Hoy, todos los miembros a quienes ordené permanecer en la mazmorra durante tres días volvieron a salvo. A pesar de que hubo alguien que resultó gravemente herido en una batalla con un monstruo de la mazmorra, no terminó habiendo problemas importantes ya que lo curaron con una poción de vida que les entregué con antelación. Estas pocio- nes las había hecho Alquimista-san usando los objetos que yo le daba.
Muchos tenían expresiones renovadas en su cara. Me preguntaba si se daban cuenta del poder que habían conseguido con su formación hasta este punto.
Como al final tuvieron más tiempo de lo esperado, muchos grupos alcanzaron el nivel final de la mazmorra. Aunque no todos fueron capaces de derrotar al monstruo jefe. Solo uno de ellos lo hizo, pero con eso diría que los resultados son satisfactorios, por el momento.
Auro y Argento se encontraban entre el grupo que venció al monstruo jefe. Como era de esperar de mis hijos. Les di la pistola mágica y el tabarzín que tomé del viajero, como recompensa por su duro trabajo. Auro recibió la pistola y Argento, el hacha. Lo hice así porque la naturaleza de Auro hace que ella prefiera luchar desde la distancia, mientras que la naturaleza de Argento es la lucha cuerpo a cuerpo.
Dado que ambos estaban contentos con su regalo, pensé que no habría ningún enfren- tamiento entre ellos. Además, me dieron los objetos mágicos que adquirieron en la maz- morra, y después de redistribuirlos, decidí dejar que cada cual hiciera lo que quisiera durante el resto del día. Básicamente, les di el día libre.
En cuanto a aquellos que dejé vigilando a Principesa, Kanami-chan les ocupó dando ideas sobre cómo meterse con Caballerito, así que decidí entrar en la Cueva de la Víspe- ra de nuevo con Auro y Argento.
Hablamos de muchas cosas mientras avanzamos. Les di lecciones acerca de las debilida- des estructurales, los métodos de sacrificio y los modos de desmantelar los monstruos que nos encontramos en nuestro camino, hasta que llegamos al nivel más bajo de la mazmorra.
Ambos son todavía niños, pero sus mentes y cuerpos están creciendo muy rápidamente. Esto se debe a que heredaron [Precoz], una habilidad que he tenido desde mi tiempo como goblin, que es un rasgo racial con el que la especie comienza. Les he estado instru- yendo a diario sobre las precauciones que deben tomar con la gente que hace pleno uso tanto de sus intenciones superficiales y las reales, pero todavía pueden caer en alguna trampa a pesar de andarse con cuidado, ya que hay una parte de ellos que todavía es pura e inocente.
Aunque podría haberles echado una mano, pensé que tal vez sería mejor que ellos hicie- ran frente a la situación con su capacidad de lucha y de pensar por sí mismos. En el peor caso, dado que sus pendientes tenían mis clones en ellos, sería capaz de darles consejos y me podrían indicar su paradero si era necesario.
Pensando en esto, mientras descendíamos, era un poco más de mediodía cuando final- mente llegamos a la última estancia. Puesto que avanzamos utilizando la ruta más corta, no pasó mucho tiempo a pesar de los combates y las lecciones.
Auro murmuró desde atrás: A pesar de ser demasiado débiles y cautelosos para este lugar, hemos descendido tan fácilmente... padre es realmente increíble. Argento inclinó la cabeza hacia un lado, en respuesta, ¿A que sí? El crustáceo rojo... cangrejo rojo rey,
¿verdad? Cuando toqué su caparazón, parecía tan duro... ¿Cómo es que tu golpe fue capaz de romperlo?
¿Podría mostrarles de lo que su padre era capaz? Mientras lo pensaba, disfruté de esa misteriosa escena en la sala del jefe, así como de la compleja mirada en los ojos de mis hijos cuando se enfrentaban a ello. Y aproveché esta oportunidad para derrotar al octor- po por segunda vez.
Ya que los únicos testigos eran Auro y Argento, no perdí el tiempo y activé varias de mis habilidades a la vez, para poderlo matar inmediatamente. Sin embargo, antes de eso, hice una membrana de vacío para cortar el sonido para que no llegara a ellos. Habría sido traumático. Además, les di uno de los artículos de la herencia de Velvet como se- guro, un [Anillo de Vida Extra], un objeto mágico que se desintegra a cambio de anular una muerte de su portador.
Con los preparativos completos, puse en marcha un ataque preventivo usando [Voz Mortífera], que tiene una probabilidad fija de matar a mi enemigo, y [Rugido del Demo- nio Negro], lo que aumenta la potencia de mi voz y causa efectos negativos.
El sonido de mi voz fue lo suficientemente fuerte incluso para sorprenderme a mí, ha- ciendo que las estalactitas cercanas se desmenuzaran en pequeños fragmentos como arena, mientras que el agua de alrededor también salió disparada violentamente for- mando espuma. El volumen del sonido se amplificó y se hizo eco hasta la superficie de las rocas.
El octorpo cayó lentamente hacia adelante cuando oyó mi voz. Hizo temblar la tierra con el golpe, y dejó de moverse por completo. ¿Gané? Sorprendido, tomé mi alabarda de mi inventario y clavé la punta en el cuerpo del octorpo. Olí su carne quemarse cuando un rayo salió de donde lo apuñalé, y permaneció inmóvil. No se movió a pesar de que lo dejé de lado por un tiempo. Probablemente murió al instante.
Salmo Decisivo: [Octorpo de la Víspera] Condiciones desbloqueadas:
- Victoria en solitario
- Tiempo récord
- De un solo golpe
Yatendouji ha obtenido la habilidad rara: [Exterminador
Experto de la Víspera]
Yatendouji ha obtenido el artículo de clase [Antiguo]: [Escudo
Misterioso del Octorpo de la Víspera]
Yatendouji ha obtenido el logro: [Obsequio por la Victoria
Apabullante]
Hmmm, parece que la habilidad [Asesino de la Víspera] que obtuve la otra vez debe de haber incrementado mis posibilidades de ganar.
Las habilidades raras que he obtenido mediante las leyes de este mundo, [Tres Pasos Destructivos], [Ser Devorador de Vivos], [Asesino de la Víspera], [Ser Capturador y De- vorador] y demás, son fundamentalmente diferentes de muchas de las habilidades que he obtenido mediante [Absorción]. La mayoría de ellas están activas permanentemente.
Estoy seguro de que alguna vez esto será un inconveniente, ya que no puedo controlar su activación. Creo que producirán resultados inesperados que van a sorprenderme. No acabo de decidir si eso es bueno o no.
Tomé el cuerpo del octorpo, el tercero que he obtenido y, aunque dejó menos materiales que la última vez, también los junté todos en la misma habitación.
Indeciso sobre si debíamos volver, me di cuenta de que las miradas de Auro y de Argen- to estaban rígidas cuando me di la vuelta. De repente hubo un silencio incómodo entre nosotros y la verdad es que esa mirada suya fue dolorosa para mí. Sus ojos decían que les costaba comprender lo que acababa de pasar. No era el tipo de mirada que se suele mostrar a un padre.
Quería deshacerme de este sentimiento incómodo, así que dejé que Auro y Argento intentasen derrotar al octorpo. Les dije: No tenéis por qué hacerlo pero, ¿qué os pare- ce la idea? Al oírme decir que les daba una oportunidad, ambos empezaron a ponerse extrañamente contentos. Sin embargo, pese a que si les ayudaba no conseguirían la ex- periencia completa, el octorpo no era lo suficientemente débil como para dejarse vencer por dos inexpertos como ellos.
La pistola mágica de auro era muy potente, y podía disparar gran variedad de balas má- gicas. El tabarzín de Argento hacía explotar las heridas que tocaba, pero seguía siendo muy inferior en términos de capacidad general.
Probablemente ambos terminarían hechos picadillo por el octorpo y serían incapaces de actuar en pocos minutos. O eso, o bien quedarían atrapados por los tentáculos, muer- tos y después devorados. Por esa razón, utilicé [Invocación Sencilla: No-Muertos] para crear dos caballeros necroesqueletos que actuasen como soporte.
El grupo estaba formado por Auro, que luchaba a distancia pese a que no utilizaba la gran variedad de balas mágicas de su pistola, y Argento, que atacaba con su tabarzín lanzando las partesanas, con los dos caballeros necroesqueletos, que se quedaron cerca del octorpo todo el tiempo, con el fin de atraer su atención.
Me senté en la entrada a la sala del jefe, bebiendo vino élfico mientras observaba la lu- cha. Puesto que ya les había enseñado los puntos débiles del octorpo, así como las cosas a las que debían prestar atención, estaba tranquilo. Sin embargo, estaba preparado para intervenir si era necesario.
Tenía algunas dudas, pero terminaron siendo innecesarias. Los dos caballeros necroes- queletos tuvieron el mayor protagonismo en los ataques, tanto que uno acabó totalmen- te destruido. La mitad del cuerpo del esqueleto restante también tenía graves daños. Sin embargo, gracias a estar protegidos por los esqueletos, mis hijos terminaron de matar al jefe sin sufrir lesiones importantes que les deteriorasen.
No fueron capaces de cumplir las condiciones del Salmo Decisivo, ya que les tomó más de una hora, pero consiguieron derrotar a un monstruo jefe de nivel más alto. Aunque fuera debido a que estaban protegidos por una vanguardia que era considerablemente más fuerte que ellos, esto tiene una gran importancia, ya que obtuvieron una gran can- tidad de experiencia.
Tumbado boca arriba en el suelo mojado, los dos estaban fatigados y sin aliento. No obs- tante, sus niveles han aumentado considerablemente y Auro parece haber ganado [Pro- fesión Usuario de Pistola Mágica], mientras que Argento ganó [Profesión Portador de Hacha Explosiva]. Ambos ya tenían [Profesión Lancero] y [Profesión Arquero] que obtuvieron por su formación, y también heredaron [Profesión Berserker] y [Pro- fesión Luchador] de mí.
Aunque sus niveles siguen siendo bajos, para compensar, el gran número de profesiones que poseen aumenta su fuerza. En primer lugar, porque sus cuerpos superan con facili- dad los de un ser humano normal, y la tasa de refuerzo de sus profesiones no se puede comparar con la que un humano podría recibir.
Al tener dos tipos de sangre, con las características de un semihumano y un humano, parecen tener una tasa obviamente diferente de crecimiento de su fuerza. Tal vez estos dos me van a superar en el futuro. Y no me desagrada la idea, creo que un hijo debe su- perar a sus padres. Sin embargo, no tengo intención de perder por el momento, ya que mi dignidad como padre está en juego.
Pensando en eso, les elogié por su mejora mientras recogía el cadáver del octorpo. Vol- vimos a la superficie por la ruta más corta, y me comí los huesos de los necroesqueletos por el camino, pues su función ya había terminado.
Tardamos un rato, ya que Auro y Argento fueron quienes lucharon contra los mons- truos que nos fuimos encontrando en nuestro camino. Nos las arreglamos para salir a tiempo para la cena de todos modos.
Disfruté muchísimo del pescado que me habían preparado, y relaté las historias de lo sucedido en la mazmorra durante la sobremesa. Tuve la oportunidad de probar un nue- vo alcohol que llevaba la etiqueta de «Sake de Limo: K?forea». Se ve que estaba hecho a partir de un limo acuático.
La razón por la que quise beberlo fue que, cuando lo examiné con [Estimación Avan- zada], la descripción dijo que iba bien con el pescado. Mi garganta se sentía refrescada mientras bebía el sake, que era bastante dulce y también tenía un toque picante. Al pa- recer, eso es lo que le hacía adecuado para beber con pescado.