Chereads / La época del crepúsculo / Chapter 19 - Capítulo 19 — Asesinato

Chapter 19 - Capítulo 19 — Asesinato

Algunos se acercaron, liderados por un joven que parecía tener cerca de 24 años. Parecía temerario, pero tenía un arma en la cintura. Sostenía un barrote de hierro en una mano y cada tanto, lo golpeaba contra la palma de la otra. Al acercarse a ellos, dijo arrogante:

—Eres es muy valiente, ¿eh? Ni siquiera intentaste correr cuando nos viste venir, ¡pensé que tendría perseguirte!

—Jefe, no necesitas decir idioteces.

—¡Tú! ¡Deja tu arma y tu billetera aquí! ¡La chica debe quedarse! Una mujer tan hermosa…¡debe ser buena! ¡Parece que vamos a estar ocupados esta noche! —Dijo otro pandillero mientras miraba a Zhao Yali y babeaba.

El rostro de Zhao Yali se puso ligeramente pálido. Preguntó a Luo Yuan:

—¿Deberíamos llamar a la policía?

—¿La policía? ¿Estás bromeando?

—Es el fin del mundo, ¿a quién le importa? Si no nos creen, pueden llamar —varios pandilleros se rieron.

—¿La policía ya no está trabajando? —Aunque Luo Yuan no entendía su dialecto, podía entender la idea de lo que decían.

—No puedo parar de reír, hombre, hay tanta gente muriendo todos los días y ¿crees que la policía no tiene nada mejor que hacer? Nadie va a investigar, incluso si te mato ahora. Si no quieres irte y quieres ser el héroe, ¿no te arrepentirás? —El líder de la pandilla se rió como loco, pero se sintió algo incómodo. Se calmó una vez que recordó el arma que llevaba en la cintura.

Viendo las acciones ilegales de estas personas, parecía que estaban diciendo la verdad. 

—¿Significa que también estará bien si te mato? —preguntó Luo Yuan en voz baja.

Los pandilleros no tuvo miedo y no retrocedieron ni un centímetro. El líder de la pandilla alcanzó la pistola en la cintura, pero Luo Yuan ya la había notado desde hace mucho y definitivamente no iba a darle la oportunidad de usarla. 

Se acomodó y se propulsó hacia adelante. Su cuerpo se movió como una flecha, sacó su espada antes de que alguien pudiera responder.

Su larga espada se deslizó fácilmente fuera de su vaina y rápidamente cortó la mano derecha del oponente que sostenía el arma. La mano cayó al suelo y el líder de la pandilla soltó un grito lúgubre.

Algunos pandilleros parecían horrorizados. Las cosas sucedieron demasiado rápido y ya no sabían si debían permanecer o retirarse.

Luo Yuan quitó la pistola de la mano desprendida. Sin el arma, estos matones no eran ningún desafío para él.

—¡Mátenlo, mátenlo! —Ordenó el líder de la pandilla mientras se agarraba el brazo lesionado y lloraba histérico. Estaba totalmente iracundo con Luo Yuan. Varios pandilleros vacilaron al ver que el oponente era más fuerte de lo habitual y ahora tenían mucho miedo.

Luo Yuan dudó si matar al líder o no al ver la ira en los ojos del joven.

Su ética moral y la preocupación de ser arrestado retrasaron su decisión. Sin embargo, Zhao Yali estaría en problemas si no lo mataba ahora. Ella se quedaría ahí mientras él se marcharía a su casa.

—Yali, por favor, cierra los ojos —dijo Luo Yuan repentinamente.

El líder de los pandilleros pareció presentir que algo iba mal y trató de retroceder. Gritó a sus seguidores:

—¡Acábenlo, idiotas! ¿Creen que los dejará ir?

—¡Cállate! —Luo Yuan gritó al pésimo líder y caminó hacia él. Levantó su espada y le cortó el cuello. El pobre líder abrió grandes los ojos y presionó la mano que le quedaba en su cuello, tratando de impedir que la sangre saliera. Quiso decir algo, pero ya no podía hablar y su cuerpo cayó lentamente en un charco de sangre.

Algo se estimuló en la mente de Luo Yuan mientras miraba caer al pobre líder. Miró a los otros pandilleros con ojos asesinos. Se preguntó si debía matarlos a todos para evitar problemas innecesarios en el futuro, ya había matado a uno de todos modos.

Todos eran agresores y habían hecho muchas cosas malas, Luo Yuan no tenía que sentirse culpable aunque los matara a todos. Derrotar a los malvados era una buena acción. Se tomó un momento para convencerse y muy pronto no dudó más.

Los agresores presintieron que algo andaba mal y trataron de escapar, lamentablemente, ya era demasiado tarde. Luo Yuan actuó muy rápido y su espada cortó a través de los cuellos de los matones, su cabeza voló por el aire y cayó al suelo. Luo Yuan dio unos cuantos saltos para llegar a otro matón, apuñaló su cuello con su hoja y la hizo salir por el otro lado.

¡Cortar, picar, apuñalar y rebanar! Ninguno de los pandilleros fue capaz de escapar. Luo Yuan logró matarlos a todos con sus 12 puntos de destreza.

La mayoría de los pandilleros intentaron escapar, pero al final todos fueron asesinados. Sólo tardó unos 20 segundos en matarlos. Sacudió su cuchillo tratando de quitar la sangre de la hoja y luego la devolvió a la vaina.

Mientras los mataba, Luo Yuan estaba lleno de emoción, sin embargo, ahora todo lo que sentía era miedo y arrepentimiento. ¿Y si la policía lo encontraba? Se volvió y vio a Zhao Yali sentada en el suelo, estaba asustada.

Rápidamente se acercó corriendo y preguntó:

—¿Estás bien? Te dije que cerraras los ojos, ¿por qué no me escuchaste?

—¡Asesino! ¡Mataste a esa gente! —dijo Zhao Yali para sí, sin mirar a Luo Yuan.

—No te preocupes, son sólo unos cuantos matones. ¡Debemos irnos ahora, estaremos en problemas si alguien nos ve! —le dijo, e inmediatamente se dio cuenta de que había dicho algo incorrecto, pero era demasiado tarde para arrepentirse.

Su preocupación era por las consecuencias del asesinato y no por haber matado. Sentía que matar a la gente era casi lo mismo que matar a esas ratas mutantes. Por un momento se preguntó desde cuándo era así, antes nunca se había atrevido a pelear con nadie y ahora estaba bien con matar.

—¡Sí, tienes razón, deberíamos irnos! —Zhao Yali respondió de inmediato. Pero cuando estaba a punto de levantarse del suelo, se sintió entumecida y dijo —: ¿Podrías ayudarme?, mis piernas están entumecidas.

Luo Yuan naturalmente miró sus muslos y notó que la postura en la que estaba sentada era incómoda. Su vestido había subido accidentalmente, exponiendo sus hermosas nalgas. Luo Yuan acababa de pasar por una serie de peleas y todavía estaba excitado. Se volvió más valiente y naturalmente tocó sus nalgas sin resistirse a una visión tan seductora.

—¿Qué diablos estás haciendo? —gritó Zhao Yali, sorprendida cuando Luo Yuan la agarró por el trasero.

Luego la levantó del suelo.

—Idiota, ¡tienes la cabeza llena de porno! —Zhao Yali lo regañó locamente. Se levantó del suelo y apartó la mano de Luo Yuan.

—¿Por qué no tenías ropa interior? ¡Es normal que un hombre sano reaccione de esta manera! —Explicó inocentemente. Se preguntaba por qué las mujeres eran tan extrañas, anoche estaba desesperada, pero hoy era totalmente diferente y ni siquiera le permitió tocarla.

El rostro de Zhao Yali se sonrojó y dijo:

—¡No deberías hacer eso, aunque no esté usando ropa interior! ¡No eres mi novio! —Luo Yuan permaneció en silencio. Zhao Yali se puso más furiosa y le dio una patada en la pierna. Luego se alejó muy enojada y dijo —: ¡Me voy! ¡Deberías irte a casa!

Frenó cuando al ver los cadáveres.

—Todavía hay un largo camino por recorrer y podrías estar en peligro, voy quedar preocupado si te vas sola —dijo Luo Yuan.

—¡Déjame en paz! ¡Incluso si llegas hasta mi casa, aún te voy a echar! —Zhao Yali amenazó.

—¿Realmente necesitas hacer esto?, solo estoy tratando de ayudarte —Luo Yuan suspiró y luego añadió enojado —. Bien, me iré a casa. Ya que estás tan enojada y no quieres verme, me iré. ¡No debería haber venido en primer lugar! —Se dio la vuelta y se alejó sin mirar atrás.

Zhao Yali se volvió y vio a Luo Yuan alejándose, inmediatamente se sintió deprimida. Esperó un rato, pero él seguía alejándose. Segura de que no volvería, se agachó y comenzó a llorar las lágrimas que había retenido durante mucho tiempo.

Le estaba comenzando a tener dificultades para respirar cuando escuchó:

—¿No eres un adulto? ¿Todavía llorando?

Ella lloró aún más fuerte al escuchar su voz y gritó:

—¡No me molestes! ¿Por qué no te fuiste a casa? ¿Por qué volviste?

—Estaba bromeando, querida, y recordé había un arma por aquí, vine a buscarla —explicó Luo Yuan. No la dejaría ir a casa sola, aunque no tuviera una misión que completar.

Zhao Yali dejó de llorar y rápidamente se levantó del suelo:

—¿Estás loco, por qué tomaste el arma?, ¡tírala!, podríamos ser arrestados si la policía se entera.

Luo Yuan se sintió tocado y dijo:

—La pistola es para ti, podrías necesitarla en el futuro. Y no te preocupes por la policía, están demasiado ocupados para cosas tan pequeñas… Si hasta los matones pueden conseguir una pistola, debe haber más gente armada ahí afuera. Si la tienes con cuidado deberías estar bien.

Pero Zhao Yali la rechazó ansiosa:

—¿Por qué la necesitaría? ¡Es peligrosa y mis padres podrían asustarse!

—El mundo es caótico en este momento y será peor más adelante. ¿Quién sabe lo que pasará mañana? Será más seguro si tienes una pistola para protegerte. Incluso si te encuentras con matones en el futuro, podrás ahuyentarlos con un arma.

Zhao Yali cambió de opinión al recordar todas las experiencias horribles y aterradoras que había vivido recientemente. Ya no tenía miedo del arma. 

—Pero no sé cómo disparar —dijo suavemente.

—Aprendí de un policía una vez, te enseñaré más tarde —le dijo Luo Yuan con una sonrisa.

Zhao Yali se enloqueció al ver sonreír a Luo Yuan. 

—Ni siquiera se te ocurra pensar que te perdonaré. ¡Lo de anoche fue un error! Si me tocas de nuevo, yo… Yo…—No podía pensar en una palabra lo suficientemente fuerte como para amenazarlo.

El olor de la sangre comenzó a atraer muchos animales mutantes, había también algunas sombras oscuras en el cielo, era obvio que pronto vendrían más. En cierto modo era bueno porque reducía las posibilidades que arrestaran a Luo Yuan.

Miró a su alrededor. 

—Bien, muy bien, este lugar ya no es seguro, debemos marcharnos ahora —agarró su mano y corrió.