--Nooooo... Alice cerró los ojos como si con ello borrara esas palabras. Simplemente atino a decirle
--- Ninguna cita Mr. Desconocido.
John soltó su risa, mientras le decía.
--- ¿Mr. Desconocido? Jejeje . Me han puesto títulos pero este mmmm. Está bien lo acepto, toda esta noche ha sido extraña, la verdad no suelo traer mujeres a mi casa, menos con la apariencia de galán que tengo, prácticamente suelo ser irresistible ante ellas.
--- ¡JA! tienes razón eres "irresistible" porque me está constando trabajo resistirte... Jejeje . Alice se rio con burla, que chiste tan malo.
--- Qué cruel eres Alice, pensar que detrás de ese rostro tan inocente que tienes se esconde un ser cruel con sus palabras. Fingió estar sentido.
---¿Sabes? eres una mala huésped , eres desagradecida, husmeas las cosas ajenas y no aprecias los esfuerzos que hago por hacer que te sientas cómoda y protegerte.
Golpe bajo, Alice se sintió mal, las palabras de él llegaron a su pecho, ella se sintió pequeña e insignificante, a decir verdad él hasta el momento se había portado muy amable y hospitalario. Aun así no podía olvidar que definitivamente él era Mr. Desconocido. Por lo tanto decidió cortar el tema así que probó la comida.
--- Cocinas bien. Le dijo mientras miraba el plato .
--- Es un cumplido, qué bueno, es la primera palabra no sarcástica que he escuchado desde hace un rato.
Pero no pudo, Alice sintió que ese era el momento perfecto para soltarlo todo.
--- Lamento si te ofendí, pero no es normal para mí entrar a la casa de alguien que no conozco, a decir verdad no sé qué pasó, me siento extraña, nunca me he quedado en la casa de un compañero y menos de un hombre. No sé qué decir, no sé que esperar, toda la noche ha sido algo inesperado y el cielo con su tormenta se ha confabulado para que llegara y me quedara en este lugar. Por supuesto que eres un desconocido, tan solo te he visto una vez y precisamente es hoy... tanto que quisiera salir corriendo en este momento.
Alice se levantó de la mesa decidida a tomar sus cosas y dirigirse a la puerta. Cuando giró John tomó su mano. Ella volteó y lo miró, su cabeza se encontraba cubierta por su cabello, justo viendo el piso. Luego con una voz sería él procedió a decirle.
--- Tienes razón, la tormenta se ha confabulado para retenerte aquí.
Sorprendida y desconcertada le dijo
---¿Qué quieres decir?
--- Qué tienes razón, las coincidencias no existen.
Alice soltó su mano con fuerza.
--- ¡Explícate!
No obstante, Alice decidió cambiar de opinión rápidamente.
---... Sabes.... mejor No , no lo hagas. Gracias por tu hospitalidad.
Cogió sus cosas, no le importó que tuviera un simple pantaloneta y una ropa grande que debía sujetar con su mano, se dirigió a la puerta tan rápido como pudo, esta no tenía seguro, estaba abriéndola para disponerse a correr con todas sus fuerzas cuando John llegó por detrás y con su mano derecha la cerró nuevamente.
Alice lo sintió contra su espalda, luego un brazo la tomó por su cintura y a la distancia de su oído sintió como la voz de él le decía.
--- No puedes irte. Hoy no puedes irte.
--- ¡SUELTAME! ... Alice empezó a gritar y forcejear.
--- Cálmate... cálmate .... !CÁLMATE¡ Le gritó mientras la apretaba a él.
El grito fue tan fuerte que Alice quedó muda y atónita. John puso su mano derecha en su boca. Alice solamente se encontraba forcejeando y reprochándose a sí misma el error que había cometido al entrar a esa casa.
--- Alice ... necesito que me escuches... necesito que te tranquilices y que por favor confíes en mi. sé que es mucho pedir... pero necesito explicártelo... y si continuas resistiéndote no vamos a poder hablar... Nosotros no somos lo que parecemos ¿Sabías? ...Ambos ... no sé cómo explicarlo ... no pertenecemos aquí.... ¿Sabes Alice ?... júrame que hoy es la primera vez que me has visto... porque tu ya me has visto antes ¿O es que estos ojos no te dicen nada?.
La giró bruscamente hasta él y puso su rostro junto al de ella , tanto que sus frentes de encontraron.
--- Estos ojos, azules profundos ... ¡júrame que no los has visto antes!. Le dijo mientras subía la voz.
Alice recordó su sueño, poco a poco reconstruyó el rostro que durante noches la había a acompañado. Mareada por lo que venía a su mente reconoció que era él, definitivamente era él. En su trance, de su boca brotaron unas palabras.
--- ¿ Quién eres? ---Alice agitó su cabeza mientras repetía ---... No , No, No.
-- Tú lo sabes... --- Le dijo él mientras la abrazaba con su cuerpo .
--¿Quién eres? o más bien debería decir ¿Qué eres? Le dijo Alice antes de desmayarse...
Susurrante y sosteniéndola, le dijo suavemente al oído
--- Tú lo sabes. . . solo que todavía no puedes descifrarlo.