¡Arrrr!
En medio de los rayos de plata, la electricidad recorrió y electrificó el cuerpo del espíritu. Ella levantó la vista y gritó a los cielos con dolor.El relámpago plateado saltó y crepitó a su alrededor continuamente, y con cada golpe de electricidad, aparecieron grietas en su armadura.Más espantosamente, su cuerpo se convulsionó y se contorsionóen formas retorcidas sin quererlo bajo el efecto de los rayos.