「Shizuka Matsuyabashi」
Aquél día pasó algo muy aterrador.
Pasaron algunos días antes de que pudiera entender que fue el líder quien asesinó a Ren Minoru, y quien gritó bajo la lluvia.
Ya pasó una semana.
Fue hasta ayer que volví a hablar con Nabe, Tomory y Aoi.
Intenté pactar una reunión con ellos, espero que vengan.
El líder estaba realmente triste ese día,
Entonces los llamé para que juntos podamos animarlo.
Podemos ponerlo feliz entre los cuatro, estoy segura.
Estoy en los comedores de Tedehm, en 5 minutos deberían llegar.
Tomory llegó a la hora justa, ella es muy responsable, no esperaba menos de ella.
-¿Para que me llamaste? -Me preguntó inmediatamente se sentó.
-Te lo diré cuando lleguen Nabe y Aoi -Le respondí sonriendo.
Ella estaba bastante tranquila, no parecía seguir preocupada por lo que pasó la semana pasada.
Luego de unos minutos llegaron Aoi y Nabe, juntos.
Nabe tenía su expresión usual, mientras que Aoi desprendía un aura un poco más sombría.
Ambos se sentaron, Nabe me saludó agradablemente, pero Aoi ni siquiera me miró a los ojos.
Cielos ¿Seguirá enojada?
-Bien, los reuní aquí con una intención -Les dije directamente- ¿Todos tiene el día libre?
-En términos de misiones hoy estamos despejados -Respondió Tomory- Aunque deberíamos prepararnos, mañana tenemos que interceptar el contrabando que se está realizando cerca de Green Mountain junto a Kaiki y Panda.
-Yo tengo preparado mi armamento -Dijo Nabe- Hoy tengo el día libre.
-¿Y qué hay de ti, Aoi? -Pregunté.
Ella se quedó unos segundos sin responder nada, pero finalmente asintió con la cabeza.
-Eso es perfecto -Exclamé- Quiero que hagamos algo hoy como grupo, vamos a divertirnos, nunca hemos salido todos, y ahora que no hay amenaza cerca de la ciudad podemos hacerlo.
Nadie me respondió por unos breves segundos.
Fue entonces que noté que todos se estaban riendo en voz baja, incluyendo a Aoi, quien parecía querer ocultarse.
El ambiente se siente un poco más agradable ahora, está funcionando.
-Supongo que podemos -Dijo Tomory entre risas, su voz grave hacía que sonará muy lindo que intentara hablar- Quiero decir, los cuatro necesitamos calmarnos.
-Los cinco -Le respondí.
-¿Quien más va a venir? -Preguntó Tomory- ¿Kentaro? ¿Kaiki? ¿Mili?
En verdad creí que mencionaría al líder, de una u otra manera Tomory es la más apegada a él.
-Pues estaba pensando en pasar por el líder Souki -Les dije.
Entonces de la nada la atmosfera se volvió pesada de nuevo, de golpe.
-¿Qué dices? -Exclamó Aoi en un tono algo amenazante- ¿Pretendes que vayamos a algún lugar con ese loco? Tú misma viste lo que hizo ¿Quién puede asegurarte que no va a descontrolarse mientras estamos nosotros cuatro?
Volteé hacia Tomory, quien estaba a mi lado.
Miraba al suelo, parecía tener arcadas.
Debe estar recordando lo que pasó.
Aun así no logro entenderlo.
Miré a Nabe, y estaba mirando a otro lugar, parecía querer evitar el tema.
Aoi parece realmente enojada.
¿He dicho algo malo?
No lo entiendo.
¿Acaso ellos odian al líder?
Pero es el líder Souki, este tiempo hemos estado los 5 juntos ¿Fue tan grave lo que hizo?
El líder asesinó a un enemigo.
Quizás no era la manera de que él hiciera las cosas, pero él estaba triste.
-Él estaba triste -Dije sin darme cuenta.
-¿Qué dices? -Me preguntó Aoi hostilmente.
El comedor estaba solo, es muy tarde para el desayuno y muy temprano para el almuerzo.
No importa si grito.
-¡El líder estaba triste! -Grité- ¡¿No lo oyeron gritar y llorar?! ¡Él estaba sufriendo! ¡Estaba sufriendo porque la líder Hiro se fue! ¡¿Van a actuar así porque estaba sufriendo?!
Mi voz se rompió de repente.
Ya no pude gritar más.
-El líder ha hecho mucho por nosotros -Dije ya en voz baja- Él no merece que lo tratemos así, debemos hacer lo que lo podamos para animarlo, debe sentirse solo, nosotros somos sus amigos.
Todos se quedaron callados unos segundos.
-¿Crees que esa es una excusa para lo que hizo? -Dijo Aoi, se oía muy frustrada- Lo que hizo fue una brutalidad.
Nabe puso una mano en el hombro de Aoi.
Aoi se calló.
-Eso fue bastante tierno -Me dijo Nabe sonriendo- Tienes razón, debemos hacer el intento para animarlo, no podemos entender los sentimientos del líder, pero ahora nos necesita, necesita de nuestro apoyo.
-Estoy de acuerdo -Dijo Tomory levantándose de mesa- Hay que apoyar al líder Souki, está pasando por un momento difícil.
-¿Qué sucedió con Hiro? -Preguntó Aoi.
Es verdad, ella no estaba cuando Hiro habló con nosotros.
-¿Saben algo? No importa -Dijo Aoi- Creo que lo entiendo, es difícil, sigo sin estar de acuerdo con lo que hizo, pero si ustedes tres están tan convencidos, entonces también lo intentaré.
Ellos estaban de acuerdo.
No puedo entender bien lo que están pensando, pero es genial que quieran ayudarme a animar al líder.
Él lo necesita.
Y así nos dirigimos a su cuarto, ninguno de los cuatro lo ha visto en los últimos días.
-Él líder ya ha tenido antes esta clase de situaciones -Dijo Tomory- Hace una semana llegó una carta dirigida a él, no he podido mostrársela, ataca directamente a lo que le ha pasado antes, que la viera ahora sería un golpe fuerte.
-¿De donde viene la carta? -Preguntó Nabe.
-De Wiforest -Respondió Tomory- Directamente de Plinder Fome.
-Ese tipo es una molestia -Agregó Aoi- Creo que no es necesario saber que dice.
-Es más grave de lo que pueden pensar -Dijo Tomory- Aunque es mejor no pensar en eso ahora.
Estábamos subiendo las escaleras, el líder estaba en el último piso.
-¿Cómo creen que estará el líder en su habitación? -Pregunté.
-He oído historias acerca de él -Respondió Aoi- De parte de Akero Ikari, es muy probable que su cuarto este completamente destrozado, y el este igual de descuidado.
-El líder desaliñado, suena interesante -Dijo Tomory en broma.
Finalmente llegamos a la habitación, Tomory golpeó, pero no recibió respuesta.
Pasaron unos pocos minutos y no pasaba nada.
-¿Oye, estará bien el líder? -Preguntó Nabe- ¿Crees que haya cometido alguna locura?
¿A qué se refiere?
¿Una locura?
¿Qué locura podría hacer el líder el solo en el estado en el que está?
-No digas estupideces -Le respondió Aoi sudando un poco, también estaba tartamudeando- Tomory, tumba la puerta de una vez, debemos verificar.
-Está bien -Respondió Tomory lanzándose contra la puerta.
Se lanzó muy fuerte, de seguro esperaba resistencia.
Aun así, siguió derecho, la puerta estaba abierta.
Nabe soltó una pequeña risa burlona mientras preguntaba.
-¿Estás bien?
Entramos al cuarto.
El líder no estaba adentro, pero adentro no había nada que esperara.
El cuarto estaba completamente limpio y organizado.
-Quizás no hizo la locura que esperábamos -Dijo Aoi- Pero mira lo impecable que está todo, si que hizo una locura.
Tomory se levantó del suelo.
-¿Si no está aquí, entonces donde? -Se preguntaba Tomory mientras se enderezaba.
Empezamos a buscar alguna pista en el cuarto.
Me asomé a la ventana de la habitación, daba directamente al patio de entrenamiento.
-Ahí está -Dije- El líder está ahí afuera.
Estaba allí solo, blandiendo una espada de madera.
Entrenando.
「Souki Aiko」
Sí los tengo a ellos no tengo razón para decaer.
Lo de Hiro duele ¿Y qué?
No es la primera vez que me sucede algo así.
Hana Shinobu.
Alex Firedwater.
Hoshikaze Fujinuma.
Ryumi Ayanami.
Haru Kishibe.
Todas me han afectado un poco, pero he seguido adelante ¿Por qué esta vez tendría que ser diferente?
Tengo una responsabilidad como líder.
Voy a volverme más fuerte.
Estoy repasando todos los fundamentos del kendo.
El poder no lo es todo en este mundo.
Ahora lo entiendo.
Sí no tengo un cuerpo y una habilidad que lo respalde, entonces no sirve de nada.
Ahora no puedo aumentar mi poder por las secuelas del poder de Hiro dentro de mí.
Entonces llevaré mi cuerpo al limite, sé que puede aguantarlo.
La última semana me he dedicado exclusivamente al entrenamiento.
Día y noche.
Cuando Hiro vuelva seré tan fuerte como ella.
Ella podrá ver lo fuerte que me he vuelto y nunca volverá a alejarse de mí.
Esto es una advertencia.
No soy suficiente todavía.
No soy suficiente para Hiro.
Entonces me volveré suficiente.
Debo ser más fuerte.
El día en el que sucedió lo de Ren Minoru me quebré.
Pero mientras me centre en el entrenamiento, mientras sepa que aún tengo a mis amigos, mientras tenga en la cabeza que soy el líder de Tedehm, podré seguir adelante.
-¡Souki! -Oí a alguien gritar, entrando al patio de entrenamiento.
Eran ellos.
Era el escuadrón.
Shizuka es quien estaba llamándome.
Todos lucen felices.
Es una alivio.
Creí que no podrían verme de la misma manera luego de lo que pasó.
-¡Chicos! ¿Qué sucede? -Les pregunté, podía sentir como inconscientemente estaba sonriendo.
Por alguna razón ellos me producen mucha calma.
-Pues hoy tenemos el día libre -Respondió Tomory- Veníamos a invitarte a pasar el rato por ahí, la ciudad está un poco destruida, pero hay varías zonas de ocio que todavía están disponibles.
-El negocio aquí en tierras del rey se ha visto afectado debido a que las mejoras de poder han dejado de funcionar -Agregó Nabe- Por lo mismo que el éter dejó de funcionar, pero todavía podemos visitar los restaurantes o lugares de batalla amistosa.
-No suena nada mal ¿No es así? -Me dijo Aoi, quien parecía estar calmada, es raro en ella- Quiero medirme en una batalla con el líder, a ver si ese entrenamiento te ha servido de algo.
Ni siquiera tuve que pensarlo.
-Por supuesto -Respondí- Iré a cambiarme, esperen en la entrada del castillo, no tardaré.
Subí rápidamente, y me puse mi atuendo habitual.
Solo que mi gabardina roja ya no estaba.
Pues Hiro se la llevó.
Cielos, dije algo muy vergonzoso.
Espero no haber quedado como un idiota con el tema de la gabardina.
Aparte pude perderla durante su viaje ¿Qué le diré si no la trae? Ella puede sentirse mal.
Por alguna razón entré en pánico, me senté en mi cama con las manos en la frente.
Estaba sudando.
Joder, pensar en Hiro me pone mal.
-¿Qué rayos estás haciendo? -Me preguntó alguien desde la puerta.
De la nada me sentí más avergonzado.
Alguien estuvo viéndome haciendo estupideces.
Volteé hacia la puerta.
Era Akero, quien estaba junto a Hana.
Hana, he olvidado alimentarla estos últimos días.
Un lobo requiere grandes cantidades de comida.
¿Habrá estado pasando hambre?
Akero parecía llevarla con una correa.
-¿Qué haces? -Le pregunté- Hana no es un perro, es una loba, no deberías llevarla con correa.
-Lo entiendo -Me dijo- Pero no paraba de buscarte así que decidí traerla a tu habitación.
Akero soltó la correa de Hana, y ella corrió directamente hacia mí, saltó sobre mí y empezó a lamer mi cara moviendo la cola.
Parecía animada.
Es extraño, Hana tiene los dos ojos dorados, pero aun así a veces uno de ellos se torna azul.
Tomory me comentó que solo estaba así cuando estaba conmigo.
Investigué sobre la raza, no es una loba normal.
Ella es una descendiente de una raza de lobos guerreros.
Ahora están en peligro de extinción.
Aparentemente tiene una conexión con sus amos, de esto toman su sincronización a la hora de atacar.
Sus genes provienen de las bestias, la raza que fue exiliada junto a los Kave hace años.
Ahora se encuentran en un continente lejano.
-¿Sabes si la han estado alimentando? -Le pregunté a Akero- La he descuidado últimamente,
-Yo la he alimentado -Me respondió- Come carne en cantidades desproporcionadas, es igual a ti.
-Ya veo -Le dije- Muchas gracias, me has hecho un gran favor.
-Más vale que me pagues esa carne algún día -Me dijo- Ha salido de mi bolsillo.
-Claro, lo agregaré a tu próxima paga -Le respondí- Asegúrate de darle la factura a Mili, ella se encarga de esos temas.
-Hablé con ella hace poco -Me dijo- ¿Has pensado en lo que se rumorea últimamente?
-No sé bien de que hablas -Le respondí- He estado un poco desconectado de todo estos últimos días.
-Bien, te lo diré -Me dijo- Los clanes están en una crisis, las misiones antes venían por manos de el castillo real, ahora no existe, con Pendreten afuera los clanes pequeños están intentando tomar terreno en esto, pero todo está muy desordenado, las misiones ahora son cumplidas por los clanes independientemente, y los recursos de impuestos y demás están siendo divididos para los tres clanes, estamos manteniendo una estabilidad económica gracias a esto, pero los clanes pequeños se están quedando sin nada.
-Eso lo sabía -Le respondí- Aún no encontramos una solución a eso, estamos trabajando en eso.
-Los otros dos clanes responden lo mismo que acabas de responderme -Me reclamó rápido- Tenemos que tomar acción, hay gente cuyo trabajo e integridad están peligrando gracias a esto, y amenazan con realizar un golpe de estado si no se hace algo con las condiciones precarias en las que están, así que Dragken ha dado la idea de instaurar una reforma a las leyes actuales de la ciudad, y de esa forma instaurar un gobierno democrático, necesitamos nivelar las cosas tomando lo que al rey anterior le funcionaba pero quitando la monarquía que tanto afectaba al resto del continente.
-Cielos -Dije- Estamos avanzando varios años en un momento, pero es un paso necesario, no es tan sencillo de hacer ¿Dragken tiene alguna exigencia o requisito?
-Sí -Me respondió- Su líder Imai Sakurajima se pronunció al respecto, quieren que con el presupuesto de los tres clanes reconstruyan el castillo real, ellos asumirían los temas arquitectónicos, una vez logrado eso con la ayuda de los ciudadanos los tres clanes redactarían esta reforma, con lo arcaicas que son las leyes actuales es básicamente escribir una nueva constitución desde cero, luego de poner las bases del nuevo gobierno sería cuestión de elegir representantes por cada distrito de tierras del rey y ciudades allegadas, de esa forma incluyendo a todo el continente en las decisiones que se tomen, y finalmente organizar unas elecciones para decidir la administración que tomará las riendas del continente, esta vez expandiéndose a todo este en lugar de beneficiar los propios intereses de esta ciudad.
-Entonces quiere unificar todo el continente en un modelo de gobierno democrático con una constitución de la cual no sabemos nada y pretende que todo el continente lo acepte -Agregué- Es complicado de hacer algo a tan gran escala, pero sin duda es una buena opción, hay que adaptarse, somos gente civilizada, no vamos a quedarnos en la edad media ¿Qué te ha comentado Mili?
-Ella escuchó todo el discurso de Sakurajima -Respondió Akero- Según ella todo sonaba muy bien, pero no estamos en posición de pronunciarnos respecto al tema sin autorización y directriz del líder de clan.
-¿Wiforest ya se pronunció respecto al tema? -Pregunté.
-No, solo los clanes pequeños, en donde se ha tenido una recepción mixta al respecto -Respondió Akero- Al menos recibieron una respuesta de los clanes grandes, eso puede calmarlos.
Cielos ¿Cómo puede Imai hacer declaraciones así sin consultar antes a los otros clanes? O al menos con Tedehm, tenemos buenas relaciones con ellos.
Pero suena muy bien, si vamos a quedarnos aquí encerrados el resto de nuestras vidas al menos podemos cambiar las cosas aquí.
Imai acaba de tomar una iniciativa muy poderosa, me gusta.
-Diles que Tedehm apoya la propuesta -Le dije a Akero- Y daremos de nuestra parte para reconstruir el castillo real y para realizar las reformas necesarias a las leyes actuales.
-Entendido -Me dijo Akero- Pero tú eres el líder ¿No deberías dar tu esas declaraciones?
-Hoy estoy ocupado -Le dije, de hecho estaba demorándome, los chicos ya llevan un tiempo esperándome- Utiliza un traje de líder con modificación de voz, que sea un portador de mis palabras, Kentaro puede hacerlo bien.
-Kentaro no se ha reportado de ninguna manera últimamente -Me dijo Akero.
¿Qué dice?
Si Kentaro es la persona más responsable y puntual que conozco ¿Cómo es posible que no este reportándose?
-¿Sabes si algo le ha sucedido? -Le pregunté a Akero.
-Hace poco murió una persona a la que el estaba tratando -Me respondió- No sé si se relacione pero cuando pasó se le veía muy afectado.
¿Un paciente de Kentaro murió?
¿Cómo es que no sabía de eso?
Mierda, debe estar destrozado.
Kentaro siempre ha sido un chico sensible.
De hecho era un trozo de pan antes de La Hora Cero.
Me pregunto de donde habrá sacado esa personalidad tan cerrada, él no era así.
De todas formas, sigue siendo el mismo, estoy seguro que debe estar en una profunda tristeza.
-Le haré una visita rápida -Dije- ¿Quieres acompañarme?
-Claro -Me respondió Akero- Pero no sé donde se encuentra.
-Buscaré en su habitación -Le dije- Y si no está allí entonces en su laboratorio en el primer piso, ambos me quedan de paso.
Me levanté de la cama, Hana me siguió, una vez salí del cuarto Akero empezó a caminar junto a mí.
Bajé las escaleras rápidamente, dirigiéndome a su habitación.
Abrí la puerta de golpe.
-Oye ¿No deberías tocar? -Me preguntó Akero- Puede estar ocupado.
-Da igual -Le dije viendo a la habitación- De todas formas no está aquí.
Seguido me dirigí al laboratorio.
Demonios ¿Estará bien?
Conozco a Kentaro desde el jardín de niños.
Igual que a Kosuke y a Shinobu.
Y lo conozco muy bien, él siempre fue muy frágil, siempre intentaba hacerse el fuerte, pero era el que más sufría cuando algo nos pasaba.
Aunque ahora luce más determinado y fuerte.
La Hora Cero lo ha cambiado.
Supongo que lo mismo aplica para mí.
Así que no puedo saber como está realmente ahora.
Una vez llegamos al laboratorio me frené en la entrada.
De alguna manera podía sentir que estaba allí dentro.
-¿Qué sucede? -Me preguntó Akero- ¿No vas a entrar?
-Sí -Le respondí tartamudeando un poco.
¿Y si está inconsolable llorando adentro?
¿Cómo procederé?
Finalmente abrí la puerta con miedo.
Allí estaba Kentaro.
No estaba llorando.
No se estaba lamentando.
Estaba trabajando como siempre lo hacía, pero algo era diferente.
No había una atmosfera sombría.
Estaba perfecto.
De hecho incluso parecía haber cierto entusiasmo en el aura de la habitación.
-¡Hola, Kentaro! -Exclamé- ¿Cómo te portas?
-¡Souki! -Me dijo sorprendido- Hola ¿Qué haces aquí?
-Venía a hacerte una visita -Respondí- ¿En qué trabajas?
-Estoy haciendo algunos avances médicos -Me dijo- Recientemente tuve un altercado al respecto.
Está hablando de su paciente.
-Por lo tanto decidí esforzarme más al respecto -Prosiguió Kentaro- Estoy explotando mi cerebro en mejorar como medico, no quiero que me vuelva a ocurrir lo mismo.
Mierda.
Me siento realmente feliz.
Kentaro realmente ha cambiado para bien.
No está lamentándose por lo que le sucedió.
Está esforzándose por salir adelante.
Quien lo diría, quizás debo aprender un poco de Kentaro.
-¡Akero! -Exclamó Kentaro- Te necesitaba, ven, trabajemos en algunas cosas aquí.
-Claro -Dijo Akero entrando al laboratorio.
Estoy muy feliz por Kentaro.
-Bueno, yo me retiro -Les dije- Tengo cosas por hacer, aun así, mucha suerte.
Me dirigí a la puerta principal, entonces noté que Hana seguía siguiéndome.
-No puedes ir conmigo -Le dije agachándome frente a ella.
Ella solo movía la cola.
Obviamente no podía entenderme.
Me quede mirándola unos minutos, pensando en que hacer.
Entonces su ojo derecho se tornó azul.
Mi entorno cambió de repente.
Esta debe ser la conexión entre uno de estos lobos y sus dueños.
Supongo que puede entender una directriz mía.
-Quédate protegiendo el castillo -Le dije.
Ella parecía entenderme.
Cielos, no le dije a Akero como proceder, me pregunto si Hana puede darle el mensaje.
-Dile a Akero que utilice a Kaiki Ishigami como líder señuelo para dar las declaraciones sobre las palabras de Imai Sakurajima -Le dije.
Ella también pareció entenderme.
Su ojo volvió a su color normal y se fue,
Espero que haga las cosas bien.
Salí de castillo, y allí estaban ellos esperándome.
-Cielos -Exclamó Aoi- ¿Te estabas tardando, no crees?
-Lo siento -Respondí sonriendo- Me topé con temas del clan.
-Claro, no te preocupes -Dijo Nabe cortando un poco a Aoi- ¿Cómo te sientes?
-Estoy perfecto -Le respondí.
-¿Y tu gabardina? -Me preguntó Tomory.
Cielos, había olvidado ponerme algo, estoy solo con mi camisa negra.
-La perdí -Respondí- Durante la celebración de la semana pasada.
No podía decirles lo de Hiro, definitivamente se reirían.
-Eso no importa -Agregó Shizuka- Podrás comprar una nueva hoy ¡Salgamos a divertirnos de una vez!
De esa forma Shizuka nos guio a todos por la cuidad.
En realidad hay muchos lugares para estar.
Hay más restaurantes de los que pensé.
Desde que llegué a Tedehm solo he comido lo que hay en el clan.
Entramos al que lucía más ostentoso.
Se veía caro pero no era un problema.
Ahorro casi completamente mi salario como líder, lo poco que gasto es en armas y libros.
Entrando al restaurante vi una flecha frente a mí.
Estaba chocando contra una roca.
La flecha había sido disparada contra la roca.
Una piedra del tamaño de un puño.
Ya entiendo.
Alguien me lanzó esa roca, y Tomory lanzó una flecha para bloquearla.
Lo siguiente que vi fue a Tomory corriendo frente a mí, en dirección del origen de la roca.
Ella fue muy rápida.
Ella fue hacia una mesa en el restaurante.
Se levantó sobre una mesa y apuntó una flecha a la cabeza de un cliente del restaurante.
¿Fue quien arrojó la roca?
Toda el lugar se quedó en silencio.
-Sal del establecimiento, por favor -Le dijo Tomory al cliente.
Sonaba tranquila, pero era un tono muy amenazante.
El cliente estaba temblando.
El resto de nosotros seguíamos en la entrada.
Se escuchó un estruendo, era el cliente levantándose, apartándose hacia atrás, alejándose de la flecha.
Parecía estar realmente asustado por Tomory.
Estaba solo en su mesa.
Incluso estaba temblando un poco.
Por alguna razón hay algo que no me cuadra.
Esta atmosfera.
No la entiendo.
Ese chico se levantó, y caminó hacia la salida sin decir nada.
Parecía realmente perturbado.
Pasó junto a mí, y se detuvo un momento.
-Tú eres la verdadera escoria -Me dijo- ¿Y qué si hace una semana pasada detuviste un ataque? Nunca vas a poder expiar La Hora Cero.
Lo susurró, nadie más pudo escucharlo.
Él se fue sin decir nada más.
Su voz se escuchaba quebrada, casi llorando.
¿Le tienen tanto miedo al traidor de la serpiente y a Tedehm?
¿Cómo hemos estado manejando las cosas hasta ahora?
Olvidando ese altercado tan desagradable, la comida estuvo deliciosa, era una carne realmente jugosa, era extraño probar este tipo de cosas aquí, ha pasado más de un año desde la última vez que comí algo tan bueno.
Aún se sentía una atmosfera pesada, me pregunto si es porque somos Tedehm o porque soy el traidor de la serpiente.
Luego hicimos combates amistosos entre nosotros, en los lugares especializados para esto.
Solo acepté luchar con Tomory, porque aún estoy entrenando, y no quiero lastimar al resto.
Al final Tomory logró vencerme.
Ya era casi noche.
Aparte de lo del tipo, me he sentido muy bien.
He estado olvidando lo de Hiro por ellos.
Puedo seguir adelante.
Me siento muy cómodo con ellos.
Puedo reírme con ellos, puedo bromear con ellos, puedo ser yo mismo con ellos.
Quizás nunca les estaré lo suficientemente agradecido.
Volvimos al castillo, me despedí de ellos, les agradecí por el buen día que me hicieron pasar, y volví a mi habitación.
He estado pensando sobre lo que sucedió.
¿Estamos utilizando el miedo a nuestro favor?
Quizás lo he olvidado, pero tengo el odio de todo el mundo, por eso no puedo revelar que soy el líder de Tedehm.
Soy el traidor de la serpiente.
Pero hoy realmente me sentí algo más que eso.
Es tal como dije.
Con mis compañeros no me siento un demonio que tiene que cargar con el odio de todos.
Ni tampoco el héroe de todas las personas que me importan.
Me siento como lo que quiero ser.
Un humano.
Es lo que solía preguntarme con Hiro, quizás esta es mi humanidad.
Escuché a alguien tocar mi puerta.
Me levanté y la abrí.
Era Tomory, traía algo en sus brazos.
-Líder Souki, siento molestarte tan tarde -Me dijo- ¿Puedo pasar un momento?
-Claro -Respondí- Pasa.
Me senté en mi cama, mientras ella se mantuvo de pie.
-Primero quería pedirte disculpas -Me dijo- Fue egoísta de parte de nosotros evitarte luego de lo que pasó, debimos hacer todo lo contrario.
-No hay nada de que disculparse -Le respondí- Hoy me la he pasado muy bien, sin dudas me han animado mucho.
Le sonreí, pero esta vez genuinamente.
En verdad que el día de hoy me ha puesto muy feliz.
-Como segundo, nosotros te compramos esto -Me dijo extendiéndome el montón de tela que llevaba en sus brazos.
Lo recibí.
Era una gabardina, como la que solía llevar, pero esta era blanca.
Se marcaría perfecto el símbolo de la serpiente.
-Cielos, muchas gracias -Le dije- Está perfecta, la usaré recurrentemente.
-Queríamos darte algo que simbolizara nuestro apoyo -Me dijo- Aunque no nos lo digas entendemos lo que pasó, no es casualidad que Hiro no se haya pasado por el castillo en toda la semana, aparte Kaiki vio a Hiro con tu gabardina, la roja, por lo tanto el blanco lo elegimos porque queremos que sigas adelante marcando tus propios objetivos, con nuestra ayuda y apoyo claro.
Tomory siempre fue muy empática, me pone muy feliz oírla decir eso en representación de los cuatro.
Ellos son lo más importante que tengo ahora, sin duda alguna.
Incluso si lo recalco mucho, es lo que siento.
Puedo sentirme cómodo con ellos, siempre es así.
-Aparte, hace tiempo te llegó algo -Me dijo- No te lo había dado porque no era el momento, lo leí, espero no te moleste.
Ella me extendió un sobre.
Era una carta.
-¿De donde viene? -Le pregunté.
-De Wiforest -Me respondió- Ahí está el sello de Plinder Fome.
Saqué la carta del sobre, el cual ya estaba abierto.
Me tardé unos 3 minutos en leerla toda.
No lo entiendo.
¿Qué significa esto?
Plinder Fome, líder de Wiforest está ordenando formalmente al líder anónimo de Tedehm un juicio contra Souki Aiko.
¿Quieren juzgarme?
Mierda, hay muchas acusaciones.
Entre ellas está:
"El asesinato de Alex Firedwater"