—¿Esta es la razón por la que me pediste que nos reuniéramos? —preguntó Mubai.
—Sí, espero que puedas cumplir mi deseo, porque Lin Lin es todo para mí—suplicó Xinghe sinceramente.
Añadió: —Tú puedes poner el precio que quieras, mientras me prometas darme la custodia de Lin Lin.
—¿Cualquier precio?
Xinghe asintió.
—Sí. Puedo crear más software para tu compañía e incrementar tus ganancias.
—Xia Xinghe…—dijo lentamente Mubai, sin enojo.
Explicó: —Lin Lin ha estado a mi lado desde que era pequeño, ¿no crees que estás pidiendo mucho al pretender que me lo quiten así como así?
—Entiendo que mi demanda es poco razonable, pero tú tendrás más hijos después de que te cases con Tianxin. Lin Lin es mi único hijo y espero que él también tenga atención completa a cambio.
Mubai respondió con desdén: —Si él te importa tanto, ¿por qué elegiste divorciaste muchos años atrás?