—¡¿Qué dijiste?! ¡¿Emperador Dragón?!
Los ojos de Degulish se congelaron y tragó un bocado de saliva. Su pecho también se apretó como si acabara de ser golpeado.
Hacía veinte minutos, los espías abandonados en el Planeta Aguamarina habían enviado un informe de emergencia. El oficial de inteligencia buscó apresuradamente al actual comandante de la organización, Degulish, y le informó sobre este asunto con una expresión de terror.
¡Ames había aparecido en el Planeta Aguamarina!
Los altos mandos de Estrella Oscura estaban conmocionados.
«El Emperador Dragón siempre ha estado en terrenos neutrales. Para que ella aparezca de repente en el Sistema Estelar Garton, ¿significa que quiere entrar en la refriega? No, esto no es probable. Es más probable que fuese Estrella Negra, ese bastardo, quien llamase a Ames. Pero ¿por qué el Planeta Aguamarina...?».
Después de pensar mucho en el asunto, Degulish todavía no podía entender las intenciones de Ames.
