Con alguien animándose a ser el primero, varias otras personas más anularon sus contratos y abandonaron la Banda Diosa.
Pocas personas creían que Han Sen realmente podría conquistar el refugio de espíritus. Había tantas criaturas mutantes en el refugio, y un espíritu aristócrata el cual era básicamente inmortal. Esos eran grandes problemas.
Antes de que sus piedras espirituales fuesen destruidas, los espíritus eran casi inmortales en sus propios refugios. Además, nadie tenía idea de cuántas criaturas mutantes y primitivas se encontraban en ese lugar. La Banda Diosa tenía un total de doscientas personas, y a muchas de ellas aún le faltaban genopuntos primitivos. Ni siquiera podían enfrentar a criaturas primitivas en combate uno contra uno. El refugio espiritual era sencillamente un objetivo muy grande.
La Banda Diosa que tenía doscientas personas pronto perdió más de la mitad de sus miembros. Sólo quedaron alrededor de tres docenas de personas.