El día de hoy Principesa me hizo llegar una nueva solicitud.
Cuando nos separamos de ella, le di secretamente un pendiente para que se comunicara conmigo cuando lo necesitara, sin importar la hora del día. Como resultado, tuvimos muchas conversaciones, algunas durante la mañana, otras en la tarde e incluso durante la noche. Sin embargo, esta solo era la segunda vez que me hacía una solicitud.
Bueno, pues Principesa dijo Me gustaría pedirte algo y sentí que algunos problemas se avecinaban. ¿Soy solo yo... o siempre que Principesa hace una solicitud nos metemos en líos...? No... eso no puede ser cierto...
En resumen, al parecer esta vez la solicitud solo era ayudar con el entrenamiento de los
Guardias reales del Palacio Ámbar.
A ver, la última vez nos hicimos amigos de los guardias de palacio cuando ellos se unieron al entrenamiento que tuve con Ardiente-kun y Caballerito. Parecían personas decentes e incluso fueron capaces de olvidarse de la barrera racial al preguntar a una
«raza inferior» si podían unirse al entrenamiento.
Tengo que decir que no es un trabajo que tenga muchas ganas de hacer. Sin embargo, eso no quiere decir que no vaya a hacerlo, a ella no se lo negaría.
El motivo es que escuché que la Primera Reina era una persona muy animada y tal vez terminaría comiendo con ella, así como también teniendo una audiencia acerca de varios asuntos. Debido a esto, sentí que tal vez habría un motivo oculto detrás de la solicitud.
Además, de acuerdo a mis clones, al parecer había algún gran plan que involucraba a Principesa y estaba a punto de ponerse en marcha. Supongo que ella tendría la intención de involucrarme en eso.
Aunque todavía no sabía los detalles, probablemente fuera el caso en esta situación. Por eso estaba un poco preocupado acerca de aceptar esta solicitud.
Ahora, nuestros números superan los 400, pero la mayoría aún necesita más entrena- miento y adquirir mejor equipamiento. Si una situación problemática llegase a ocurrir y tuviese que llevar a todo el grupo, tengo dudas sobre si seremos o no capaces de superar la crisis. Aún no está claro y eso es lo que me preocupa.
Sin embargo, por la recompensa no tenía queja alguna. Después de todo, la recompensa era una suma bastante grande. Era obvio, ya que estábamos hablando de la realeza.
Esta vez la recompensa sería menos de la que recibimos por el trabajo de escolta, ahora bien, aún seguía siendo una suma mucho más alta que el precio del mercado para este tipo de servicio.
Ciertamente, Principesa era la clienta que nos había ofrecido las mayores remuneracio- nes hasta el momento. Aunque no era del todo sorprendente, ya que no habíamos tenido muchos otros clientes. Aun así, pensé que debía esperar antes de decidir mi respuesta ante la solicitud.
Terminé gastando lo que quedaba del día teniendo otro encuentro con Minokichi-kun. Por la noche, ya que teníamos tiempo libre, Padre Elfo y yo decidimos beber algo de vino
élfico y licor del laberinto mientras disfrutábamos de las aguas termales. Había dicho
que beberíamos a nuestro regreso, pero ya había pasado más de una semana. No pudi- mos coincidir antes ya que ambos teníamos nuestros propios asuntos que atender. Pero bueno, al final cumplimos la promesa, así que no debería haber ningún problema. Sin embargo, tengo que decir que el vino élfico es el mejor. ¡Es mi favorito! Juro que lo es...
Aunque el licor del laberinto tampoco podía tomarse a la ligera. Era un poco desafor- tunado que su costo fuese elevado, ya que era difícil de conseguir. Por esa razón, siento decir que el vino élfico seguirá siendo mi favorito.
Hmmm... En serio, tal vez sea buena idea ir de vez en cuando al laberinto en busca de licor de alta calidad.
Mientras consideraba esto, continué bebiendo alegremente con Padre Elfo. Después de un rato, Minokichi-kun y Oxidado se nos unieron. La situación se volvió una juerga muy peculiar para los hombres de más alto rango. Ya que la juerga continuó hasta bien entrada la noche, Padre Elfo decidió quedarse en lugar de atravesar el bosque durante la noche después de beber tanta cantidad de alcohol.