—¿Qué tiene de malo lo que leo ahora? —An Xiaxia sacó su pechito con orgullo—. ¡Todo es sobre amor!
"…"
—¿Crees que Li Fanxing le partió la cabeza? —Sheng Yize cambió de tema.
—No, no puede ser... ¿Siquiera es lo suficientemente rápida como para pegarle?
—¿Entonces tú crees ser lo suficientemente rápida para pegarme? —replicó.
¡Claro que no! Era inútil para pelear y él era un guerrero. ¡No tendría oportunidad! Ella sacudió la cabeza, sin dudarlo.
—Pero si de verdad quisieras pegarme —sonrió y la miró de forma pensativa—, es probable que tengas éxito porque puedes pillarme desprevenido fácilmente.
—Ya veo... —de pronto se dio cuenta—. Estás diciendo que Qi Yanxi no tomó precauciones contra Li Fanxing, ¿cierto? ¿Entonces todavía le gusta?
—No es necesario que haya una conexión entre ser distraído y que le guste... —respondió después de un rato. Se había quedado sin palabras.