Antes de obtener la certificación como aristócrata de sangre sagrada, Han Sen primero tenía que hacer arreglos para Cero. Era casi imposible para él deshacerse de ella en este punto, por lo que él debe considerar cómo lidiar con el problema.
Como Cero no tenía ningún estatus legal, sería difícil para él ponerla en el hotel. Han Sen vaciló y decidió que tenía que llevarla a su casa. Le era imposible evitar irse a casa para siempre.
Después de pasar más tiempo con ella, Han Sen estaba seguro de que Cero no tenía problemas con la inteligencia, ni era una lunática o una idiota. Además, ella parecía ser bastante inteligente, simplemente no sabía mucho sobre cómo interactuar con las personas, lo que la hacía parecer extraña.
Antes de llevar a Cero a casa, Han Sen la llevó a la sala de pruebas. Planeaba hacer una prueba de fuerza simple y pedirle a Cero que tomara la prueba para determinar qué tan fuerte era ella.