¡Waaaa! ¡Waaaaaaaaaaaa! Los lloros de un niño se escuchaban en toda la casa.
"Acuesta al niño mientras termino de limpiar. Y cuéntale algún cuento corto para que se duerma por favor."
"Sí, señora."
"Gracias."
El hombre cogió al niño del suelo y se lo llevó a su cuarto.
"Vamos a la cama hijo, te voy a contar una leyenda para que te duermas. Escucha con atención y no te pierdas detalle. Según mitos y leyendas el pentágono es un signo sagrado, símbolo de poder. Muchos no saben porque, pero dicen que hace mucho tiempo se hablaba de 5 planetas que se comunicaban entre sí. Pasadizos que conectan otros mundos, muchos han intentado descubrirlos pero todos son objeto de burla, ahora solo es una leyenda en la que se basa la religión de este país. Pero no te preocupes, yo estoy seguro de que existen. Otros mundos, otras especies, todo por descubrir. Solo imaginate la satisfacción de llegar a otro lugar totalmente diferente, el cómo serán, el cómo se habrán desarrollado… Sólo imaginarlo me pone la piel de gallina. Ojalá algún día se descubran, esos mundos, esos lugares, ¿cuántas aventuras por delante esperarían?"
El hombre, un antiguo aventurero, soñaba despierto mientras imaginaba cómo sería ese sueño. Eso que le había proporcionado ser objeto de burlas y risas, pero que en el fondo de su corazón tenía la esperanza de que era realidad.
"¿Por qué le sigues hablando como si te entendiera, Caleb? No tiene ni 1 año."
"Pero Vica, ¿y si tenemos un hijo superdotado?"
"Deja esas tonterías, ¿cómo va a ser especial viniendo de un padre cómo tú?"
"Eso duele"
"Jajaja, no te preocupes, va a ser un gran niño." Vica le dio un beso a Caleb.
"¿Cómo sabes eso?"
"Está escrito en su nombre, Joyce, siempre alegre."
"Jajajajaja, tú y el significado de los nombres…"
"Vamos, deja que duerma y vente a la cama."
"Corriendo señora."
"Que audaz eres cuando quieres, Caleb."