Tras una semana, la mujer despertó, y entonces habló a la multitud de personas que la rodeaban con una temblorosa y débil voz.
_Garek: "¿Quién soy yo?", fueron sus primeras palabras.
La mujer había olvidado su nombre. No, no sólo su nombre. Había olvidado todo.
¿Quién era, y dónde se suponía que estaba? ¿Qué había sucedido antes de que ese acantilado colapsara?
Ella no podía recordar los miembros de su familia, y no tenía otra opción más que quedarse.
Todo lo que tenía eran las ropas que vestía durante el accidente. De un emblema cosido en éstas, las únicas letras discernibles eran "Re".
_Garek: Influenciado por el nombre de una flor floreciente, decidí llamarla Reala. Luego, planeé hacerme cargo de ella hasta que sus heridas se curaran.
Sus heridas se curaban poco a poco, y el día en el que le darían de alta no estaba muy lejos.
Reala, incluso sin tener adónde ir, se mantuvo como una mujer alegre. Lidió con la tristeza del accidente como si nunca hubiese pasado, y les ofrecía a todos los que estuvieran en contacto con ella sonrisas contagiosas.
En su situación, sería imposible no sentirse intranquilo.
Semejante pérdida de memoria era casi como la desaparición de uno mismo. Pero ella podía mantenerse sonriente porque lo creía necesario.
O tal vez estaba preocupada por las personas a su alrededor.
Pero la razón más importante era que ella no se veía a sí misma como alguien desafortunada.
_Garek: El nerviosismo de pedirle que viniera conmigo sigue fresco en mi memoria. Esa fue probablemente la vez que más nervioso estuve en mi vida, incluso más que cuando le pedí matrimonio.
Así que, aceptando la propuesta de Garek, Reala fue con él a Priestella.
La razón por la que no quiso abandonarla desde el comienzo y que hubiera esperado tanto hasta que ella despertara, era increíblemente simple.
Garek se había enamorado de ella desde el principio, desde el momento en que limpió el lodo de su rostro, la arrastró fuera del derrumbe y la acostó en el carruaje de dragón.
_Garek: Mis negocios, los cuales habían sido desafortunados hasta que rescaté a Reala, mejoraron rápidamente. La gente a mi alrededor decía que era gracias a mi talento, pero en realidad, era todo gracias a Reala. Fui bendecido con ella, así que ahora puedo ser un hombre de negocios, hacer cosas relacionadas con el funcionamiento de la ciudad, o incluso ser un buen padre.
_Garfiel: …
_Garek: Amo a mi esposa, y nuestros dos niños son muy adorables. Solía importarme su pasado, pero, en este momento, no importa quién haya sido antes. Considero a mi esposa la persona más importante para mí.
Garek terminó de hablar sobre su primer encuentro y concluyó con un poco de vergüenza.
Garfiel, quien había estado en silencio desde el principio hasta el final, escuchando atentamente, miró al cielo. En la oscuridad, las estrellas estaban dispersas en todas partes.
A la gloriosa luna llena y a las estrellas probablemente no les importaba sus pensamientos actuales.
_Garek: Siento mucho preguntarte esto, pero no puedo evitarlo.
_Garfiel: …
_Garek: ¿Cuál es la relación entre tú... y mi esposa, Reala?
Esa— era una pregunta bastante cruel.
Su mirada descendió desde el cielo hasta Garek.
Los ojos gentiles de Garek mantenían una firme determinación mientras observaba a Garfiel. Era enfático, y no sería tan insensible como para malinterpretar lo que Garfiel dijera.
Y así, Garfiel sabía exactamente qué respuesta sería la correcta.
_Garfiel: …
Abriendo y cerrando la boca.
Respirar, exhalar, inhalar, respirar uniformemente.
Rápidos latidos. Mareos. Un estallido de dolor en la cabeza, y náuseas.
El remolino de emociones aún no formadas en su apretado pecho estaba al borde del colapso.
— Mimi agarró con fuerza su mano.
_Garfiel: Mi asombroso ser…
_Garek: …
_Garfiel: No tiene nada que ver con tu 'sposa.
Lo dijo.
Lo dijo en voz alta.
Con esa frase, el vórtice que se arremolinaba en el corazón de Garfiel desapareció rápidamente.
Sólo le quedaba una sensación de pérdida y un asfixiante abatimiento. Garek, que estaba delante de él, bajó la cabeza como si hubiera cometido un error y no quería mirar a Garfiel a la cara, hablando con voz temblorosa.
_Garek: Lo siento, lo siento mucho…
Con una mirada de dolor antinatural, se inclinó.
Sin embargo, Garfiel no quería ver la reacción de Garek.
Ya había tenido suficiente. Quería irse, quería dejar de ser herido.
¿Qué había salido mal? ¿De quién era la culpa? ¿Era culpa suya o de Garek? ¿A quién debería culpar? ¿A quién debía atacar, a quién debía golpear, a quién debía enviar volando?
¿Qué podría hacer para acabar con el dolor de su corazón, para hacerlo desaparecer para siempre?
_???: ¡Cariño! Esto es genial, el Señor Gorgeous y Mimi siguen aquí.
_Garfiel: ¡¿—?!
Esas palabras resonaron con un volumen inmenso.
El dolor y la confusión amplificaron el intenso ruido como si pudiera matar.
Para Garfiel, se sentía más afilado que un cuchillo.
_Garek: Reala, ¿por qué...?
_Reala: Te fuiste con mucha prisa, pero no quería que te fueras con las manos vacías, así que...
Reala parpadeó y pasó junto al sorprendido Garek.
Luego, ella se acercó al aturdido y rígido Garfiel, extendiendo su mano.
_Reala: Este es el postre que hice, un soufflé. Aunque no es un regalo muy caro, aun así estoy orgullosa de ello. Espero que lo aceptes.
_Garfiel: ...Ah.
Su sonrisa no contenía ningún rastro de malicia.
Tercamente, Garfiel se negó a hablar.
Su intercambio con Garek le había abierto viejas heridas, impidiéndole hablar con Reala. Cualquiera que entendiera esto también sabría cómo actuar.
Y entonces:
_Mimi: ¡Oh~! ¡Un postre, qué divertido~! ¡Yuju, lo compartiré con la señorita~!
Reala le dio la bolsa a una sonriente e indiferente Mimi, que había ignorado el ambiente.
Garek lucía sorprendido, y Garfiel estaba sin palabras. Sin embargo, Reala tan sólo mostró una divertida risa ante la reacción de Mimi.
_Reala: Estoy muy feliz de que te guste, y por favor ve a compartirlo con esa señorita.
_Mimi: ¡Okay, entendido~! Enten... ¡Entendido~!
Tras despedirse con la mano que no le dolía por el apretón de Garfiel, Mimi tomó la bolsa en sus brazos y palmeó a Garfiel en la espalda.
Ella aplicó tanta fuerza que él no pudo evitar toser, y Mimi sonrió.
_Mimi: ¡Bueno, esta vez sí que nos vamos~! ¡Gorgeous Tiger y Gorgeous Mimi se despiden~!
_Reala: De acuerdo, feliz viaje, y ten cuidado de no caer en el agua, señor Gorgeous.
Mimi tomó de nuevo la mano de Garfiel, y Reala los despidió con su mano mientras se iban.
Sonriendo, Mimi se dio la vuelta y se despidió de regreso. Sólo los dos hombres quedaron con una expresión de dolor en esta sonriente despedida.
_Garfiel: …
Así, Garfiel fue guiado por Mimi siguiendo los canales de agua.
Mimi y Garfiel no hablaron hasta mucho después de que Reala hubiera desparecido.
_Garfiel: Ey, enana…
_Mimi: ¡Por~ aquí~!
_Garfiel: ¡¿——?!
Garfiel había querido hablarle a Mimi, pero fue interrumpido repentinamente.
Mimi, quien todavía sostenía la mano de Garfiel, saltó rápidamente sobre un edificio de piedra de tres pisos, ascendiendo con el uso de varios puntos de apoyo.
Garfiel fue arrastrado y, por supuesto, obligado a tomar el mismo ritmo que ella. Con unos pocos saltos, los dos habían llegado a la parte superior del edificio.
_Mimi: ¡N~! ¡Se siente tan bie~n!
_Garfiel: Y una mierda. ¿Qué 'stabas haciendo?
Mientras Mimi gritaba su confort a la vez que la brisa la envolvía, Garfiel se quejó. Sin embargo, vio que la sonrisa de Mimi había desaparecido mientras ella lo observaba.
Garfiel se vio reflejado en los ojos redondos de ella, y no entendió el malestar que se estaba gestando en su corazón.
La expresión de Mimi cayó ante el silencio de Garfiel.
_Mimi: Garf, ¿quieres llorar?
_Garfiel: ¿Eh? ¿Qué 'stás diciendo? ¿Por qué lloraría mi asombroso ser?
_Mimi: Sé que Garf es fuerte, pero no deberías hacerte el fuerte ahora. Reala es la madre de Garf, ¿verda~d?
_Garfiel: …
Ante la inesperada pregunta de Mimi, Garfiel contuvo el aliento.
Mimi había captado con precisión de qué iba la historia. Si hubiera conocido el pasado de Garfiel, llegar a esa conclusión sería fácil. Sin embargo, Mimi no sabía nada de la familia de Garfiel. Su habilidad para discernir la verdad era realmente impresionante
Que ella hubiera sacado el tema directamente a discusión sacudió a Garfiel, y él dudó.
_Garfiel: ¿Por qué... pensarías eso...?
_Mimi: Garf y Reala huelen su~perparecido, y sus hijos también olían un poco como Garf, así que pensé que ese podría ser el caso.
Su suposición no se basaba en el razonamiento, sino en algo innato que le permitía saber la verdad al desnudo.
Si Mimi lo hubiera deducido a raíz de las palabras de Garfiel, él podría haber intentado ocultar su pasado, pero Garfiel no podía refutar algo así.
Sus piernas cedieron, Garfiel miró a las estrellas aturdido.
Las estrellas y la luna no cambiaron, observando a Garfiel de la misma forma que siempre.
_Mimi: Entonces, ¿es cierto? ¿Reala es la madre de Garf?
_Garfiel: ...No lo 'ntiendo. ¿Esa mujer sigue siendo la madre de mi asombroso ser?
Al escuchar las palabras de Mimi, Garfiel se cubrió la cara con una mano.
Él pensaba que Reala inconfundiblemente era Reshia.
Tal y como dijo Garek, como la propia Reala había actuado hasta ahora, había olvidado por completo que ella era Reshia.
Olvidando todo, Reala había encontrado un nuevo comienzo, criando a sus hijos, viviendo felizmente.
_Garfiel: Ah, ahora que lo pienso, eso significa que esos dos niños son hermano y hermana de mi asombroso ser.
Aunque acababa de darse cuenta, sus hermanastros tenían una relación similar a la de él mismo y Frederica. En otras palabras, esos hermanos eran sus hermanos menores. Esa había sido una relación que Garfiel anhelaba desde que era pequeño.
Ojalá él pudiera disfrutar de esa relación sin las circunstancias que la rodeaban.
_Garfiel: Aunque mi asombroso ser le dijera quién soy, nada cambiaría...
Reala había olvidado su tiempo como Reshia.
Aunque Garfiel le contara todo, sus quince años como Reala permanecerían inalterables.
Si lo contara, sólo lograría que Reala cargara con quince años de culpa innecesarios, sintiéndose como si hubiera perdido a Reshia; Garek sólo podría presenciar la depresión de su esposa, y sus hijos sólo observarían el dolor de su madre sin entenderlo.
Contarlo todo sólo sería por el bien de Garfiel.
Hacer que Reala aceptara que ella solía ser Reshia no serviría a nadie más que a Garfiel.
Frederica y Ryuzu no tenían idea de que Reshia había sobrevivido. Si Garfiel no dijera nada, ellas dos nunca lo sabrían.
A la familia de Reala tampoco le molestaba desconocer su pasado. Si se enteraran de ello, lo más probable es que esos tiempos felices se perdieran en lugar de preservarse.
Si Garfiel lo ocultaba todo y lo dejaba ir, todo esto podría resolverse con éxito.
Pero aun así…
_Garfiel: ¿Por qué mi asombroso ser...?
No parecía tener el valor de enterrar todo esto en su conciencia, de enterrarlo dentro de sí mismo.
Tigre, ¿dónde estás? Muéstrame el camino correcto.
Él quería encontrar la fuerza para soportarlo todo, asumirlo todo en solitario.
Dímelo por favor, tigre, tigre. Un verdadero tigre es la existencia más fuerte que no perdería ante nadie.
_Garfiel: ...
Sosteniéndose la cabeza, conteniendo sus pensamientos desbordados, lamentando los sentimientos que se arremolinaban y se mezclaban, perdiéndolos y encontrándolos.
_Mimi: Está bien…
En el siguiente momento, notó que su cabeza estaba siendo suavemente acariciada.
_Garfiel: ...
Mimi abrazó al colapsado Garfiel por detrás.
Descansando su mandíbula en su cabeza, su pequeña palma acariciaba la cabeza de Garfiel.
Ese tierno toque en su espalda, moviéndose hacia adelante y atrás, gradualmente alivió el dolor y la agitación en su mente.
_Garfiel: ¿Qué, qué 'stás haciendo? Esto es...
_Mimi: N~, si Garf necesita llora~r, ¡creo que hay un lugar específico donde los hombres pueden llorar! ¡Aunque me olvidé de dónde, recuerdo que la señorita me lo contó~!
Por un momento, ella pareció estar dando una respuesta, pero sus pensamientos se desviaron.
Para que su corazón no temblara, para que su voz no temblara, Garfiel elegía cuidadosamente sus palabras.
Así, sosteniendo a Garfiel, Mimi se rio.
_Mimi: Bueno, lo he olvidado, pero~ ¿tal vez es la sensación del pecho de una mujer? ¿Es algo como eso? ¡Eso es! ¡Ahora lo recuerdo! "Está bien que un hombre llore en el pecho de la mujer en la que está interesado~!".
_Garfiel: …¿Quién 'staría interesado en una enana como tú?
A Garfiel le interesaba una mujer que nunca era amable cuando él quería que lo fuera, sino cuando menos lo esperaba, después de lo cual ella lo golpeaba con sus puños, una mujer que era increíblemente difícil de tratar.
La chica detrás de él no se parecía en nada a ella.
Sin embargo, Mimi seguía sonriendo.
_Mimi: N~, ¡pero está bie~n! ¡Aunque Garf no esté interesado, Mimi ya está fascinada! ¡Ya ves~, me interesa Garf! ¡Entonces! ¡En el pecho de Mimi~! ¡Está bien llorar ahí~!
_Garfiel: —Ah...
Qué idea tan tonta.
¿Qué es esto? ¿Algún tipo de juego de palabras? Es sólo la excusa de una niña, cargada con nada más que positividad.
Obviamente no hay nada allí, así que deja de bromear.
Tigre, tigre, ¿dónde estás?
Vuelve a mi corazón ahora mismo. Deja que tu profundo y feroz rugido retumbe. Golpea esta espalda encorvada, oblígame a despertar, haz algo con mis sentimientos.
De lo contrario, de lo contrario... de lo contrario, será demasiado tarde.
_Garfiel: Mamá…
Basta, basta, deja de hablar.
Llorando con una voz débil… No hagas una voz tan débil.
Él era un tigre, el más poderoso, el más fuerte, más fuerte que todos. El más fuerte de los escudos. Sin embargo,
_Garfiel: ¡¡Mamá… mamá… mamá…!!
_Mimi: Buen chico.
_Garfiel: ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué te olvidaste de mí?! ¡Y cuando nos vemos después de todo 'ste tiempo; ¿no se me permite llamarte mamá...?!
_Mimi: Está bien. ¡Garf es un buen chico! ¡Un buen chico~!
_Garfiel: Mamá… mamá… mamá…
Tigre, tigre, ¿dónde estás?
¿Qué parezco ahora? Estrellas, luna, cielo, díganme. ¿Qué parezco ahora?
¡Si no parezco un tigre rugiente, entonces, ahora mismo, ¿qué parezco?!