El botón del elevador fue presionado.
Fatty corrió primero a la terraza.
«¡Pero allí no había nadie! ¡Ni siquiera la sombra de un ser humano!
¿Cómo era posible?»
—CEO Qin —Fatty no tenía buen aspecto y giró la cabeza—. ¡Espada Z tiene que estar aquí! ¡No puedo equivocarme!
Decir eso era una cosa pero, ¿dónde estaba esa persona?
Fatty buscaba preocupado.
Llegó Qin Mo llegó, y sus fríos y agudos ojos miraban el envoltorio de papel del caramelo en el piso. Todavía estaba tibio.
—Alguien estuvo aquí—dijo Qin Mo al pisar el envoltorio bajo su negra bota militar. Se paró en la terraza mientras buscaba por todos lados, incluso por el campus. Con ese uniforme militar, parecía un dios—. Espada Z es un alumno.
Fatty maldijo un poco—. ¿Puedes deducirlo por esto?
—¿Hay algún profesor que se aburra tanto como para comer una chupeta? Tu objetivo estaba equivocado desde el principio —Qin Mo dirigió su mirada hacia él.
Fatty no podía soportar esos ojos que dejaban tiesas a las personas, los ojos que su CEO tenía todo el tiempo.
Qin Mo no estaba satisfecho al perder contra Espada Z.
Fatty se tocó la nariz con culpa—. No puedes culparme. Ya vi lo maravilloso que era ese Espada Z en acción, por eso pensé que podía ser un profesor. ¿Quién podía esperar que un estudiante fuera tan bueno? ¡Un estudiante! Esto es un instituto, ¡por favor! ¿Qué estudiante puede ser tan bueno como para poder competir con él?
—Fatty, ¿estás menospreciando a los estudiantes? Yo soy estudiante y soy mejor jugador que tú—el joven gatuno no estaba convencido y rasgó la pared.
Qin Mo alzó su mano de repente y sus ojos se deslizaron a un lado.
De momento, toda la escena parecía tranquila.
—Oigo algo —la voz de Qin Mo era débil, pero sonó como una orden. Lanzó una única palabra—: ¡Busquen!
Los guardias de negro se dispersaron y comenzaron a buscar en la terraza.
De repente, aguien gritó—: ¡Joven amo, está aquí dentro!
Eso era un bote de basura.
Dentro había un iPad Air 2.
Estaba en perfecto estado y en prístinas condiciones; casi no podía verse ningún rasguño. El sonido venía de la tableta y, luego de acercarse, se podía escuchar claramente.
—¿Espada Z dejó esto? —la sorpresa destelló en los ojos de Fatty.
Qin Mo nunca antes había recogido algo de la basura. Alzó sus cejas y extendió su mano izquierda y un guante negro se presentó ante él.
—¿Está apagada? —los ojos del joven gatuno estaban bien abiertos—. ¿Por qué habrá dejado su tableta aquí?"
La cara de Fatty se oscureció—: se dio cuenta de que lo estábamos buscando y borró todas las pruebas. ¡Qué astuto! ¡No me digas que él estaba compitiendo conmigo vía un Ipad!
—¿Y qué si lo hizo? —El joven gatuno no lo entendió. ¿Tenía que ser con un ordenador?
Fatty parecía serio—: Comparada con configuraciones regulares, la velocidad de operación de un iPad es cinco veces más lenta. Si él estaba utilizando un iPad, ¿te puedes imaginar cómo de bueno será con un ordenador?
Después de escuchar esto, el joven gatuno cayó en shock.
Fatty pensó en esa posibilidad y sus ojos se perdieron en una nube—. Yo no podría siquiera ser capaz de encerrarme en su difícil posición. Semejante maestro, ¿por qué no está clasificado? ¿Quién diablos es él? ¿Un estudiante de instituto?
Qin Mo se hizo a un lado. Con sus largas piernas, su perfil lucía delicado y sus ojos eran profundos y fríos como una antigua piscina. Sus dedos enguantados se delizaron sobre la pantalla del iPad y, de repente, ¡saltó una palabra!
«¡K.O.!»