En los restos de un edificio de apartamentos en llamas se encontraban bomberos, policías, paramédicos y los equipos de noticias.
Un reportero con preocupación miró a la cámara "Detrás de mí se encuentra el complejo de apartamentos tizoc, los equipos de emergencia están trabajando para apagar el incendio para poder empezar a buscar supervivientes.
Fuentes no confirmadas informan que del edificio un hombre con un traje negro salió del lugar y a bordo de un auto de lujo con dirección desconocida.
El gobernador dará una conferencia en unas horas para determinar si el origen del evento fue ocasionado o se trató de un accidente, seguiremos informando."
Tras esto el camarógrafo miro al reportero y realizó una seña con la cual dió por concluido el trabajo, el reportero bajo el micrófono y de su bolsa sacó un pañuelo con el cual limpió su frente.
"El evento de la masacre del poblado de hace una semana, cambios de poder en Europa y ahora lo que parece ser un atentado terrorista.
Fernando creo que tendremos mucho trabajo por delante solo espero no morir en el fuego cruzado como reportero de guerra sin haber ganado un premio Lamin.
Poder llegar a cubrir la guerra en Europa será un sueño que con gusto realizare."
Fernando miro a Agustín con una sonrisa forzada "No me gusta la idea de estar en una segunda guerra mundial pero si me da el suficiente dinero como para poder pagar a mis hijos una buena educación no me importaría morir en el frente.
Por cierto los altos mandos te han dicho algo de la niña que entrevistamos hace una semana."
Fernando sacó un cigarrillo y empezó a fumar mientras miraba la columna de fuego gigantesca del edificio "Esa niña está protegida a un nivel superior pero como periodista puedo estar seguro que donde ella está puede haber noticias frescas.
En tres meses se celebrará una obra de teatro en el palacio de bellas artes, donde asistirán grandes personalidades del ejército y del gobierno.
Después de usar todos mis contactos logré conseguir un lugar para poder grabar el evento, debes de estar preparado para morir Fernando puedo sentir que será un evento que quizá nos cueste la vida."
Fernando solo suspiro "Si muero al menos mi familia cobrará mi seguro de vida, por cierro Victoria quiere invitarte a cenar el día de mañana, es el cumpleaños de mi hijo."
Mientras esto estaba sucediendo Miyuki quien estaba viendo la televisión solo pudo fruncir su ceño, con calma miró a Julien "Julien sabes dónde puedo encontrar a la basura que realizó esto.
Puedo estar segura que está relacionado con la organización que a estado atacando a mi hija sin control, quizá lo hayan podido hacer impunemente en el pasado pero yo ya estoy en casa.
Nadie va a destruir la paz de mis hijas y salir sin castigo."
Julien solo trago saliva mientras miraba el rostro de Miyuki quien tenía una sonrisa malévola "Se dónde hay una base de la organización pero es un lugar bastante protegido.
Quetzalcóatl y la madre Tonantzin no han podido encargarse de esa base debido a que está protegida por un semidiós, podrían pelear contra él pero sería peligroso para ellos dos."
Miyuki quien tenía una copa de vino en la mano la empezó a mover para después beber todo el contenido "Julien yo no temo a la muerte ni mucho menos a un semidiós, quiero que prepares tropas ya que partiremos en 10 minutos.
Hay que matar a un pollo para espantar a los monos, también si puedes trae a ese reportero quiero que transmita esta noticia, puede que no sea un soldado pero pude ver en sus ojos que no dudará en arriesgar su vida para lograr dar una gran noticia."
Julien asintió y sacó su teléfono para empezar a hablar con algunas personas, en la zona de apartamentos Fernando y Agustín estaban relajados cuando pudieron escuchar algunos helicópteros acercándose.
Cuando levantaron sus rostros dos helicópteros militares se estaban acercando, algunos policías empezaron a despejar un gran espacio para que uno de ellos helicópteros pudiera detenerse, antes que Agustín pudiera dar la orden a Fernando para que empezara a transmitir unos policías los llevaron cerca de donde estaba descendiendo el helicóptero.
Agustín pudo ver cómo del helicóptero bajaban algunos soldados que los escoltaron al interior del helicóptero, un sargento puso su mano en el hombro de Agustín.
"No sé qué fue lo que realizaste pero la diosa Miyuki quiere que grabes la primera pelea entre dioses, usarán una cámara especial la cual estará conectada a un satélite dónde se transmitirá a nivel mundial el evento.
Claro que antes pasará por una pequeña censura si lo consideramos conveniente, seré su guardaespaldas por esta misión, recuerden no separarse pues nos enfrentaremos a una organización peligrosa.
Su seguridad dependerá de su capacidad de poder seguir las reglas tienen alguna duda."
Fernando miró al sargento "Podemos negarnos."
El sargento empezó a reírse "No pueden y tengo permiso de silenciarlos si se niegan, solo están en este lugar por cosas que no comprendemos.
En esas cajas debajo de los asientos podrán encontrar un uniforme militar azul, eso los identificará como periodistas de guerra no puede garantizar que no los matarán pero al menos nuestra gente no les disparara por accidente."
Agustín empezó a cambiarse bastante rápido mientras podía ver cómo el helicóptero avanzaba sobre algunos cerros, por el camino sabía que se dirigían a alguna parte alejada de la capital.
El trayecto fue bastante tranquilo, solo Fernando tuvo algo de mareo el cual se calmó después que el sargento le diera una pastilla de color verde.
Cuando el helicóptero pasó un cerro Agustín pudo escuchar algunos disparos y explosiones en el lugar, lo que pudieron ver fue una verdadera pelea encarnizada, pero su sorpresa se rompió cuando pudieron escuchar algunos golpes en el fuselaje del helicóptero.
Fernando sintió un poco de sudor frío por el ruido, por un momento no supo de dónde provenía hasta que pudo ver cómo el vidrio de la cabina empezaba a tener algunas grietas.
En ese momento comprendió que los ruidos eran disparos contra su helicóptero, habían llegado a una zona de guerra, el piloto empezó a descender cuando se abrió la puerta del helicóptero algunos médicos militares estaban afuera del helicóptero.
Tenían en sus manos algunos cuántos heridos de gravedad, el sargento, Agustín y Fernando bajaron del helicóptero para dejar que los médicos subieran a los heridos.