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Chapter 27 - Capitulo 25 - Rutina

En medio del bosque a las afueras de la ciudad, Samantha se levantó de un pequeño cráter sosteniendo su cabeza con dolor en su rostro...

"Pero qué diablos... ¿Cómo termine aquí?" - Se cuestiono Samantha después de levantarse del cráter en el que se encontraba, su ropa se hizo pedazos dejando solo algunos restos de ropa quemada, siendo la única prenda intacta su ropa interior...

Cuando una corriente de viento soplo por su cuerpo no pudo evitar temblar un poco al sentir como el viento rosaba su pecho.

Tomando los restos de tela y uniéndolos como le fue posible logro cubrir parte de su cuerpo, lo que, aunque le daba una apariencia salvaje, por lo menos cubrió sus partes importantes, no obstante, aún estaba el problema de encontrarse en medio de la nada desarmada.

De esta manera Samantha paso la siguiente hora buscando su camino de regreso, para el momento en que logro salir del bosque se topó con un contingente de soldados dispuestos a ingresar al bosque, todos ellos miraron detenidamente a Samantha quien salió del bosque con sorpresa, y un incómodo silencio cayó sobre el grupo.

"Cof. Cof. ¿Usted es la señora Samantha? Nos disculpamos, pero fuimos enviados a comprobar su seguridad..." - El hombre al mando trato de disipar la incomodidad, pero le fue imposible evitar echar algunos vistazos al sexi cuerpo de Samantha, aun así, fue suficiente para ayudar a los soldados a salir de su estupor. "Si así lo desea, podemos escoltarla de vuelta a menos que tenga algo que hacer…"

"¿Pertenecen a la iglesia?" - Samantha pregunto al ver que estos hombres no utilizaban ningún distintivo que revelara su facción, por tanto, no pudo bajar su guardia.

Sin embargo, antes de que ellos respondieran una mujer salió corriendo desde la formación y se detuvo frente a Samantha con pánico en su mirada, esta mujer era Bella quien se esforzaba por resistir el impulso de abrazar a su Maestra quien la hizo preocuparse.

"M-Maestra... ellos fueron enviados por la Sacerdotisa para buscarla... han pasado horas desde que se fue, por eso tuve que buscar su ayuda... lo lamento si he actuado de forma precipitada." - Samantha se sorprendió al descubrir que tiene varias horas perdidas en su memoria, sin embargo, no lo mostro en su rostro, en cambio agradeció a los soldados por molestarlos y decidió regresar junto a Bella. – "Lamento los inconvenientes, pero me encuentro bien, por lo que podemos regresar a la ciudad."

Con los 50 soldados liderando al frente, Samantha avanzo junto a Bella quien la ayudaba a obstruir la visión de su cuerpo, mientras le contaba los sucesos que llevaron a su desaparición lo cual no fue algo tan sorprendente como esperaba Samantha.

"Entonces, dices que después de comerme el fragmento solo me quede inmóvil durante minutos, antes de salir corriendo del edificio y después de la ciudad..." - para sorpresa de Samantha todo se resumía en que ella huyo al bosque y si unía las evidencias probablemente pueda concluir que su cuerpo provoco el estallido por la energía. – "Entonces yo provoque el cráter…"

Solo fue hasta entonces que Samantha reviso las notificaciones de su sistema.

[¡Alerta!... Fragmento Consumido... Adaptando cuerpo del usuario...]

[Energía excedente...Empleando medidas de seguridad...]

[Entrando en reposo... tiempo estimado hasta recuperación... 5:59...]

[Habilidad Adquirida] - [Rayo Oscuro Nv 1]

[Rayo Oscuro Nv 1]

[Habilidad de alto rango creada por la mutación de los rayos con la oscuridad, convirtiéndolo en una habilidad de energía dual que permite controlar ambas energías en un rango superior, su enorme poder y velocidad están en el pico de su rango lo que lo convierte en una habilidad muy valiosa.

- Control de Energía Oscura-Rayo Nv 1

- Resistencia Oscuridad-Rayo Nv 1

- Costo 100MP/1s]

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El sol comenzaba a ocultarse en el horizonte cuando Samantha junto a Bella se reunieron con Ria de nuevo en su habitación, esta mujer no reacciono a su llegada pues siguió examinando las rosas y anotando en una pequeña libreta, y no fue hasta la media noche cuando Samantha le quito las plantas que por fin reacciono.

"Ve a cenar y duérmete, te las devolveré mañana." - después de dar su orden Ria refunfuño un poco antes de obedecer tranquilamente, entonces llego el problema principal de las tres mujeres.

"Maestra... si lo desea puedo dormir en el piso." - Expreso Bella viendo las dos camas dentro de la habitación, después de todo llegaron tarde y aparte de cenar hablaron sobre lo que sucedió en la tarde, por tanto, ninguna de ella pensó en que la habitación solo tiene dos camas hasta que ya era muy tarde.

"Mmm no es necesario, dormiremos juntas en una... mañana pediremos otra." - Samantha declaro tranquilamente, aunque unos momentos después su rostro enrojeció perceptiblemente, pero pronto distrajo su mente pensando en su nueva habilidad y lo que puede hacer con ella.

La oscuridad cubrió la habitación cuando Bella apago la lampara de aceite, así pronto el único sonido era el de la tranquila respiración de las 3 mujeres, los nervios impidieron que Bella y Samantha pudieran conciliar el sueño ya que sus cuerpos se rosaban constantemente, al final Samantha no soporto la tensión y rodeo a Bella con los brazos llevando la cabeza contra su pecho.

"Duérmete..." - Antes de que Bella tuviera oportunidad de protestar, Samantha la silencio con una simple frase, en esta posición sus cuerpos se relajaron lentamente y en poco tiempo cayeron dormidas.

A la mañana siguiente Samantha descubrió que todos su cuerpo estaba enredado con el de Bella, quien no solo abrazo su cintura sino también entrelazo sus piernas, lo que provocó que un sonrojo se extendiera por el cuerpo de Samantha al sentir todo el cuerpo de Bella pegado al suyo, por tanto, de la manera más calmada separo su cuerpo de Bella tratando de no despertarla y una vez tuvo éxito se levantó preparándose para un nuevo día.

Este día en lugar de dirigirse con Luvia para su clase diaria, fue al mercado de la ciudad con Bella para buscar los ingredientes y objetos necesarios para que Ria trabajara en las rosas, esta fue una buena oportunidad para familiarizarse un poco más con la ciudad ya que al final tendrán que vivir aquí durante un tiempo.

Además era el momento perfecto para buscar por el lugar algún otro fragmento que haya sido confundido con un mineral, ya que por las palabras de Morgan y Luvia esos minerales no eran tan raros.

"Creo que debemos buscar un trabajo, aunque sea temporal, considerando lo que hemos gastado terminaremos sin fondos." - Samantha comento mientras pesaba la pequeña bolsa de monedas en su cintura, lo que logro que Bella pusiera los ojos en blanco ya que esa pequeña bolsa contiene solo monedas de oro... y fácilmente superaban las 500.

"S-si maestra... creo que es una buena opción, pero no debe mostrar esa bolsa abiertamente..." - Los nervios de Bella hicieron reír a Samantha cuando volvió a guardar la bolsa dentro de su ropa, después de todo no era tan ingenua para creer que nadie tendrá ideas sobre ella.

"Aun así esto es una exageración, todos estos materiales no deben costar ni 10 monedas de plata y ya hemos pagado 100." - exclamo Samantha con enojo viendo como las hierbas que compro fueron vendidas a otro cliente por menos de la décima parte de lo que pago. - "Sigh. en fin, hay que encontrar un caldero y será todo."

Pensando en cuando compro la soga y el mazo, se dio cuenta de que los vendedores hicieron esto intencionalmente para complicarle las cosas, en lugar de negarse a venderle y ser amenazados prefirieron aumentar los precios, pero al darse cuenta que Samantha pago por los productos a pesar de ello, la codicia les gano y aumentaron más los precios.

Desafortunadamente esto arruino la búsqueda de tesoros ya que los vendedores ni siquiera le permitían estar frente a la tienda mucho tiempo antes de intentar ahuyentarla, por lo que tuvo que renunciar a su idea por el momento y centrarse en los ingredientes para las rosas.

Al final llegaron a su última parada que fue la única tienda de alquimia dentro de la ciudad, dentro del lugar en mostradores de cristal se colocaron plantas, frascos, algunas pociones e incluso partes de animales o monstruos como ojos, huevos y huesos... detrás del mostrador principal se encontraba una joven pelirroja de alrededor de 20 años, su tez clara y rasgos delicados daban la sensación de que era una joven erudita, pero su mirada de desdén al mirar a ambas enfrió el ambiente.

"Disculpe, ¿me gustaría comprar los objetos de esta lista?" - al ver que la joven ignoro a ambas y comenzó a leer un pequeño libro, Samantha se destacó y le mostro la lista con los objetos restantes, lo hizo de tal forma porque aún no entendía los caracteres.

"Mmm..." - La joven solo le dio un vistazo rápido antes de volver a su libro, luego de unos segundos de silencio hablo fríamente. - "50 de plata por todo."

"¿Estas segura?" - con dudas pregunto Samantha ya que el precio la sorprendió realmente, no porque fuera caro, sino lo contrario... debido a que en la lista solicitaban un caldero de clase media, creyó que al menos le costaría una o dos monedas de oro, pero la joven solo le pidió 50 de plata.

"Si... si no pagaras entonces retírate..." - Declaro la joven con arrogancia lo que provocó que Samantha frunciera el ceño de nuevo, pero esta vez no dijo nada y solo coloco una moneda de oro en la mesa.

La joven miro la moneda con sorpresa antes de tomarla y devolver 50 de plata desde atrás del mostrador, luego de lo cual tomo la lista mientras comenzaba a sacar cada uno de los productos enlistados, todo fue hecho de forma meticulosa hasta que llego a los últimos productos que eran el equipo básico de alquimia, que consistía en el caldero de rango medio, instrumentos de medición, una especie de mechero, etc.

"E-esto es..." - el rostro de la mujer palideció al darse cuenta de lo que hizo, ya que todo el equipo junto por si solo valía cerca de 20 monedas, pero el caldero por sí mismo al ser de clase media supero fácilmente las 50, y su tienda lo vendía como mínimo en 70, eso significa que todos los productos juntos incluso en el precio más barato superaban la moneda de oro.

"Mmm, toma..." - Samantha coloco otra moneda de oro sobre la mesa, lo que provocó que la joven se sonrojara avergonzada antes de terminar de recolectar los productos y pasarlos en silencio a Samantha, llevando el caldero junto a las otros productos comprados anteriormente, sin embargo, cuando salían de la tienda un pequeño murmuro llego a sus oídos. - "Gracias."

Con las compras ambas regresaron a la posada, aunque eso atrajo la atención de la mayoría de las personas por el llamativo caldero que ambas cargaban, al llegar a la posada Samantha dejo a Bella cuidando a Ria quien comenzó a trabajar y ella se dirigió a la academia, sin olvidar darle a la posadera un poco de dinero para que enviara comida para ambas chicas.

El resto del día transcurrió sin problemas aparte del regaño que recibió de Luvia por no avisarle sobre su retraso, al regresar solicito una habitación más grande u otra cama, pero debido al tamaño de las habitaciones lo más que lograron fue cambiar una cama individual por una doble, lo que llevo a que Bella y Samantha volvieran a dormir juntas terminando en la misma situación donde sus cuerpos se abrazaban por la mañana.

Así transcurrieron los días tranquilamente, permitiendo experimentar cierta calma en la agitada vida de las chicas, básicamente su día se repartía en:

Desayuno-Academia-Entrenamiento ligero-Ayudar a Ria-Dormir

Esto permitió que las habilidades de Samantha mejoraran constantemente mientras seguía las indicaciones de Liza respecto a la práctica, también encontró algo de tiempo para practica su nueva habilidad, pero tristemente descubrió que después de usarla una sola vez se agotaba a tal punto que podría caer inconsciente fácilmente.

Aunque no pudo negar que fue una poderosa habilidad.

Por otro lado, Ria se encerró todos los días dentro de la habitación, solo saliendo cuando Samantha o Bella la obligaban a comer o bañarse, pero los progresos en su trabajo fueron fructíferos ya que las rosas cambiaron constantemente ante los ojos de Samantha mostrando un cambio cualitativo a combinarse con los otros ingredientes.

Un punto a notar fue que el cuerpo de Ria mejoro bajo la influencia de las Rosas, ella les explico que al ser una druida su cuerpo absorbe de manera inconsciente la energía natural y al estar tan cerca de las rosas le permitió recuperar su cuerpo a su estado óptimo incluso sin haberla consumido.

Esto permitió que la mujer mayor con apariencia marchita rejuveneciera su cuerpo convirtiéndose en toda una belleza madura, aunque no pudo ser notado por casi nadie ya que la mujer no tuvo mayor interés en salir si no fuera obligada.

Y por último esta Bella quien aparte de su entrenamiento diario y de ayudar a Ria, se dedicó el tiempo restante a trabajar en el gremio de mercenarios acomodando mercancía, si bien al principio los del gremio no se sintieron seguros por su trabajo, le dieron una oportunidad cuando se enteraron de que el Templo la avalaba.

Antes de que cualquiera de las mujeres se diera cuenta un mes entero paso, fue en este momento que la tranquila paz se rompió cuando un Noble llego a la ciudad acompañado de su sequito y sus intenciones eran todo menos amistosas.

Ese fue el pensamiento que cruzo por la mente de todos cuando los soldados del Noble bloquearon las puertas de la ciudad.