Wang Zheng tuvo el repentino deseo de entrenar, por lo que ingresó a una sala de entrenamiento y, después de seleccionar el Dios de la Guerra No. 1, comenzó su sesión de entrenamiento.
El enfoque requerido le ayudaría a olvidarse de sus problemas.
Todos esperaban ansiosos mientras seguían observando la situación. En ese punto, Esqueleto había entrado en la zona de entrenamiento. La zona de entrenamiento se creaba especialmente para principiantes, por lo que apenas proporcionaba valor para los jugadores más experimentados.
—De ninguna manera, ¿qué está haciendo Esqueleto en la sala de entrenamiento? ¿Cómo puede obtener algún beneficio de ello?
—La sala de entrenamiento solo te permite entender mejor a las máquinas y sus equipos. No hay nada de difícil en eso.
—No tengo idea. Realmente quiero saber qué está haciendo allí. Lástima que esté ahí.
