Luego esa tarde.
La grabación estaba por comenzar.
Entre bastidores, los concursantes comenzaron a sortear para decidir el orden de sus apariciones y oponentes en la primera ronda. Aquí había dos cantantes enmascarados de reemplazo, cuyos nombres y fuerza se desconocían. Como tal, todos le dieron mucha importancia a este sorteo debido a que sus resultados se vieron afectados por quién era su oponente y en qué orden aparecerían en el escenario. Esto estaba en relación directa con si aún podrían permanecer en este escenario o si avanzarían más.
En la sala de espera del Payaso.
La puerta se abrio.
Entraron Han Qi y parte del personal del equipo del programa.
"Maestro, es tu turno", dijo Han Qi con nerviosismo. Esperaba que El Payaso sacara un buen lote, siendo el mejor el número seis y significaría que sería el último en cantar.
El Payaso metió la mano en la caja.
La cámara lo enfocó de inmediato.