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Después de colgar, Bo Jiu saltó a un taxi.
—Señor, me dirijo al Bar Noche Blanca ubicado al lado de la universidad A.
A esta hora, había cada vez más autos en la calle y por lo tanto el auto no iba rápido. No entendía por qué el Todopoderoso había llamado a Lin Feng, pero sólo ese ingenuo muchacho le pasaría la tarea de recoger al Todopoderoso.
Cuando Bo Jiu se bajó del auto, ella estaba preparada para enfrentar su hostilidad. Fue directo al bar después de salir de la casa club, eso fue suficiente para mostrar lo molesto que estaba. Había actuado de la misma manera cuando eran más jóvenes.
Siempre que estaba molesto, rechazaba a cualquiera que expresara su preocupación, sin importar que ella lo persuadiera. Era, en efecto, un problemático diablillo. En ese entonces, ella había sido desvergonzada. Ahora mismo, parecía que seguía siendo tan desvergonzada como antes.