Las cosas deberían parar ahí.
COCO dudó por un bastante largo momento, luego, le dijo a Qin Mo en voz baja: —La gente del equipo Kali siempre habló bien de nosotros, capitán. Eso de la última vez, solo olvídalo...
Qin Mo no contestó y solo lo miró.
Esa mirada hizo que COCO entendiera que, sobre ese tema, no había nada más que meditar.
El equipo Kali pensaba preguntarle a la gente de la Alianza suprema acerca de ir a cenar juntos porque querían darle una apropiada bienvenida.
Después de todo, el hecho de que la Alianza suprema le ganara a Río de Cerezo, soltó el odio de ellas también.
La gente del equipo Kali contactaron primeramente a COCO porque todos se conocían.
Ellas no se esperaron que COCO les contestara: —No es conveniente.
A las chicas les dio gracia.
—¿Qué no es conveniente, te sientes avergonzado de que chicas te lleven a cenar?
COCO no contestó.
La chica mandó otro mensaje.
