"¿Qué estás haciendo?" preguntó con voz suave.
El niño levantó la cabeza. Su hermoso rostro parecía felizmente sorprendido cuando preguntó: "Xiaoxiao, ¿cómo supiste que estaba aquí?"
"¡Jeje, lo adiviné! ¿Qué estás haciendo?" La niña estiró el cuello y miró lo que estaba frente a él. Sin embargo, no había nada allí más que hierba.
¿Podría estar arrancando la hierba?
Pero, ¿qué tenía de divertido el césped?
La niña parpadeó sin comprender con sus grandes ojos.
La mirada del niño era misteriosa. "No puedo decirte eso. Te lo daré una vez que lo encuentre".
Los ojos de la chica se iluminaron. "¡Eh! ¿Me lo vas a regalar?"
El niño se dio cuenta de que se había expuesto. "Aiyoh, ¿puedes fingir que no lo sabes? Hablaremos de eso después de que lo encuentre".
"¡No! ¿Qué es? Ya que me lo vas a dar, solo dímelo". La curiosidad de la niña se despertó. Sus lindos bracitos se envolvieron alrededor de los suyos y lo sacudieron lindamente.