Hubo una fuerte tormenta de nieve esta mañana. Los fuertes vientos arrastraban el hielo y la nieve, enterrando la tierra bajo montones de nieve tan altos como yo. Al sol lo tapa- ban densas nubes negras, y así continuó durante todo el día.
Dado que el tiempo era bastante duro era mejor quedarse en casa a menos que quisiéra- mos entrenar deliberadamente en esas condiciones. Pero los miembros de Solitude están en período de crecimiento, y necesitan un descanso de vez en cuando.
Después de un poco de entrenamiento bajo techo en una de las habitaciones, procedi- mos a estudiar. El pensamiento independiente es muy importante para el combate. En momentos de emergencia, si alguien está más formado en un área concreta, puede ser capaz de presentar soluciones imprevistas.
Además de la lectura, la escritura y el cálculo, es obligatorio tener conocimientos de primeros auxilios para quienes suelen meterse en situaciones de combate como yo. A los miembros de «Solitude», que parece que todavía no han sido educados apropiadamente, esto también les ayudará en el futuro.
Pues bien, el hecho de que todavía trabajan para Parabellum no cambia. El primer paso para distinguir el talento es a través del estudio, y podría ser útil en la asignación de puestos de trabajo adecuados que además les puedan gustar. Además, si desarrollan los músculos pero no el cerebro, la gestión organizativa se tornaría algo engorrosa. Ne- cesito personas que sean capaces de organizarse y tomar decisiones, que unos peones puedan usar la cabeza disminuiría la carga sobre mis hombros.
Mientras les animaba a estudiar, utilicé mi tiempo libre para cosas como cocinar y coser. Fue un día de relajación. Disfruté usando un poco de mi tiempo enseñando a los niños y viéndoles estudiar en un día nevado.