"Ha.... Ha... Ha...."
Respirando pesadamente, una mujer de piel morena y cabello negro, miro en completa incredulidad a un hombre a su lado.
Ella fue derrotada, su cuerpo estaba tan sensible que un simple toque la haría enloquecer, su cuerpo estaba sudoroso y su cabello extendido, no hace falta decir que todo el estrés que tenia desapareció como arte de magia.
(Esto fue fácil)
Sentándose al borde de la cama, Yuki recordó su pasado, cuando tenia que seducir mujeres para matarlas, o extraer información.
Aunque ahora no tenia la necesidad de hacerlo, Yuki aun mantenía el hábito.
"Y bien cariño... ¿Te gusto?"
Sonriendo de manera presumida, Yuki miro a la amazona sin aliento.
"Tu.... Eres... el mejor"
Cerrando los ojos, la mujer ya no pudo mas, el placer que experimento estaba mas allá de lo que habia imaginado, sin mencionar que este tipo era un experto, atacándola en sus puntos débiles, ya que ella se corrió varias veces con sus dedos.
Ni en sus sueños mas salvajes, ella pensó que un simple masaje la haría ir al cielo y experimentar algo prohibido.
(Ahora que recuerdo su nombre era ¿Lena Tally?)
Mirando a esta mujer, Yuki incluso se habia olvidado de preguntar su nombre, si no fuera por Rasiel, talvez nunca lo sabría.
"Bueno, me alegro que te haya gustado"
Suspirando, Yuki se puso de pie, incluso sin sexo, Yuki aun podía complacer a una mujer y venir a este distrito, era como el paraíso para alguien como el.
(Bueno es hora de irme)
Saliendo satisfecho, Yuki pudo ver algo muy bueno, aunque al principio quería acostarse con esta mujer, al final no lo hizo, no habia necesidad de hacerlo, esta mujer no seria suficiente para complacerlo, además que su objetivo era atraparlas en una red.
"Es una lastima, aun no me he divertido... ¿Hm? "
Buscando a la siguiente Amazona, los paso de Yuki se detuvieron.
Después de todo el vio algo muy agradable, sus ojos fueron atraídos por una joven en especial.
"Vaya, no esperaba encontrarme a alguien así, en este lugar"
Con una sonrisa en su rostro, Yuki eligió su siguiente objetivo.
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(Otra noche mas....)
Murmurando para si misma, una chica con los ojos tristes miro hacia los muchos clientes que caminaban por las calles.
Y aunque muchos de ellos estaba interesados en ella, al final solo negaron con la cabeza y continuaron con su camino.
Esta chica es muy hermosa, al igual que la mayoría de mujeres de este lugar, sin embargo habia algo que la hacía sobresalir de las demás.
Y esto es que ella no era humana y tampoco una amazona, ella era un Renard.
Al ser una raza rara, ella atrae mucho la atención y como no hacerlo, su hermoso cabello rubio, así como sus orejas esponjosas y larga cola color dorado.
Además como plus, sus ojos verdes combinaban con su atractivo rostro y su bella vestimenta de Kimono.
Pero a pesar de esto, no había hombres dispuesta a solicitar sus servicios.
"Haruhime, recuerda siempre sonreír, tal como estas ahora, nadie solicitara tus servicios"
Acercándose a su habitación de servicio, una mujer de cabello negro cubriendo parte de su rostro y piel bronceada, ella es una amazona.
Suspirando la mujer la miro con un ojo, antes de tomar uno de los barrotes de madera.
"Si, Aisha-san"
Bajando la cabeza, Haruhime sonrió levemente, después de todo, esta mujer frente a ella, era su superior así como una amiga.
"Bueno, no importa de todas maneras"
Negando con la cabeza, Aisha sinceramente esperaba que nadie solicitara los servicios de Haruhime, vivir la vida de una prostitutas no era fácil, mas para alguien delicada y de corazón puro como ella.
Sin embargo aunque esos eran sus deseos, al final ella no podía intervenir con su familia y dejar que Haruhime lleve esta vida.
"Te veo después Haruhime, recuerda siempre sonríe"
"¡Hm! Lo hare"
Mirando la sonrisa triste en el rostro de su amiga, Aisha no sabia que decir, pero al final solo pudo suspirar y alejarse, ella al igual que todas también tenia trabajo.
"¿Hm?"
Pero mientras se alejaba, ella vio como un aventurero se dirigía hacia Haruhime.
"¿Cliente?.... Cielos, otra queja mas"
Suspirando nuevamente, Aisha detuvo sus pasos, decidiendo ver como terminaba esto, después de todo Haruhime tenia fama, pero no de la buena y ella no quería que nada le pasara a esa Renard.
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"Hola bella dama"
Acercándose a los barrotes de madera, Yuki sonrió a la mujer dentro de la habitación.
Después de todo el estaba muy sorprendido por la mujer frente a él, tener un Renard en un burdel era impensable, mas con lo raros que son su especie.
"¿Huh?"
Girando la cabeza, Haruhime miro al hombre que le hablo, su rostro no era guapo y tampoco parecía fuerte, sin embargo una extraña aura lo rodeaba, como si el mismo mundo estuviera abrazándolo.
Cerrando los ojos levemente, Haruhime miro de nuevo al hombre frente a ella, pero como si fuera una ilusión el aura que lo rodeaba había desaparecido, dejando solo su sonrisa suave en su rostro.
"¿Porque tan sola? Una bella señorita como tu no debería estar sola, en especial con una noche tan hermosa"
"¿Señor?"
Confundida, Haruhine solo pudo inclinar la cabeza, esta es la primera vez para ella que alguien intente seducirla, todos sus clientes la mirarían con ojos lujuriosos, antes de proceder a pagar e ir a la habitación.
Nadie se había acercado a decirle palabras dulces, esto la confundió mucho.
"Mi nombre es Arce, ¿podría tener el placer de conocer el nombre de tan bella señorita?"
Con una sonrisa suave en su rostro, Yuki la vio a los ojos, al mismo tiempo que estiro su mano, como un caballero invitando a una bella dama a un baile.
"...."
Los ojos de Haruhime y sus mejillas se sonrojaron, la habilidad 'Seducción' estaba a plena potencia, por lo que sacando su mano de los barrotes de madera, Haruhime inconscientemente, coloco su mano encima de la de Yuki.
"Haruhime... Mi nombre es Haruhime, señor"
Ampliando su sonrisa, Yuki puso su otra mano encima de las delicadas y blancas manos de la Renard.
"Haruhime... ¿'Princesa de primavera'? Que bello nombré, es perfecta para una bella señorita como usted"
"¡¡...!!"
Con las mejillas ardiendo, Haruhime volteo la cabeza, ella estaba terriblemente avergonzada, e incluso quería apartar su mano, sin embargo la suave caricia del hombre a si como sus dulces halagos, lo hacía recia a apártalo.
"Señor, por favor no se burle de mi, no soy ninguna princesa, para alguien como yo, este nombre es demasiado"
"No, es perfecto, por favor no te menosprecie, incluso si estas en este lugar, el hecho que seas una linda flor no esta en duda, eres muy hermosa, así que... ¿Tendría este Arce, el privilegio de tener una noche encantadora con tan bella princesa?"
Tomando con cariño su mano, Yuki llevo una mano a su pecho mientras miraba fijamente los ojos de Haruhime, quien en respuesta estaba temblando, esta proposición era demasiado para ella, no, nadie en su sano juicio diría palabras tan embarazosas a una prostitutas como ella.
Sin embargo estos halagos no era algo que ella odio, no mas bien sus corazón estaba palpitando con fuerza, mirando el rostro del aventurero, que sin un indicio de lujuria la miraba.
Era como si la estuviera mirando a ella, Sanjouno Haruhime, y no a una prostituta.
"... Si"
Por lo que aceptando inconscientemente su proposición, ella coloco su otra mano sobre la de Yuki.
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Nota Autor: Primer capítulo de fin de año, disfruten