La repentina aparición de rayos fue inesperada. Incluso el Rey del Inframundo fue totalmente tomado por sorpresa. Aquellos rayos tenían un débil brillo violeta mientras caían majestuosamente. Incluso el aire debajo de ellos fue casi destruido; uno podía ver lo poderoso que eran los rayos.
El Rey del Inframundo nunca hubiera imaginado que un rayo de este nivel lo golpearía en este pequeño restaurante.
En ese momento, el corazón del Rey del Inframundo dio un vuelco. Su cuerpo se movió por instinto. Una oleada de energía oscura brotó al intentar evitar que el rayo lo golpeara.