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Chapter 241 - CAPÍTULO 194 - Cita con Drin.

CAPÍTULO 194 - Cita con Drin.

(Pov- Drin.)

¡Todo un día con mi cariño! ¡Todo un día para mí sola! ¡No debo compartirlo con nadie más! Extrañaba tenerlo para mí sola y sin necesidad de compartirlo con nadie. ¡Mi cariño es todo mío el día de hoy, no permitiré que nadie arruine mi día con mi cariño!

—¡¿Qué deberíamos hacer primero, cariño?!

¡Kya! ¡Estar abrazada de los brazos con mi cariño nos hace ver como una verdadera pareja!

Me duele el corazón cuando no puedo tratar a Kei como mi lindo esposo porque debemos mantener nuestra relación en secreto, ¡pero ahora puedo tratarlo como mi lindo esposo en público sin importar nada!

Estamos en una ciudad. Los dueños de esta ciudad es la familia Molfer. Kei propuso tener nuestra cita aquí porque dijo que los restaurantes son excelentes.

¡Y tendremos nuestra cena romántica en la noche!

—Mmm... Estamos en una ciudad portuaria. El mar está cerca. ¿Por qué no vamos a nadar un poco?

Ver a Kei en traje de baño. ¡Una vista que nunca me aburrirá!

—¡Por supuesto, vamos, cariño!

Tanto Kei como yo estamos usando nuestras formas de aventureros. Prefiero al Kei normal, pero no puedo pedirle que use su forma normal aquí, en donde todos nos ven.

—Oh, "perros calientes".

—¿"P-perros c-cali... calientes"?

El español, uno de los idiomas que Kei domina, es difícil de pronunciar.

—Me refiero a los hot dogs. Aunque aquí se les llama salchichas en pan. ¿Quieres comer algo antes de nadar?

—¡Claro, cariño!

Kei y yo nos acercamos a uno de estos puestos de comida y compró dos "perros calientes".

—Gracias por su compra.

Seguimos caminando mientras disfrutamos de nuestra comida. Prefiero la comida que mi cariño cocina, pero esto también está delicioso.

—Qué lindo. Tienes algo de mostaza en los labios, Drin.

Kei se acercó a mí y me lamió los labios... ¿Eh?

—¡¿Eh?!

¡Uwaaaah! ¡¿C-cariño?! ¡¿D-desde cuándo eres tan atrevido?! ¡Me encantas!

—Delicioso.

E-esa sonrisa... ¡Tan genial!

—T-te volviste demasiado atrevido, cariño. Tu nueva magia Súcubo me encanta.

—Supongo que me excedí un poco.

Me acarició la barbilla.

—Pero es difícil para mí controlarme cuando alguien tan linda como tú está tan cerca de mí.

—Cari...

No dejó que terminara de hablar y comenzó a besarme.

Nuestras lenguas están bailando entre ellas. Su olor y sabor me volverá loca. No sé si pueda controlarme más tiempo.

Mi sangre se está calentando y me puse húmeda. Quiero ser una con él.

—C-cariño, ¿vamos a una posada?

—Por supuesto.

S-solo una hora y después seguiremos con nuestra cita.

—Cariño...

El sabor de su miembro es uno de mis sabores favoritos. Saborearlo. Sentir su sabor me confirma que él y yo seguimos siendo cercanos. Seguimos siendo una pareja. Nos seguimos amando.

Yo fui su primera novia, pero no fui la primera en darle a su primer hijo.

¡P-pero seré la primera en tener a su primer hijo varón! Un mini Kei y después una mini Drin. O una pequeña niña parecida a Kei. Sea lo que sea, amaré a mi bebé con todo mi corazón.

—¿No te duele la garganta?

Retiré su miembro de mi boca y lo miré a los ojos, mientras sonreía y masajeaba su miembro con mi mano derecha.

Es bastante lindo que se preocupe por mí. Ese lado amable nunca cambiará a pesar del tiempo que pase.

—Creo que estoy un poco acostumbrada.

Comencé a lamer la punta de su miembro, mientras observo las reacciones tan lindas de Kei. Sus pequeños gemidos son tan adorables y excitantes, que me da más placer que masturbarme.

Le mordí un poco la punta y Kei se mordió los labios, intentando no quejarse del dolor que sintió.

Se mordió tan fuerte los labios que ahora está sangrando.

Lentamente recorrí su cuerpo con mi lengua hasta llegar a sus labios y lamí su deliciosa sangre.

—Probar cosas nuevas es divertido, cariño.

—Ah... S-sí...

Sin importarle que hace unos pocos segundos su miembro estuvo en mi boca, él comenzó a besarme y yo lo abracé con fuerza.

Tomé su miembro y lo metí dentro de mí. Comencé a moverme mientras Kei me lamía el cuello.

Para cualquier otra persona, el sexo es solo una manera de obtener placer, pero no para mí. Obviamente disfruto del placer que siento cuando hago el amor con mi cariño, pero esto tiene otro significado para mí. Me recuerda que ahora tengo a alguien especial en mi vida. Alguien que me ama y me protege. Tengo una persona que puedo llamar "cariño".

—Drin, ¿quieres aumentar la intensidad?

—Fufu. Hasta la pregunta ofende, cariño.

—Inventé algo extraño. ¿Te gustaría ser la primera en probarlo?

—Por supuesto.

Kei se alejó de mí y se dividió en dos.

—Cuando derroté a Akane obtuve una habilidad llamada [Tentáculos sombra].

Los brazos del Kei de cabello blanco se volvieron tentáculos negros y me rodeó con sus tentáculos.

Esto se siente raro, pero también interesante.

—¡Wow!

Me puso en una posición extraña en el aire.

El Kei de cabello negro me acarició las mejillas y puso su miembro en mis labios.

—Esto te gustará.

¿Eh...?

—¡Kya!

F-fue muy repentino. Sus tentáculos comenzaron a penetrar mi cuerpo, vaginal y analmente.

Kei me calló con su miembro cuando me lo metió en la boca.

—Vaya, vaya. Nos estamos volviendo unos pervertidos, Kei de cabello blanco.

—Sí. Nuestra tía estaría avergonzada.

Kei de cabello blanco me dio una fuerte nalgada e inconscientemente mordí el miembro de Kei

¡L-lo siento, cariño, la nalgada me tomó de sorpresa!

... ¿Eh? ¿E-está sonriendo? ¡¿L-lo disfrutó?! ¡¿Disfrutó de ese dolor?!

¡C-cariño, cambiaste demasiado!

—Mi sangre Súcubo...

Su ojo rosa comenzó a expulsar un vapor rosa y saboreó sus labios.

—Creo que me está afectando más de lo que pensé.

Los movimientos de los tentáculos se volvieron más rápidos. Las nalgadas eran cada vez más fuertes y el Kei de cabello negro retiró su miembro y su espeso y delicioso jugo de hombre cayó en mi cara.

—Lo siento, Drin, no puedo controlarme.

—Ah... Ah... N-no me molesta...

Mi sangre está más caliente que de costumbre.

Esto... Esto me encanta.

Creo que me quedaré dos horas más.

—Ese rostro tuyo lleno de placer me encanta, linda.

Kei tomó algo de su semen que estaba en mi cara con su dedo pulgar y me lo metió en la boca.

Comencé a chuparle el pulgar como si fuera su miembro y él lamió mi mejilla.

¡¿L-lamió su semen también?! ¡N-no pude verlo!

—Me encanta tu forma normal, Drin. Eres más hermosa.

Me acarició el pezón derecho con su mano. Tan agresivo... Este Kei me encanta. Pero personalmente prefiero al Kei tímido.

(Pov- Kei.)

Ah... Me siento seco. Duramos tres horas en la posada. Fue una experiencia interesante, debo admitirlo, pero mi magia Súcubo está comenzando a cambiarme cada vez más.

No sé si eso es bueno o malo. Debo confirmarlo.

Drin y yo llegamos a la playa, en un lugar alejado y solitario, para que nadie pueda vernos, pues usaremos nuestra formas normales.

—El viento es frío, pero eso no impedirá que disfrutemos de la playa, cariño.

—S-sí... E-esto... D-Drin, ¿t-te sigue doliendo el trasero?

Drin volteó a verme y se acercó demasiado a mí, mientras me sonríe de esa manera tan pícara y juguetona.

—Fufu. Eso debería preguntar yo. Hoy fuiste muy atrevido, cariño. Nunca pensé que me dejarías lamerte y meterte un dedo en el...

—¡Ahhhhh! ¡N-no lo digas! N-no sé qué me pasó. ¿A-acaso me estoy convirtiendo en un Súcubo?

—Creo que sería Íncubo.

—Mmm... Creo que Súcubo suena mejor... ¡¿Me volveré un ninfómano que solo piensa en tener sexo?!

—Por mi parte no me molesta. Todos los días solo tenemos sexo 30 minutos. Tener días como los de hoy cada semana sería fantástico. Fufu. Y todavía podías continuar, cariño. ¿Algún día lograré satisfacerte por completo? Tu resistencia es simplemente increíble.

Miré el traje de baño de Drin. Un traje de baño blanco. Combina con su tono de piel roja.

—P-por cierto, te ves bastante bien con ese traje de baño, Drin.

Drin saltó y me abrazó con sus piernas y brazos.

—Me alegra que te haya gustado.

Me dio un beso en los labios. Sus labios siguen tan dulces y adictivos como siempre.

—¿Nadamos, cariño?

—Sí. Solo espero que ningún calamar gigante intente profanar mi cuerpo.

Drin se rió y me tomó de la mano.

—¡Vamos, cariño!

Tan alegre como siempre. La Drin de la que me enamoré.

Pasamos toda la tarde en la playa, nadando, comiendo, hablando, riendo, incluso peleamos una vez como un pequeño entrenamiento.

¿El resultado?

—¡Hahahaha! Es difícil para ti golpearme, ¿verdad, cariño?

—Es difícil para mí golpear a la persona que amo.

Drin me derrotó por completo porque no me defendí y solo esquivaba sus ataques.

La noche llegó y estábamos cerca de una fogata.

Drin y yo estábamos acostados en la arena, y ella tenía su cabeza sobre mi estómago.

—¡Fue un divertido día, cariño! ¡Debemos repetirlo pronto!

—No creo que sea tan pronto, pero definitivamente lo vamos a repetir.

Observé las cientos... Miles de estrellas en el cielo.

Cada estrella es un sol. Tantas galaxias. Tantos planetas. Un sin fin de historias y personas.

—Cariño, ya lo pensé muy bien. Quiero que nuestro primer bebé se llame Kei, sin importar que sea hombre o mujer.

—Kein. Drin y Kei. Drinei. Drei. ¿No te gusta ninguno de esos nombres?

—Me encanta tu nombre, cariño.

Ella me acarició el brazo.

—Te amo, cariño... Y quiero morir contigo.

—No morirás. Si yo muero, solo yo moriré. Al llegar al paraíso le pediré al Dios supremo que me reencarne inmediatamente, para que mi reencarnación se enamore de nuevo de ti... Y si voy al infierno, pues...

—¡E-es imposible que vayas al infierno, cariño! ¡No lo mereces!

—He matado a cientos... Miles de personas, Drin.

—P-pero eran personas malas.

—Ah... No sé cómo funciona eso del paraíso y el infierno. No te preocupes, olvida eso.

Le acaricié el cabello.

—No pensemos más en eso. Disfrutemos de esta maravillosa vista.

—Sí, tienes razón.

—... Drin.

—¿Sí?

—Te amo.

Drin sonrió y se acercó a mí.

—No más de lo que yo te amo.

Me dio un beso en los labios y me abrazó.

Esta sensación es tan placentera... Llena de alegría.

Son de esos momentos en los que quieres que el tiempo se detenga para disfrutarlo por más tiempo.

Gracias por estar a mi lado, Drin.