Manejé lo más rápido que pude, casi eran las 8 de la noche cuando iba llegando a la calle, busqué un lugar para estacionarme y encontré uno frente a la biblioteca, cuando me iba a bajar del auto vi que las luces se apagaron, y después la vi salir, ella estaba cerrando la puerta cuando alguien caminó hacia ella y la saludó.
-¿Está lista para irnos señorita?-. Dijo un hombre rubio mientras la abrazaba.
-Claro que si, ¿como te fue en tu asunto del trabajo?.- Dijo ella mientras le devolvía el abrazo y seguía hablando con él.
¿Qué estaba pasando? ¿Porqué se estaban abrazando?, la situación me hizo sentir incomodo, nunca pensé que ella estuviera saliendo con alguien, solo había hablado una vez con ella pero... bueno, nunca puse como posibilidad que ella ya tenia a alguien... después de todo no la conocía. Realmente desee no haber ido a aquel lugar, cuando iba a irme un carro se estacionó frente a mi bajó una mujer que al verlos corrió a abrazarlos.
-¿Tienen mucho tiempo esperándome?.- Dijo la joven mientras los tomaba del brazo y los empujaba hacia su carro.
-No, acabo de llegar y Sasha estaba cerrando la biblioteca.- Dijo el joven rubio señalando a la joven de la biblioteca.
Me seguía sintiendo raro así que decidí irme antes de ver otra cosa que no quería, además de que sentía que estaba espiándolos, la cual no era mi intención, pero por lo menos había logrado saber el nombre de la joven pelirroja.
-Ash, vamos a comer al lugar al que siempre vamos, nuestro amigo acaba de llegar y debe de ponernos al corriente de todo lo que ha hecho estos años.- Dijo la joven pelirroja mientras subía al carro.
Cuando escuché eso la sensación de pesadez se fue, ella no estaba saliendo con ese tipo y solo eran amigos, no pude evitar sonreír, me que dé un tiempo sentado mientras veía como el auto se alejaba. De pronto mi teléfono sonó, lo tomé y conteste sin mirar la pantalla.
-¡Hermano!, dinos cual de las dos es mi cuñada, ¿es la que salio del carro? dime que no es ella.-
-¿Donde estas?, ¡Joseph te dije que no me siguieras!.- Dije enojado mientras colgaba y veía la calle tratando de buscar el carro de mi hermano, cuando por fin lo encontré, el carro avanzó y se colocó a un lado, vi como bajaron la ventanilla del auto y pude ver a mi hermano con Sebastian sonriéndome.
-Vamos a tu casa, allá nos dices quien es mi cuñada.- Dijo mi hermano quien rápidamente subió la ventanilla y se fueron.
Avancé detrás de ellos, al parecer no iba a poder descansar, esa noche fui interrogado como si yo fuera un criminal.