Gotas de sudor cubrieron toda la frente de Smith luego de escuchar lo que Z acababa de decir.
Era cierto que el estilo de Z era dejar de antemano un aviso antes de cada operación.
Y ella le decía a todos por qué lo hacía a través de diferentes plataformas.
La gente a la que hackeó eran todos grandes villanos.
Pero aun así…
Hacer eso era desafiar la autoridad de ellos.
Así que ellos tenían que atrapar a Z.
Viva.
—¿Entonces?
Smith no podía decidirse.
Pero la persona insistió.
—No pondría una bomba de tiempo aquí. Todos los casos anteriores muestran que esta persona nunca lastimaría a ciudadanos durante la misión de ella. Solo juega juegos mentales contigo.
Smith enfrentaba un gran dilema y no podía decidirse.
Aunque esa persona que contrataron era un psicólogo, ¿qué pasaría si Z de verdad hubiera plantado una bomba de tiempo en el área?