—¿Cómo te llamas?—preguntó Han Sen.
—Luo Yin—respondió rápidamente el hombre con cara de bebé; No parecía frío ni irritado.
—¿Por qué te has metido en una pelea con la gente de Genio Ángel?—Han Sen preguntó.
—Porque desprecio los problemas—dijo Luo Yin encogiéndose de hombros.
Han Sen se echó a reír y dijo:
—Si tienes miedo de meterte en problemas, quizás debas estudiar lo que se necesita para evitarlo. La caza de miembros de Genio Ángel no es la forma en que te mantienes sin problemas.
—No soy una persona inteligente, por lo que estudiar no es fácil—dijo Luo Yin con un suspiró.
Han Sen pensó que el hombre era bastante interesante, pero aún no había recibido ninguna información concreta de él. El chico no solo era divertido, ya que había una profundidad en su carácter. No era tan simple como lo dejaba ver.
—¿De verdad eres el propioDólar?—preguntó Luo Yin.
—Supongo que sí lo soy —respondió Han Sen.
