"¡Hola! ¡Mi nombre es Son Gokú!", Gokú saludó haciendo una reverencia.
"Yo soy Bulma", se presentó Bulma con cortesía.
"¡Escuché que fuiste maestro de mi abuelito!", dijo Gokú con una expresión emocionada.
"Jaja, sí, y al parecer heredas bastante bien su entusiasmo", dijo Roshi acariciando su barba, "En cuanto a ti jovencita…", Roshi, miró a Bulma, aun acariciando su barba. Sus cejas se arquearon varias veces antes de dirigirse a la tortuga. "Entonces, ellos dos te ayudaron, ¿no?"
"¡¿Yo qué?!", Bulma gritó exasperada, ¡no esperaba que el ermitaño se quedara en silencio!
"Sí, sobretodo el muchacho, tuvo la determinación de ayudarme", asintió la tortuga, "La muchacha parece que es más temerosa…", dijo con sutil desprecio en su voz.
"¡Ey! ¡Sigo aquí!", Bulma se sintió molesta por que la ignoraran.
"¡Ya está!, Sé que es lo que les voy a regalar- ", Roshi fue de pronto interrumpido por un peculiar sonido, familiar para ambos Gokú y Bulma.
Y acompañado con el sonido, un brillo surgió del pequeño saco de Gokú, la mochila de Bulma y… debajo de la barba del anciano.
"¿Eh?", Roshi y la tortuga miraron confundidos, pero Bulma y Gokú arquearon ambas cejas.
"¡Ermitaño Roshi!", quién reaccionó más rápidamente fue Bulma, "¿P-puedo saber que tiene bajo su barba?", Roshi movilizó su brazo y agarró algo bajo su barba, ¡revelando la tan esperada Esfera del Dragón! Era la San Xingqiu, la Esfera de tres estrellas.
"¡Sí es!", Gokú exclamó ligeramente sorprendido.
"¿Eh?, ¿de qué hablan, par de jovencitos?".
"Es una esfera del dragón", dijo Gokú emocionado.
"¿Nos la podría dar?", preguntó Bulma un poco nerviosa.
"Bueno, claro que puedo", asintió Roshi, como la esfera estaba atada a una especie de collar, Roshi la jaló sacando la esfera de su cautiverio, y se lo otorgó a Bulma. "Pero… si no es mucha molestia… ¿podrías mostrarme tus bragas?", preguntó el anciano con una sonrisa sincera. Bulma miró a Roshi en silencio, la Tortuga miró a Roshi en incredulidad, y Gokú miró a Roshi en confusión.
Bulma frunció el ceño y su casa se comenzó a poner roja.
"…Tú…", Bulma miró a Roshi con enojo, dirigiendo su mano a su mochila, y Roshi, sintiendo un mal presagio decidió terminar el pequeño chiste ahí.
"Está bien si no quieres, toma, toma", Roshi se apresuró y le lanzó la esfera del dragón, a lo cual Bulma atrapó y miró a Roshi con los ojos achicados en sospecha.
"Maestro Roshi…", la tortuga habló con incredulidad.
"No puedo hacer algo tan humillante…", susurró Bulma, pero decidió sacar la cápsula de su casa y entró rápidamente, finalmente salió y le otorgó un objeto. "A mi padre se le pasó dejar una de sus revistas en mi casa, así que te la puedes quedar", dijo Bulma con ligero desdén en su voz, "Gracias por la esfera", no se le olvidó ser cortés y guardó la casa de nuevo en su cajita.
"¡Oh!, ¡Una edición limitada!", Roshi exclamó emocionando, echándole un ojo a la revista, "¡Gracias jovencita!", agradeció Roshi, y luego se giró rápidamente hacia Gokú que miraba la escena divertido. "Pequeño, en cuanto a tu recompensa, va a ser una muy especial, si me permites…"
Roshi se colocó en la orilla de la playa.
"¡Nube Kinton!", Alzando su bastón, el anciano gritó con fuerza, Bulma pudo jurar que escuchó eco tras el grito, y… no pasó nada. "¿Hmm?", Roshi arqueó una ceja confundido.
"A lo mejor la Nube ya no lo reconoce por la cantidad de impureza que llevas", se burló la tortuga con enojo en su voz.
"Calla tortuga, aunque no lo parezca, sigo bastante p-", antes de que Roshi pudiese continuar notó un haz en el cielo, y posteriormente, pudo notar una nube de un color anaranjado pararse frente a él, "¡Eh!, ¡Ya llegó!", dijo Roshi con una sonrisa, "¡ésta será tu recompensa!", dijo Roshi girándose hacia Gokú.
"¿Una nube de algodón?", preguntó Gokú con interés
"No, no, mira", Roshi saltó e intentó subirse, pero calló de pompas directamente bajo ésta. "Ayayaya", Se quejó, "parece que está defectuosa".
"No creo, esto solo confirma que eres bastante impuro"; dijo la tortuga con una expresión sarcástica.
"Cállate, Gokú intenta subirte".
"Okay", Gokú asintió y saltó, aterrizando ligeramente sobre la nube, "¿oh?", Gokú se arrodilló tocando la nube, "¡Que esponjosa!", dijo con una gran sonrisa, Roshi arqueó ambas cejas con sorpresa.
"Que joven tan interesante", mientras Roshi susurraba sus pensamientos, Gokú movilizó la Nube y notó como ésta reaccionaba a sus pensamientos con mucha facilidad.
"¡Yujú!", Gokú exclamó divertido, "¡Que genial!".
Gokú voló con libertad. Bulma mientras miraba la situación desenvolverse con ambas cejas arqueadas metió las esferas en su mochila y sacó el radar, teniendo cuatro esferas en su posición, solo quedaban 3 restantes. Una estaba al noreste de su posición, y las otras dos al noroeste, Bulma guardó el radar y observó a Gokú pararse frente a ella.
"¡Mira Bulma! Intenta subirte", dijo Gokú divertido, bajándose. Bulma miró la nube.
"Okay, lo voy a intentar", Bulma asintió y colocó sus manos en la superficie de la nube, "¡Oh! Si es bastante esponjosa", tras este comentario, Bulma se impulsó y calló de rodillas sobre la nube. "Se siente muy bien", dijo Bulma con ambas cejas arqueadas. Pero la felicidad no le duró mucho, porque poco después la nube se abrió dejándola caer de rodillas en la arena, "Auauau".
"Jajaja, parece que la muchacha no es demasiado pura tampoco", se burló ligeramente Roshi.
"Por lo menos si se logró subir", la Tortuga se burló.
"¿Por qué eres tan malo conmigo?", preguntó Roshi mirando a la Tortuga.
"No pensé que mantuvieras tus actitudes nefastas tras muchos siglos, hmph".
"Ah, qué pena, quería que experimentaras lo divertido que es andar en la nube", Gokú suspiró ligeramente triste., Bulma se levantó con un rubor en rostro.
"Ahem, lo que sea, no es como que lo necesitara", luego se giró a roshi, "Gracias Maestro Roshi por las recompensas"; Bulma hizo una ligera reverencia.
"¡Gracias!", Gokú también hizo una reverencia.
"No hay problema", respondió Roshi, "Yo soy quien les tiene que agradecer, hacía un año que no veía a mí caparazonado amigo", dijo tocando el caparazón de la tortuga con su bastón, "Ah Gokú, viendo que te vas a continuar tu viaje, ¿no te gustaría entrenar bajo mi tutela en otro momento?" Gokú miró a Roshi con interés.
"Pues, estoy viajando con Bulma de momento, cuando termine el viaje ¡puede que venga!", Gokú asintió con una sonrisa.
"Ah sí, no me busques en esta playa, vivo en una isla con una casita que dice "Kame House" en esa dirección", dijo señalando detrás suyo con su bastón
"¡Okay!", Gokú asintió con entusiasmo.
"¡Bueno, nos vemos!", tanto Gokú como Bulma se despidieron, Bulma se subió en su motocicleta y Gokú en la nube.
La nube, como era de esperarse, era mucho más rápida que la moto así que gokú desaceleraba y se ponía a la misma velocidad que la moto mientras se relajaba en ésta.
"Que anciano tan enigmático, ¿no te parece Gokú?", Bulma inició conversación después de avanzar varios kilómetros de la playa.
"Sí, se le veía más enérgico que mi abuelito, y eso que se ve más demacrado que él", Gokú afirmó tras escuchar la pregunta de Bulma.
"No me has contado mucho de tu abuelo", dijo Bulma con curiosidad, "Se llama Son Gohan, ¿no?"
"Unm", Gokú asintió, "Hasta donde recuerdo, mi abuelito me enseñó de artes marciales desde que era pequeño, por eso tengo tantas habilidades, aunque hubo un periodo en el que me dejó de enseñar artes marciales y en cambio me enseñó técnicas de supervivencia". Dijo Gokú recordando su vida. "Después de eso, se fue por un tiempo largo".
"¿un tiempo largo?", preguntó bulma, Gokú asintió.
"Después volvió, pero estaba herido, una herida de la que ya no se podía recuperar", dijo Gokú recordando las vendas que tenía que usar por meses enteros, "Mi abuelo supo el día exacto que se iba a morir, así que ese mismo día me legó muchas cosas…", Una pequeña lágrima recorrió los ojos de Gokú antes de recuperar la compostura. "Y después de eso pasé como un año solo hasta que apareciste tú".
"Oh", Bulma asintió.