¡Tu-tum! ¡Tu-tum!
El corazón del Taotie latía ferozmente, emitiendo ondas de energía. Las personas no pudieron evitar ser cautivadas ante la escena de este corazón palpitante.
El corazón tenía un tono escarlata, cubierto con una capa de abultadas y amenazantes venas. Poseía seis agujeros, y desde cada uno brotaba una aterradora energía. Las personas no pudieron evitar estremecerse.
Bu Fang tomó el corazón del Taotie con una mano mientras lo estudiaba impávido. La mano con la que sostenía el corazón era la que estaba cubierta con patrones blancos y negros, y una energía igual de extraña brotaba de esta.
Para salvar a Chu Changsheng, usar ingredientes y métodos ordinarios estaban fuera de discusión. Solo el corazón del Taotie era adecuado para esta desalentadora tarea. Por supuesto, si Bu Fang tuviera un ingrediente mejor que el corazón del Taotie, él intentaría cocinarlo y probarlo al menos una vez.