Cuando Xiang Jinxi escuchó a Lance decir que los hombres de la Seguridad del Estado se habían ido, se sintió aliviado al instante. Una sonrisa cansada se dibujó en su rostro.
Luego, Qiu Jin se sentó a su lado y lo observó en silencio durante algún tiempo.
Finalmente, habló con voz amarga: "Me voy mañana".
Los ojos de Xiang Jinxi se abrieron y él la miró con una expresión ilegible.
"¿Para tu boda?"
"Sí."
Qiu Jin apoyó la cabeza en su hombro. Sus pestañas temblaron mientras parpadeaba angustiada.
"La boda es dentro de un mes. Padre me pide que regrese y haga los preparativos".
De hecho, su familia no planeó dejarla seguir a Xiang Jinxi al País Z en primer lugar, pero logró convencer a su padre para que la dejara quedarse a su lado por otro mes...
"Pronto terminará."
Xiang Jinxi dudó por un largo momento antes de acariciarle suavemente la cabeza.
