Chapter 74 - CAPÍTULO 59- Rechazo.

CAPÍTULO 59- Rechazo.

Tiempo atrás.

La playa. Un lugar relajante.

Un lugar perfecto para ver a las chicas en traje de baño.

Un lugar perfecto para un pervertido como yo... Bueno, un poco realmente. Me gusta ver, pero no me atrevo a actuar... Ni siquiera me atrevo a decirle a una chica que salga conmigo.

Me gustaba una chica, Darnia... Pero no lo llamaría amor... Sí, estaba enamorado, pero... Realmente, no sentía amor verdadero… Simplemente me atraía y ya.

Al mismo tiempo, me gustaban otras dos chicas… Pero no tanto como Darnia... Soy una mierda de persona. Sé que solamente me debe gustar una chica, pero no podía evitarlo... Eso sí, si algún día salía con alguna chica, nunca la engañaría.

Muerte al NTR.

Estaba en la playa con Cris. Él me invitó, así que acepté.

El olor del mar me relaja... Y ver a las chicas me levanta el ánimo... Y levanta otra cosa también.

Tranquilo, amiguito.

Soy tímido, pero también pervertido… ¿Qué clase de combinación es esa?

—Oye, Kei, ¿realmente eres virgen?

Cris, estaba disfrutando la hermosa vista... ¡Pero ahora mi timidez se activó!

—¡¿Q-qué dices?! ¡No preguntes cosas raras!

—Solo quiero escuchar tu respuesta. Si me respondes, yo también la respondo.

Bueno... Cris es mi mejor amigo... Supongo que no se va a burlar.

—Cris, nunca he tenido novia... Sí, sigo virgen. Y si lo preguntas, no, no me masturbo... El placer del sexo no me interesa realmente… Te mentiría si te dijera que no quiero hacerlo. Sí, quiero perder la virginidad, pero con una chica que me ame.

—Interesante respuesta. Yo también soy virgen.

...

...

Espera... ¡¿Qué?!

Cris, un chico popular y guapo, ¿es virgen? Qué injusticia. Dios, ¿por qué nací feo?

—¡Eso fue inesperado! ¡Cris, eres popular y guapo! ¡¿Por qué…?! No, espera... Iba a decir algo estúpido... Vaya, vaya... Somos un par de vírgenes y sin novia... Al menos estamos juntos para compartir nuestra miseria.- Dije bromeando.

—¿Ya diste tu primer beso?

—… Mi prima es la única chica que me ha dado un beso en la boca.

—¿T-tu prima?

—¡Sin lengua! ¡Fue sin lengua! Ella intentaba besarme en la mejilla y me moví porque me empujó. Fue un accidente.

—Y-ya veo... Yo tampoco he besado a nadie... Me da curiosidad saber qué se siente.

—Yo también…

Ambos suspiramos... Vaya vida patética que tenemos.

—¡No venimos a deprimirnos! ¡Vamos a divertirnos!

Me paro de manos y hago una flexión.

—Me siento con energía de sobra.

Me levanto y sonrío.

—¡Vamos!

—Ya, ya, saca todo.

Estaba en un baño, vomitando.

—Te dije que no abrieras la boca bajo el agua.

Maldita sea, tragué demasiada agua. Qué asco. Las personas se orinan en el mar.

—Cris, si muero, te dejo mis libros. A Nia le dejaré mi habitación. A mi tía le dejaré toda mi fortuna.

—¿Fortuna?

—Empecé a ahorrar hace dos semanas. No es mucho, pero es mi pequeña fortuna.

—No te hagas el gracioso. Vamos a comer.

—Sí.

Cris y yo nos sentamos juntos en la arena y sacamos nuestra comida de nuestras mochilas.

—¿Realmente debemos esperar después de comer? ¿No era un mito?

—No lo sé… Supongo que es cierto.

Dos chicas se acercaron a nosotros... Oh, son las chicas de primero. Ellas estaban en nuestro club.

—Hola, capitán.- Dijeron ambas.

Sí, me ignoraron... Quisiera ser popular también.

—Nos preguntábamos si...

Mi teléfono comenzó a sonar.

—Lo siento.

Saqué mi teléfono de la mochila y contesté.

—¿Sí?

—¡Hermano, olvidaste que tenías que ayudarme a estudiar!

—¿Eh? ¿No era mañana?

—¡No, hoy! ¡Me lo prometiste!

—Bueno, llevo en la playa 4 horas... Llegaré pronto.

—¡Gracias!

Colgué y guardé el teléfono.

—Lo siento, Cris, debo irme. Ayudaré a Nia a estudiar.

—Te acompaño.

—No te preocupes, puedo regresar solo. Aparte, seguramente las chicas estaban pensando en invitarte a salir o algo parecido. Diviértete. Nos vemos.

Tomé mi mochila y me fui.

—Bueno... Supongo que el plan falló.

—¡¿Por qué soy tan cobarde?!

—¡No me atreví a hablarle!

Cris se levantó del suelo.

—No le dijeron "hola". Chicas, si realmente quieren enamorar a Kei, deben ser más amables con él… Kei es fácil de conquistar... Demasiado fácil a mi parecer.

—¡Es que es demasiado lindo! Es lindo y amable... Es tan genial.

—¡Sí! Cuando estoy cerca de él, mi corazón se acelera.

—Sí, lo comprendo... Me pasa lo mismo.

Nerka, Terkiana y yo, estábamos parados frente a la entrada de una enorme tienda de esclavos. Aquí se entregan a los esclavos.

—La primera impresión es la más importante. No sean groseras. Nerka, ellas son iguales a nosotros. No quiero ningún comentario ofensivo. Terkiana… Bueno, tú eres amable, confío en ti.

—¡Oye, yo también soy una chica amable y pura!

Nerka hizo un puchero y cruzó los brazos.

—¿Pura? ¿Estás segura de eso, Nerka?- Dijo Terkiana.

Nerka se sonrojó y bajó la mirada apenada.

—¡N-no digas cosas tan vergonzosas, abuela!

Mierda, no puedo evitar sonrojarme… ¡Ella me violó! ¿Realmente es amable?

—M-mejor entremos.

Entramos a la tienda y nos dirigimos a un empleado.

—Mi nombre es Crisfa. Vengo a recoger a las esclavas que compré.

—Sí, lo estaba esperando. Por favor, espere.

El empleado se fue y me senté en el suelo.

—Recuerden, lo que haré es necesario. Si me insultan, no digan nada, por favor. Todo es necesario para el desarrollo de nuestra amistad.

—Sí, está bien.

El empleado regresó. Las esclavas estaban detrás de él.

—Aquí están.

Me levanté del suelo y me entregó unas hojas con información.

—La información de las esclavas. Sus habilidades, su vida, etcétera. ¿Está listo para el contrato mágico?

—Listo.

Saqué del "Almacenamiento mágico" una navaja y me hice dos pequeñas heridas en mis pulgares.

—La magia del contrato está lista. Puedes iniciar.

—Está bien.

Coloqué mis pulgares en sus frentes.

Terniak estaba muy asustada y estaba llorando demasiado... Nirkat me estaba observando con una expresión de furia... Mierda, da demasiado miedo... ¡Es perfecta!

—Listo, terminó.

—¿Eh? ¿Y sus marcas de esclavos? No aparecieron.

—Están en sus traseros. ¿Quiere verificarlas?

Me puse rojo y desvié la mirada.

No quiero que piensen que... Bueno, en este mundo, los hombres no son pervertidos… Pero no quiero que se sientan humilladas.

No veré sus traseros.

—N-no, así está bien. Vámonos.

Salimos de la tienda y las esclavas nos siguieron.

—Bien, esta es la capital. Supongo que la conocen... Pueden irse.

—¿Q-qué?- Dijo Terniak confundida.

—¡¿Qué clase de broma es esa?!- Dijo Nirkat furiosa.

—Escuchen. Las compré porque necesito su ayuda, pero no soy un hijo de perra. No soy un loco desquiciado. No me aprovecharé de ustedes solo porque las compré... Escuchen, si se van, pueden empezar una nueva vida... Pero si roban, no tendrán la oportunidad de ser otra vez esclavas criminales. Las matarán si roban de nuevo. Si vienen conmigo, les garantizo comida, una casa, amigas y salud. También les daré dinero, para que compren lo que quieran... ¿Aceptan venir conmigo o se irán?

—¿Estás hablando en serio? ¿Realmente podemos irnos?

—Claro. Pero consideren lo que les dije. Conmigo tendrán un hogar y comida. Si se van, las personas se aprovecharán de ustedes... Supongo que ya saben a lo que me refiero.

Ambas bajaron la mirada.

Terniak tomó de la mano a Nirkat.

—Hermana, él no parece malo. Esas Elfas tampoco nos han mirado con asco. Parecen personas buenas.

—Hermana… Está bien... Iremos contigo.

Le extiendo mi mano derecha y sonrío.

—Será un placer trabajar contigo…

Ignoró mi mano.

—No me toques, inferior.

… Eso dolió... Habíamos empezado bien.

—¡No te burles de...!

Terkiana le tapó la boca a Nerka… Sabía que haría eso.

—¿Inferior? Vaya, vaya... Dime, ¿te enamorarías de alguien como yo? ¿De un inferior?

—¡Prefiero morir!

—Ya veo...

Sonreí y me acerqué a ella.

—Promete que nunca te enamorarás de mí. Nunca me pedirás salir conmigo. Nunca me besarás. Nunca tendrás relaciones conmigo… Nuestra relación será solamente de amigos. ¿Lo prometes?

—Claro que lo prometo.

—¡Bien, que no se te olvide! Vámonos.

¡Sí! ¡Esto es perfecto! ¡Conseguí nuevas compañeras sin necesidad de enamorarlas! ¡Gracias por ser una chica mala, Nirkat!