Chapter 239 - 36

Han pasado cinco meses con unas semanas, desde que acepte el cambio. Los únicos que sabemos de mi nueva identidad es Akira, Kanji y nuestros hijos. No hemos querido mezclar a Mr. Jefferson en este asunto, será mejor que no se le diga por ahora. Fue bastante difícil al principio el poder acostumbrarme a esta nueva persona, una nueva vida, un cambio en todos los aspectos. Una personalidad que es totalmente diferente a la mía. Akira se encargó de mostrarme absolutamente todo de esta nueva mujer. Estaría a cargo de una empresa en este mismo estado, entre otras más que tiene. Kanji será encargado de la empresa mientras yo no esté,  mientras que Akira será uno de los ejecutivos e inversionistas. El manejo de una empresa no es para nada fácil. Akira me mostró cada parte fundamental y me ha servido de mucho. Hoy tendría que presentarme por primera vez a la empresa y poner orden. Estaría acompañada de ambos. Kanji ha estado más cerca de mi, que el mismo Akira. Kanji tiene más experiencia en el negocio de lavado de dinero. Él es quien se estaría encargando de todo mientras logro tocar el piso en esto. Hoy va haber una reunión en donde darán una propuesta supuestamente favorable para la empresa, es por eso que tendré que asistir antes de lo planeado, ya que requieren que la dueña escuche la propuesta.

Nuestro matrimonio se ha quedado casi igual que antes. Hemos estado tan centrados en este nuevo cambio, que no hemos tenido tiempo para los dos; aunque Akira viene todas las noches a dormir a la casa y comparte con sus hijos. Lin hizo las paces con Akira y está más tranquilo el ambiente entre ellos. Hablamos con Lin por encima de la situación y entendió muy bien, es un niño muy inteligente. Kaori no comprendió mucho, pero estuvo de acuerdo con Lin en llamarme por mi nuevo nombre en público. La identidad de los niños también fue cambiada, pero será temporal; todo esto será temporal. Cuando Akira pueda salir de todos sus enemigos y vengarse de su familia, se espera que todo vuelva a la normalidad, no veo el momento en que eso suceda. Espero valga la pena mi esfuerzo. Es la primera vez que saldré vestida y fingiendo ser otra persona. Antes salía tapando mi rostro para que nadie me reconociera o me atacaran. Akira contrató un chófer nuevo, muy amable por cierto. La casa está totalmente segura y vigilada, cámaras por doquier y hombres también.

—Mi señora, ¿Irá directamente a la empresa?— preguntó el chófer.

—Si, no hagas paradas.

—Como ordene, mi señora.

Tengo que dejar a Lisa Xiao en la casa y comenzar a actuar como Leiko Tsukino, nada de demostrar lástima hacia los demás. Akira debe estar esperándome en la empresa al igual que Kanji. Ellos estarán presente en la reunión como corresponde y para ayudarme.

—Hemos llegado, mi señora— el chófer se bajó para abrirme la puerta. Es la primera vez que vengo personalmente, todo lo que había visto de la empresa fue por fotos y videos que me enseñaron. Es mucho más grande de lo que se ve—.  Si necesita mi ayuda no dude en llamarme, mi señora.

—Gracias, no te vayas lejos.

Ella es una mujer realmente increíble. Siempre estaba a la moda, tacones altos, maquillaje, prendas finas, era una chica perfecta para los ojos de cualquier persona que la viera. Lo único que la mataba era su actitud, físicamente es hermosa, es increíble cómo con un poco de maquillaje uno puede convertirse en otra persona.

—Bienvenida, Srta. Tsukino— me dijo una empleada.

—¿Ya realizaste tu trabajo? — corté por completo su saludo, justo como hacía Leiko.

—Si, Srta. Tsukino— caminé como dueña y señora de la empresa; todo el mundo bajaba la mirada al verme. Si hubiera sido lisa, no me sentiría cómoda en un momento así.

—Buenos días, Sra. Leiko. No pensé encontrarla por aquí tan temprano— escuché la voz de Kanji.

—No sabía que tendría la dicha de ver tu despreciable cara tan temprano en la mañana, Sr. carter— Kanji sonrió maliciosamente.

—A diferencia de usted, estoy muy honrado de poder ver a una belleza como usted tan temprano en la mañana.

—No sé en qué momento le di la confianza de llamarme por mi nombre, Sr. Carter, le pido más respeto.

—Disculpé, fue mi error — Kanji bajó la cabeza, pero me miró de reojo.

—Es muy temprano para molestar tanto, Sr. Carter — Akira caminó hacía mi y sujetó mi mano—. Buenos días, Srta. Tsukino, está más hermosa que nunca— me besó la mano. Es una forma cordial de saludar, pero que Akira haga eso activa a mi lisa interior.

—Gracias, Sr. Natsuki, ya lo sabía — solté su mano y seguí caminando. Akira me estaba poniendo a prueba y no voy a caer en algo tan simple. Leiko es alguien arrogante y presumida, es por eso que actué de esa forma.

—Tenemos que ir a la sala de conferencias, ya mismo estará llegando el representante de la otra compañía y necesitamos formular un plan junto a una contra oferta— dijo Kanji. Nos dirigimos los tres a la sala de conferencia, aún no había llegado nadie.

—¿Qué tipo de contra oferta? Aún no sabemos con lo que van a salir.

—Es cierto, pero tenemos que tener un segundo plan por si las cosas no salen como esperamos.

—Muy bien, comencemos— escuché atentamente  los planes de Kanji. Tiene muy buenas ideas. Akira no dejó mirarme ni un solo momento.

Tocaron la puerta y mandé a pasar a quien fuera. Era la asistente de Kanji, para informar que habían llegado a quienes tanto estábamos esperando. Los mandaron a pasar y el hombre tenía una pinta de ser terrible casanova.

—Es un honor poder conocerla en persona, Sra. Tsukino— se acercó a una distancia módica, vi sus intenciones de saludarme más de cerca. No me gustan las personas que te tratan con tanta confianza como si me conociera de toda la vida, cuando es la primera vez que lo veo. Lo evité por completo.

—Vaya directo a lo que venimos. No cuento con mucho tiempo, no me lo haga perder, Sr. Huswan— traté de ser lo más cortante posible. Me senté de vuelta en la silla entre medio de Kanji y Akira.

—Lo siento, Sra. Tsukino— bajó la cabeza disculpándose.

—Tomen asiento—les dijo Kanji antes de sentarse.

—Como bien saben vengo de parte de mi señor padre. Mi nombre es Lou, es un honor estar reunidos con ustedes en el día de hoy. En representación a mi padre, he venido a mostrar una propuesta que podría ser de beneficio para ambas empresas— la asistente que vino acompañándolo, nos entregó una copia del supuesto contrato a cada uno de nosotros,  lo leímos detenidamente. Entre más leía, más consideraba que esto era totalmente una estupidez y estaba fuera de contexto.

—Este proyecto se basa en construir...— antes de que pudiera terminar de hablar el Sr. Huswan, Kanji tiró los papeles sobre la mesa.

—Estoy en completo desacuerdo con esta propuesta. Tu empresa se encarga de todo el equipo para la construcción, pero de los planos se encarga nuestra compañía. Ni discutimos el lugar, ni tampoco nos informaron de sus planes hasta ahora. Crearon un contrato a base de sus ganancias, no de las nuestras. Todo el contrato habla de lo que ganaría la empresa que se encargaría de la mano de obra, pero no hablan en ninguna parte de lo que ganaría la empresa encargada de sacar los permisos y licencias, ni mucho menos de los planos. Hicieron un plano de acuerdo a su beneficio, no al de ambas compañías.

—Considero lo mismo. Este contrato no nos sirve de nada. No parece una propuesta, más bien siento que trataron de tomarnos el pelo para tener la mayor participación ustedes. Nuestra compañía no va a lidiar con este tipo de propuestas— dijo Akira

—No es así, les ruego lean bien las cláusulas.

—Considero una falta de respeto que me hayan hecho venir personalmente a escuchar esta estúpida e innecesaria propuesta. Mi empresa debe tener más participación, si es que realmente es una colaboración. Por otra parte no me interesa seguir leyendo las cláusulas de este contrato tan miserable, donde solamente su compañía es la que se beneficia— añadí.

—No es así, Sra. Tsukino. Le pido que considere darme un plazo y arreglaré esto.

—¿Para hacerme perder mi valioso tiempo? No tengo tiempo para atender este tipo asuntos Sr. Huswan— me levanté de la silla de mala gana y planeaba caminar a la puerta.

—Sra. Tsukino, le pido que por favor, me permita hablar con mi padre. Cuando haya arreglado este contrato y el informe, lo traeré de vuelta.  No se va arrepentir, lo prometo— se puso delante mi.

—Sr. Huswan, ¿Qué parte de no quiero colaborar con su empresa no entendió?

—Pienso que sería una buena idea que tengamos una colaboración de su empresa en este proyecto, ambos nos podemos beneficiar.

—Es usted una persona muy persistente y no sabe cómo detesto ese tipo de personas. Le diré una cosa, voy a darle una semana para que arregle ese miserable contrato, y si no logra llamar mi atención, tenga en cuenta que voy encargarme de que nadie más colabore con la empresa de su padre. ¿Estoy siendo clara?

—Sí, Sra. Tsukino— bajó la cabeza.

—Bien, haré de cuenta que esta reunión jamás se dio. Queda advertido. Puede retirarse— me mantuve lo más seria y cortante posible.

—Gracias por atenderme. Me retiro— bajó la cabeza y se fue con su asistente.

—Estuviste espectacular Sra. Tsukino — dijo Kanji.

—¿Viste su cara? Estaba que se orinaba en los calzones— dijo Akira conteniendo sus ganas de reír.

—Todo va de acuerdo al plan. Se supone que esto haga que su padre se sienta presionado y acepte nuestra oferta— comenté.

—Así va a ser, solo tenemos que esperar y todo saldrá como lo queremos. Iré preparando el informe para la construcción del centro comercial. Lo haré bien detallado para presentarlo en una semana, estoy seguro que no podrá resistirse, es algo que nos conviene a todos.

—Tienes razón, Sr. Carter. Tan pronto lo tengas me lo llevas. Quiero ser la primera en darle una ojeada— le dije.

—Así será, Sra. Tsukino.

—Tenemos un asunto que hablar a solas, Sra. Tsukino— dijo Akira. Se veía extraño. ¿Acaso hice algo malo?