Una nube de niebla roja y púrpura oscurecía la vista de Han Sen. Afortunadamente para él, aún podía usar su aura de dongxuan para seguirle la pista.
Sin dudarlo, Han Sen volvió a apuñalar al hombre. Sabía que el tiempo que podía mantener activado el modo de espíritu del súper rey era limitado. Si no aprovechara ese tiempo para dañar gravemente a su perseguidor, se encontraría en una situación desesperada cuando se acabara.
Pero el hombre usó sus piernas para patear y salir del agua. Han Sen intentó seguirlo, pero para cuando pudo salir del arroyo en su persecución, el hombre ya estaba a cien metros de distancia.
—Volveré —dijo el hombre mientras corría.