La armadura retráctil controlada magnéticamente estaba lista para ser activada. Han Xiao tenía que pelear o escapar.
Sin embargo, el monstruo simplemente estaba mirando en dirección a la puerta. Era como si el monstruo no hubiera notado la existencia de Han Xiao. Estaba allí de pie sin moverse.
«¿Ceguera nocturna?».
Han Xiao sintió un poco de euforia en su corazón. Por suerte, no encendió su linterna, de lo contrario, habría sufrido el destino de los peregrinos antes que él.
Con una estatura de tres metros de pie, el monstruo tenía forma humana, y se podían ver capas de músculos en su cuerpo. Los músculos se apilaban como pequeñas colinas. Sin embargo, el cuerpo musculoso no se veía estéticamente agradable. Al contrario, los músculos alargados espantaban a las personas. Los músculos también se estaban pudriendo. Incluso había agujeros en ciertas áreas, y se podían ver gusanos gruesos arrastrándose alrededor de la carne podrida.
