Mo Xiaomeng no notó el cambio oscuro en sus ojos, sin mencionar cuán cerca estaba su alto cuerpo de ella, tanto que su olor varonil la había estado envolviendo.
Su foco estaba en los enemigos. Mientras se asomaba por el espacio entre la caja de madera y el tronco del árbol, le dijo: —¡Se están acercando!
Song Shijun estaba más cerca de Mu Xiaoxiao y preguntó con curiosidad: —Xiaoxiao, ¿por qué Xiaomeng es tan precisa? ¡Parece que es incluso mejor que tú!
Mu Xiaoxiao le torció los ojos.
¿Se acercaban los enemigos y todavía tenía tiempo para esto?
Pensó por un momento y respondió de manera superficial: —Jugó más de estos juegos, así que tiene más experiencia.
No podía simplemente decirle que Mo Xiaomeng había jugado con más armas que las balas que había disparado, ¿verdad? Además, con las que jugaba Mo Xiaomeng eran armas reales, a diferencia de estas balas de pólvora que ni siquiera causarían dolor al impacto.
