—¿Este es el premio por obtener el primer lugar? —Bu Fang preguntó desconcertado. Observó inexpresivamente mientras Ji Chengxue colocaba solemnemente una semilla del tamaño de un maní en su mano.
«¿No es esto solo un maní?», pensó Bu Fang mientras soportaba las ganas de abofetear el hermoso rostro de Ji Chengxue con una suela de zapato.
Luego de trabajar duro casi todo el día, no anticipaba recibir solo una semilla parecida a un maní. Estaba sin palabras.
Mirando a la semilla totalmente negra, parecía estar algo vieja y en mal estado. Su superficie estaba cubierta con finas marcas inusuales que parecían una enigmática formación mágica… Sin embargo, ¡seguía siendo solo una semilla!