—¡Demonios, él es tan genial! ¿Cómo puede ser tan genial? ¿De dónde conoce el señor Yun a semejante persona?
—Cálmate, vamos a armar un grupo para preguntar por el WeChat de él.
—¡Mi nariz va a empezar a sangrar!
Mientras que los vítores se disparaban, los pocos estudiantes de deportes tensaron los puños, el capitán de ellos, en particular, estaba afectado.
—¡Cuídense de ese chico! ¡Bloquéenlo!
Con semejante plan hecho, a Fu Jiu lo bloquearon cuatro de ellos.
—¡Veamos cómo vas a jugar ahora!
La mirada de la persona se volvió de un tono rojo aterrador, el cual parecía casi asesino.
Pero, en ese momento, el joven dio un paso para atrás de forma abrupta. Al momento en el que los dos pies estaban en el piso, la mano roja se curvó hacia arriba de forma hermosa.
¡Shua!
¡Una perfecta canasta de tres puntos!
La multitud de verdad estaba aturdida.
—¡Una francotirador realmente!