«Clanc».
La lujosa copa de vino se rompió al estrellarse contra el suelo, salpicando vino de Borgoña sobre la costosa alfombra. El pálido presidente fijó su mirada en el visitante que estaba frente a él. Su par de manos viejas temblaban sin control.
—¿Q-qué dijiste? ¡Dilo de nuevo!
—Sí… Sí, presidente. Recibimos noticias de que el Partido del Rey ha bloqueado todo el Estrecho de Luz y ha impedido la entrada a todos los barcos. Además, han prohibido la pesca y obligado a los pescadores a regresar a los puertos.