesadilla, la leyenda es una realidad.

AISU observa al grupo, dice con rencor (no especifica a quien) que, en realidad fue un hecho nefasto el nacimiento de esa persona, por su causa, se destruyó el camino que guiaba a su amo a la DIMENSIÓN DE INFRAMUNDO (AISU sonríe burlón).

Para ventaja de él.

Ella aún no tiene el poder supremo y su frágil cuerpo recibe daño cada vez que se esfuerza, cada vez que usa su poder vital, por eso, será su fin.

Ella no representa una amenaza para él.

Pero, se asegurará de que su muerte quede como ofrenda para su amo.

Los miembros del grupo se ponen alerta.

Dicho esto, TOIRE mira a KEKI con preocupación, no sabe si habla de ella o de NEMU que, también se ve afectada por el comentario.

INKU está alerta, está a la expectativa, hay un viento ligero que proviene del portal.

AISU le anuncia complacido que, por fin se ha reconstruido el camino de su gran maestro ¡CHONT-SU!

Detrás de INKU que, se ubica detrás de los otros 3, se ve llegar al equipo de KIRO, UISUKII y los demás.

Con heridas de consideración, pero, todos con la firmeza de enfrentarlo, detrás de ellos, vienen algunos de los CHOSEN, KEKI mira hacia atrás y mira a los dos equipos acercarse.

Ella piensa en cómo debe atacarlos sin causarles daño, después de todo, están siendo controlados por AISU.

Esto prueba que son leales a INFRAMUNDO.

¿acaso hay algo que ella pueda hacer para que salgan del trance?

Ella piensa que, necesita poder, en verdad lo necesita.

Le da rabia sentirse limitada por no haber concluido sus estudios.

KEKI se concentra en reunir poder mientras AISU hace alarde de la llegada de su amo y los grupos esperan una orden, la voz de AISU rompe su concentración.

AISU le confiesa que, al igual que su madre, ella morirá ahí (ahora saben que se refiere a KEKI) y también le dice que ella pagará por la herida que su madre le causó.

Influenciando a los CHOSEN, los llama "demonios" y les ordena que se den un festín con los invasores.

El grupo se ha reunido para cuidarse las espaldas, los hechiceros los tienen rodeados, los hechiceros comienzan a mutar sus cuerpos a demonios humanoides parecidos al que los atacó cuando estaban con TESUTO.

Este es el poder del mal.

Los hechiceros se lanzan sobre ellos.

Todos se defienden de la mejor manera que pueden, KEKI sabe que ahora el poder desarmarlos no es una opción, tal vez tenga que detenerlos matándolos.

En una oportunidad, KEKI desata una tormenta de llamas y pide a WAPURO que, formen una barrera protectora para los demás integrantes del equipo (con el sello del bosque del que WAPURO era la guardiana).

Las llamaradas de KEKI son devastadoras pero los CHOSEN las resisten y la atacan.

También atacan a la barrera protectora y es ESU la que ayuda a WAPURO a reforzarla uniendo su poder al de ella.

KEKI, se ve obligada a desatar mas poder sobre ellos, parece que casi pierde el control sobre su poder.

AISU la alienta a seguir malgastando su energía.

Los CHOSEN caen llenos de ceniza, pero, la ceniza se va desprendiendo del cuerpo de los sabios inconscientes.

Esto demuestra que pudo quemar su invasión demoníaca.

WAPURO se sorprende de que ella pueda tener tal poder de purificación.

AISU reacciona de inmediato, atacando a KEKI con un cristal rojo que le atraviesa un hombro.

OKE, NAIFU, ESU Y TOIRE también fueron atacados por estos cristales, antes de poder quitárselos, estos se disuelven dentro de su cuerpo, todos se duelen de la herida.

AISU deja salir su aura terrorífica.

LA PRINCESA SATORI, sabe el potencial que AISU posee, sabe lo que planea hacer y con desesperación, le pide que se detenga.

AISU no le presta atención.

SATORI le dice que si la ama, detenga los ataques.

AISU furioso por la petición de SATORI, cierra su corazón a la PRINCESA.

El cuerpo de AISU es rodeado por las llamas azules como el cristal y su forma comienza a cambiar, se va transformando poco a poco en un reptil, apareciendo escamas por la piel visible, es una forma de reptil dragonoide, en ese momento, la infección que venía en los cristales les inbuye de dolores en el cuerpo, como si la herida quemara.

Varios de ellos, caen al suelo.

AISU mira a la PRINCESA, sus lágrimas conmueven su corazón, pero, el miedo de perderla le hace endurecer su alma.

El veneno de los cristales comienza a hacer efecto en las heridas.

AISU festeja ver el fin de KEKI frente a él.

Los demás tratan de atacarlo.

WAPURO ha tratado de ejercer sanación en ESU para que la ayude a curar a los demás, por mas que se esfuerza, es inútil, es como una maldición, han quedado marcados, no hay sanación para eso.

AISU, mientras es atacado por los demás, con ataques a distancia dejando caer su poder sobre ellos, platica con regocijo que, la madre de KEKI, agotó su poder al tratar de sellarlo, sin embargo, ahora que el camino se reconstruyó, AISU tiene el poder entero, poder que NANEKI había sellado, es por eso que, pudo cambiar su forma y que ella (KEKI) no tiene ningún poder en absoluto y que su poder vital acabará matándola también como hizo su querida madre.

TOIRE recuerda las palabras de WAPURO, ella le dijo lo mismo a KEKI.

Ninguno lo puede creer, TOIRE se niega a perder a KEKI, aunque, justo ahora sienta que están muriendo, AISU no descansará hasta matar a KEKI.

INKU está muy preocupado y se esfuerza en atacar a AISU, la vida de OKE y los demás depende de ellos, si es que hay un futuro para ellos, deben intentar conseguirlo o llevarse a AISU con ellos a la muerte.

Todos lo saben y caen en una terrible angustia.

Los afectados por los cristales comienzan a delirar.

INKU, se acerca a OKE, la toma en sus brazos, AISU dice no tener nada que hacer mas que esperar.

SATORI ruega desesperada a AISU que, desista del hechizo antes de que sea demasiado tarde.

WAPURO se acerca a OKE E INKU y emplea la sanación, probando suerte de si en ella si haga efecto, el miedo los invade al ver que no funciona, es un veneno poderoso, de otro mundo.

Todos los afectados comienzan a sentir que el dolor se acentúa por la fiebre.

OKE mira el rostro de impotencia de INKU, con una sonrisa algo forzada aguantando el dolor, con un hilo de voz, OKE dice a INKU que, no se preocupe, su estado no es tan malo.

INKU abraza con fuerza a OKE.

INKU piensa si ¿este es el final del equipo?

SATORI grita a AISU por piedad.

El poder de AISU es casi sublime.

FIN DE CAPITULO 59