Al despertarme el dolor en mi espalda y en mi cuerpo era peor que en el día anterior, en parte por que el invierno se volvía cada vez más pesado y aun con mi pelaje adaptado a estas circunstancias, no era suficiente para mantenerme caliente y menos después de haber perdido tanta sangre y no haber comido correctamente.
Busqué en el libro del conocimiento alguna forma de crear una fogata con mi cuerpo animal, encontré más de 100 maneras de crear una, pero muchas de ellas me eran imposibles por mi cuerpo y mis heridas. Aun así, entendí la gravedad de la situación y que solo una fogata lograría dejarme vivir un poco más.
Intente varias formas que mostraba el libro, aunque 100 maneras se puedan considerar muchas opciones la verdad es que más de la mitad de las 100 eran el mismo procedimiento, pero con uno que otro cambio. El viento no me ayudaba mucho en mi misión y mi mente cada vez estaba mas cansada y me mencionaba que mis posibilidades de sobrevivir eran casi nulas y que rendirme podría ser una mejor opción.
Pero no lo hice, decidí seguir intentando, hasta que logré poner una pequeña fogata y exhausta y probablemente al borde de la muerte me acosté a su costado esperado un milagro.
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Helge
Mi madre me conto que la pequeña niña esta desaparecida. Cuando me entere lo que hizo la sacerdotisa, enoje mucho, aunque no entendí muy bien porque lo había hecho. Al preguntarle mas detalles a mi mama ella solo me dijo que cuando creciera lo entendería.
Odio ser tan pequeño, todos me tratan como un niño, hasta esa hermosa niña me ve como alguien que debe de proteger y cuidar. Es la niña mas hermosa de la aldea, es tan bonita que cuando mi madre me dijo que quería que me casara con ella cuando fuera adulto no dude ni por un momento en aceptar sus palabras.
Sin embargo, por mi madre y mi padre se que a las mujeres no les gustan los "niños" sino que se sienten atraídas por los "hombres". Se que si le digo que se case conmigo me rechazaría diciendo que tan solo soy un pequeño.
Pero esta es mi oportunidad para ser un hombre, aunque mi madre no me dejo ir al bosque si yo la encuentro y la salvo sé que podré acercarme más a ella. Por lo que mientras el grupo de rescate entraba al bosque me cole con ellos con mi forma de zorro blanco.
No te preocupes niña ya iré a rescatarte.