- Me impresiona, es bastante joven y ya tiene un doctorado en literatura, también tiene dos maestrías en guionismo y publicidad. En el extranjero es catalogado como Genio, y ya se hizo fama en el país cuando era joven, en Crystal City era el mayor talento jamás presentado por la ciudad.
- Si, hace algunos años había noticias sobre su inusual intelecto pero por alguna razón esas noticias fueron suprimidas...
- Es probable que haya sido por sus órdenes, Manuel dijo que se veía dudoso cuando le entrego la invitación, es posible que no le guste salir en cámara o que lo reconozcan públicamente.
- Es lo que más encaja. Dime... ¿te diste cuenta de que se parece a Mateo Flórez?
- ¿A qué te refieres?
Sebastián tomó su teléfono y buscó dos fotografías, una de Mateo Flórez y la otra de Miguel Botero, se las mostró a su esposa mientras decía:
- No me habría dado cuenta si Renata no lo hubiera señalado cuando se despedía, no entiendo como no lo notamos antes.
- ¿Hablas en serio? ¡No sólo es parecido! ¡Es su viva imagen! ¡Su retrato viviente!... ¿Qué está ocurriendo?
Ana miró desconcertada a su esposo, su rostro palideció un poco y sus ojos tenían un extraño brillo de confusión, con su voz más tensa que nunca dijo:
- Creí que Miguel Flórez había muerto hace siete años, ¿cómo es que... ?
- ¿Tú crees que... él es Miguel Flórez?
- ¿Quién más se iba a parecer tanto a Mateo Flórez si no es su propio primo? ¡Mira la foto! Son idénticos, si no fuera por su carácter, Miguel Botero podría fácilmente hacerse pasar por Mateo Flórez...
- Haré que lo investiguen, una prueba de ADN puede confirmar o negar tus sospechas.
- ¿Cómo obtendrás la muestra para la prueba?
- Deja que Manuel y yo nos encarguemos de eso. Hablaré con él cuando vuelva a casa, llegaremos al fondo de esto.
- Bien, espero sea rápido.
- Maestro, Madam, la cena está lista - interrumpió una mucama con la cabeza agachada.
Los dos esposos cenaron tranquilamente mientras esperaban el regreso de Manuel.
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Mientras tanto en casa de Marta.
Carol y Marta cenaban tranquilamente mientras Carol interrogaba a su hermana.
- Déjame ver si entendí bien... ¿Entonces fuiste a la casa?
- Si.
- ¿Revisaste en el sótano?
- Ajá.
- ¿Y encontraste un sobre con una investigación sobre la muerte de Miguel Flórez?
- Así es.
- La investigación decía que probablemente él, una mucama y su hija, que se habían reportados como muertos hace siete años, siguen vivos, ¿es así?
- Si.
- Entiendo, pero... ¡¡En qué estabas pensando cuando manejabas a toda velocidad!! ¡Pudiste haberte hecho mucho daño! ¡¿Acaso eres idiota?!
- Tranquila, estoy bien.
- ¡Estas bien gracias a Miguel Botero! No puedo ni imaginarme el escándalo que se armaría en la familia si te sucediera algo otra vez.
- ¿Carol... ?
- ¡Qué!
- Yo... yo sentí algo diferente cuando estuve con él...
La expresión de Carol cambio en un instante, de preocupación e irritación a confusión y desconcierto, respirando profundamente para calmarse espero que su hermana continuará.
- ... No sé qué fue... tampoco sé cómo describirlo... simplemente me sentí segura en su presencia y... cuando me reprendió, yo... yo no me enoje... me sentí culpable por ser la razón de su expresión oscura... Carol ¿Voy a estar bien?
- Estarás bien, sólo necesitas aclarar tus emociones, cuando estés lista, sabrás que hacer.
- Es que nunca me había sentido así... la última vez que me sentí así fue hace más de siete años.
- Lo sé, pero estoy segura de que estarás bien, confía en mí, ¿esta bien?
- Está bien. Gracias, hermanita.
- De nada.
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Después de cenar en casa de Johana, Manuel se dirigía en su auto a la mansión Narváez, tenía una inusual sonrisa satisfecha en su rostro generalmente indiferente, estaba de un humor excelente y no podía ocultarlo, había disfrutado mucho su cita con Lorena y esperaba con ansias la siguiente. Cuando estacionó el auto en el garaje subterráneo y bajo de él, un guardaespaldas vestido de negro se acercó a él para decirle:
- Joven Maestro, hemos estado buscándolo desde hace un tiempo.
- ¿Ah sí? ¿Por qué? - preguntó Manuel volviendo a poner su expresión indiferente y fría.
- El Maestro y Madam desean que se presente ante ellos de inmediato.
Manuel se dirigió rápidamente al estudio de su padre sin dirigirle otra mirada al guardaespaldas. Cuando llegó al estudio y tocó la puerta, escuchó la indiferente voz de su padre:
- Adelante.
Después de recibir el permiso Manuel entró a la habitación, allí se encontraba su padre sentado frente a la biblioteca de la habitación.
- Padre.
Sebastián levantó la mirada hacia su hijo y sonrió.
- Manuel, acércate, necesito hablar algo importante contigo.
Manuel se acercó y se sentó frente a su padre, después de acomodarse bien en la silla, dijo:
- ¿Qué quieres discutir?
- Necesito que compruebes si Miguel Botero tiene algo que ver con Mateo Flórez.
Manuel levantó una ceja y sonrió para responder:
- ¿Sabes, Padre? No eres el primero que me pide ayuda en eso.
- ¿A qué te refieres?
- Ayer Miguel Botero me pidió lo mismo, de hecho la prueba de ADN se le realizará mañana, la realizará la Doctora Viviana Herrera.
- ¿Quieres decir que... Miguel Botero tiene la misma sospecha que nosotros?
- No, no la tiene, él sabe que es la verdad y solo necesita una confirmación de su intuición.
Sebastián miró a Manuel con sorpresa, no sabía que pensar sobre este tema, la idea de que Miguel Botero en realidad fuera Miguel Flórez confundió sus pensamientos.