Han Sen voló rápidamente al refugio y, antes de tocar suelo, vio un látigo rojo que lo estaba por azotar. Lo esquivó rápidamente antes de girarse para ver que más se dirigía hacia él.Era una súper criatura que parecía un león, pero su crin era un nido de serpientes rojas. Esas serpientes eran las enredaderas que lo ataban.
Los movimientos de Han Sen fueron rápidos y usó Aero para esquivar cada ataque. Como un gorrión en la brisa, evadió con gracia cada golpe. Volviendo al suelo, corrió hacia adelante, desconcertando a los látigos rojos.Tras su evasión de los látigos, el suelo de repente comenzó a elevarse. Directamente frente a él, la misma tierra se levantó para formar un muro y prohibir su paso.
¡Pang!