De pronto, He Haotian decidió poner a prueba sus sospechas. Necesitaba saber lo sensible que era la lengua de Lu Xinyi.
—Meina, ¿crees que puedas servirnos un poco de la sopa de calabaza que hiciste antes? —le preguntó. Ella le devolvió la sonrisa, al tanto de lo que estaba planeando.
—Por supuesto —respondió antes de mirar a sus visitas—. Madame Shen, señorita Mo, ¿gustan probar mi sopa de calabaza? Es la primera vez que intento cocinar para Anyang, pero no estoy segura de haberlo hecho bien.
He Haotian había probado la sopa antes. Al utilizar la misma sopa, quería saber si Lu Xinyi tenía la misma "lengua prodigiosa" que Lu Sibai.
—Claro. Si podemos ayudar, ¿por qué no? —asintió Mo Lihui ligeramente. Tomar una buena sopa de calabaza en un clima tan frío ya era suficientemente grato.
Cuando Gu Mo Lihui regresó, sirvió tres tazones caliente de sopa de calabaza en la mesa. Dejaron que Lu Xinyi y Mo Lihui la probaran y esperaron sus opiniones.