Nairim Castillo
Al llegar con la Subdirectora, pues el Director fue a sacar unos papeles, tomo asiento en la pequeña sala de espera y la escena de hace unos minutos atrás regresa a mi mente, provocando un sincero arrepentimiento por mi comportamiento; ya que en si fue un accidente, y lo más sensato que puedo hacer es disculparme ...Pero es tan duro!!...
— Lo siento— digo en un susurro
— Mmm...— me mira
— Lo siento— digo, un poco más alto. Sonríe de costado ...Idiota, sí me había escuchado la primera vez!!...
— Te escuché la primera vez— ...Lo sabía... Tenso la mandíbula volteando hacia el otro lado— Disculpa aceptada— giro la cabeza, mirándolo entre cerrando los ojos
— Se lo decía a tu fea cara, la cual no pude arreglar— ríe, mientras yo sonrío victoriosa por dentro
— Cuál es tu nombre?— ...Ja, como si le fuese a decir mi nombre...
— Nairim, Alem, pasen— ...Mierda!! Oh, esperen. Ok!? Eso fue raro hasta para mí. Qué pasó!!??...
— Nairim es para hoy— dice el Director puesto que me he quedado sentada
— Sí, lo siento— me levanto, entro y tomo asiento. El Director cierra la puerta, para luego tomar asiento en su silla. Los nervios me invaden nuevamente
— Qué pasó?— pregunta mirándonos, corrijo, mirándolo a él
— Fue culpa mía. Solo fue un simple accidente y yo perdí el control de la situación. Lo siento— digo cabizbaja— Aceptaré cuál sea al castigo, solo no lo culpe por completo— al decir lo último los dos se me quedan viendo perplejos; mas el Director vuelve en si
— Es por eso que eres una alumna ejemplar— dice orgulloso— Sin embargo, el señor Reynolds sabe muy bien que los balones están estrictamente prohibidos en la cafetería o cualquier lugar concurrido— ...Eso es cierto, ya no me siento tan mal por él...— Tengan— nos entrega una hoja a cada uno— Estás hojas son para la asistencia de su castigo, el cual es el ayudar en los próximos eventos de este año, ok?— lo mira a él
— Pero!!...— decimos al unisono
— Me alegra que los dos lo tomen muy bien, ya se pueden ir
— Pero!!...
— Adiós— sentencia. Los dos tomamos nuestras mochilas y salimos, pues no somos idiotas como para provocar la ira de un ex-policía condecorado. Al salir Martha nos entrega unos pases, le agradezco.
— Genial, gracias a tí tendré que desperdiciar mi tiempo!— bramo, una vez fuera de las oficinas
— Espera, tu fuiste la que me tiró al suelo e hizo un alboroto— ...Cierto, más no lo dejaré ganar...
— No hubiera hecho un alboroto si tú no hubieras tirado a mi primo por alcanzar una estúpida pelota!!— lo apunto amenazante
— Balón— dice casi inaudible
— Qué?— ...Qué!?...
— Que no es lo mismo pelota y balón— dice obvio
— Y cuál es la diferencia?— ...Qué no es lo mismo? Según mi cabe...
— El balón se infla y las pelotas no, como las de tennis o baseball; y además se escucha mejor pelota de tennis a balón de tennis, no crees?— ...Hmmm!...
— Hmmm— ...Que mierda acaba de pasar!?...
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Nota
Seguimos aquí, gracias por acompañarme 😄☺️😜😛🙂💕🙃😍♥️
También lo invito a que leen mis otras historias, son cortas pero según yo no están tan mal 🤔🙃😉
Gracias y no olviden darle una estrellita ⭐
Nos leemos en la próxima nota