—Tú… Tú…
Liu Zongming estaba de verdad asustado esta vez. La manera en la que Fu Jiu lo miraba en ese momento le recordó a la mirada de un delgado reptil que acechaba en la oscuridad, y las palabras de Fu Jiu eran muy aterradoras para pensar. ¿Podía ser que incluso si Fu Jiu lo golpeaba hasta matarlo, no lo iban a hacer responsable a él?
¿Él es todavía un chico de secundaria?
Ellos siempre golpeaban a la gente cuando ellos querían.
Así que cuando él golpea a alguien, ¿él destruye toda la evidencia?
Liu Zongming pensó en eso y no se sintió ni un poco mejor. Más bien, un sudor frío le cayó por la parte de atrás del cuello poco a poco.
Él finalmente notó que nadie iba a pasar por ahí, ¡lo que significaba que nadie lo iba a salvar!
Fu Jiu todavía tenía una media sonrisa en el rostro y las largas piernas bloqueaban la única salida de Liu Zongming. Esos apuestos y astutos ojos hacían que la gente se sintiera extra presionada.