Él tenía más que decir, pero esta vez, en el momento que abrió su boca, ¡sus rodillas se derrumbaron de una patada entrante!
Fue una patada cruel con una fuerza intensa.
Con esa patada, fue sacado de los terrenos de la competencia.
El pasaje de seguridad con paredes en forma de anillo.
Su espalda se estrelló contra la pared, y el dolor nublaba sus sentidos.
Él levantó la cabeza, esperando gritarle al atacante, pero su quijada se apretó.
El rostro apuesto frente a él se magnificó y un escalofrío viajó por su cuerpo, y sus dedos se agitaron.
La expresión de Qin Mo no se podía ver, su cuerpo estaba agachado, solo su perfil se podía ver conforme susurraba en el oído del revoltoso. —Violación y perturbación, ¿realmente piensas que puedes salir ileso?
Feng Yi quería agarrarle el cabello.
—Todopoderoso Qin, Joven Señor Qin.