No sabia porque estaban enojadas, pero aun así me sentía como si les estuviera ocultando algo, pensé en miles de cosas por las que me estuvieran acorralando pero todas eran descartadas, pasaron unos segundos y al fin levante la cabeza.
-Yo... lamento haberlas preocupado mucho, yo estaba realmente asustada de que les hubiera pasado algo, así que simplemente cuando vi a los para médicos no pude soportar la idea de perder a alguien más.- Dije mientras veía como relajaban su rostro y bajaban las manos de sus caderas para después sentarse frente a mi.
-Sash, te prometimos que siempre estaríamos a tu lado y que jamas dejaríamos que te pasara algo.-Ashley tomo mi mano para después regalarme una de sus hermosas sonrisas que te hacen quererla.
-Hija, sé que desde que Mía nos dejo has pasado muchos momentos difíciles, pero no debes callarte aquellos problemas que te atormentan. Tal vez ya no esta ella con nosotras pero...- La señora Alice guarda silencio un momento mientras intenta reprimir sus lagrimas. -Pero me duele el verte triste, eres como mi otra hija y quiero verte ser feliz, te has perdido de vivir muchas experiencias por intentar crecer demasiado rápido. Casi nunca vas a fiestas, siempre estas trabajando en la biblioteca o en tus libros... me parece que la ultima vez que te fuiste de vacaciones era cuando tenias 17.- Toma mi mano y la de Ash mientras nos mira a las dos. -Son la cosa más hermosa que tengo en mi vida, no he sido una buena amiga... ni una buena madre.- Su voz se quiebra y corren unas lagrimas por su rostro.
-Mami, eso no es verdad.- Dice Ashley llorando.
-Señora Alice, usted es la mejor persona que he conocido, mi madre la amaba demasiado, aunque no eran hermanas de sangre siempre se apoyaron y lograron crear una familia juntas como amigas.-Dije tratando de reprimir mi llanto.
-No mis niñas... sé que no he sido una buena madre porque...- Mira brevemente a Ashley para después intentar calmar su llanto. -He permitido que Ash sufra con una persona que no la merecía, siempre supe que él no era una buena persona pero aun así lo deje estar al lado de ella, para después enterarme todo lo que le hizo a mi bebé. También no he podido cuidar bien de ti Sasha, te he dejado sola, te han pasado cosas horribles y tú nunca has demostrado algún rastro de debilidad, has guardado todo en tu pequeño corazón y mira... hasta ahora después de tantos años has explotado,- Intento hablar pero ella me hace una seña para que la escuche.- No pude proteger a tu madre de ellos, sabia que no traería nada bueno el que las dejara ir solas a encontrarse con tu padre, debí haber ido o tal vez evitado que fueran a su encuentro.-
Escuché todo lo que decía y mi corazón se estrujó, me invaden millones de recuerdos y sentimientos felices que viví al lado de mi madre, tomo con mas fuerza las manos de las dos mujeres que están frente a mi hechas un mar de lagrimas, sonrió al ver a las dos personas que siempre me alentaron y motivaron a trabajar y no darme por vencida, suelto lentamente sus manos y las abrazo con fuerza.
-Gracias.- Reprimo mis ganas de llorar y mantengo una voz tranquila para consolarlas.- Gracias por estar siempre conmigo, no debemos pensar en que cosas debimos haber hecho porque ya paso, debemos concentrarnos en vivir el presente, ser fuertes y seguir adelante. Mi madre estaría feliz de tener a una gran amiga y una hermosa sobrina que están pendientes de mi.- Siento como me abrazan con fuerza y una sonrisa se dibuja en mi rostro, "Debo ser fuerte para protegerlas" es el primer pensamiento que se me viene a la mente y decido aferrarme a ellas, pase lo que pase las cuidaré de esas personas.