Este viejo amigo suyo nunca fue tímido a la hora de darle órdenes.
Como venganza, eligió los títulos más difíciles que pudo encontrar...
Junting temía que Xia Zhi no pudiera entender estos libros, pero el mismo Xia Zhi
mencionó específicamente que necesitaba los títulos más difíciles que él tuviera.
Junting se sorprendió de que Xia Zhi hubiera mejorado tanto en tan poco tiempo.
No tenía idea de que los estaba tomando prestados para otra persona.
—Escuchaste la conversación que tuve con él, ¿verdad? Los libros son para esa
amiga suya —le dijo Junting a Mubai.
Mubai asintió y respondió: —¿La persona que mencionaste que tiene la habilidad
de codificación perfecta?
—De hecho. Fue solo para un mini-juego, pero se podía ver la capacidad del
programador. Tú mismo lo has visto, ¿no es uno de los mejores trabajos que has
visto?
—Tienes razón, pero solo son unas cuantas líneas de códigos. Puede que estés
sobreestimando al programador, hay mucho más en la programación que la
escritura de códigos —dijo Mubai—. En cualquier caso, dejaré la actualización del
sistema de seguridad en tus manos. Termínalo antes de la Competencia de
Piratas Informáticos.
—No te preocupes, esa es nuestra especialidad. Trabajaré horas extras para
garantizar que el sistema se actualice antes de la competencia —dijo Junting con
seriedad. Mubai asintió antes de irse.
Junting se apresuró a volver al trabajo.
El previó muchas noches de insomnio en el futuro, porque a pesar de que una
actualización del sistema parecía simple en papeles, en realidad era bastante
complicada.
Esto se debía a que el nuevo sistema se había desarrollado con el objetivo de
resistir ataques de piratería informática deliberados.
Ese era el quid de la Competencia de Piratas Informáticos, y él había escuchado
que los piratas involucrados este año eran mejores que los de años anteriores.
La competencia en el negocio en línea se había vuelto cada vez más severa en
años recientes.
Todas las compañías hacían todo lo posible por ofrecer el mejor software de
defensa, porque el fracaso podría significar el comienzo de la desaparición de una
empresa.
Junting tenía que asegurarse de ayudar a la compañía de Mubai a sobrevivir hasta
el final de la Competencia de Piratas Informáticos, para preservar el nombre de su
compañía.
Después de todo, la compañía era una empresa conjunta entre la familia Tang y la
familia Xi.
Xinghe estaba satisfecha con los libros que Xia Zhi trajo con él.
Sin embargo, ella igual se las arregló para terminarlos en un abrir y cerrar de
ojos...
Xia Zhi se había acostumbrado a la habilidad inhumana de su hermana, por lo que
ya no estaba sorprendido.
Sin embargo, la persona que más se sorprendió fue Junting, preguntó: —¿Ya los
terminó todos? —Junting se sorprendió cuando Xia Zhi le devolvió los libros.
—Me temo que sí, dijo que los libros estaban bien pero se pregunta... ¿si tiene
algo más difícil? —Xia Zhi terminó su pregunta casi en un susurro, porque él
mismo pensó que su hermana estaba siendo demasiado.
Incluso comenzó a sospechar si su hermana todavía era humana.
¿Cómo podía haber tal diferencia en talento entre ambos, cuando ambos
compartían la misma sangre de la Familia Xia?
Él debe ser adoptado.
La pregunta absurda sorprendió a Junting con la guardia baja. Ya era una locura
que los libros hubieran sido terminados en un día, y encima, la persona todavía
pidiera algo más difícil
¡Esos libros ya eran los más difíciles que él tenía!
Esta amiga de Xia Zhi parecía ser más formidable de lo que inicialmente creyó.
Junting enderezó su rostro y puso sus brazos alrededor de Xia Zhi, y agregó:
—Alumno, no te escondas de tu superior. Dime quién es esta amiga tuya. Debes
presentármela.
—Superior, no es que no quiera hacerlo, pero ella no quiere revelar su identidad
en este momento. Prometo que en el momento en que ella sienta lo contrario,
usted será el primera en saberlo —dijo Xia Zhi.
Los genios tendían a tener sus excentricidades; Junting lo entendía hasta ahí.
No forzó a Xia Zhi a revelar más, pero lo ayudó tanto como pudo con encontrar
más libros. Antes de que Xia Zhi se fuera, dijo: —Xia Zhi, seré franco. Si tu amiga
necesita un trabajo, dile que venga a mí. Tendré un buen puesto esperándola.
Xia Zhi estaba muy feliz. Él asintió con seriedad y exclamó: —¡Gracias, me
aseguraré de decírselo!
Xia Zhi se apresuró a regresar al hospital, ansioso por contarle a Xinghe las
buenas noticias.